Es mi momento de cerrar este capítulo del libro para siempre.
Ya es muy tarde para decir lo que no se dijo, y para hacer aquello de lo que no queda tiempo.
Voy a parar de lamentarme estar triste porque hoy ese sentimiento me acompaña.
Es parte de mí como algún día tú lo fuiste.
Y aunque nos toco perdernos, puedo asegurarte que te encuentras en un lugar de mi oculta alma, porque eres mi deseo que nunca se cumplió.
Augustus, te quiero y siempre lo haré.
Pero ya es hora de dejarte ir.