Se viaja no para buscar el destino sino para huir de donde se parte.Miguel de Unamuno.
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P.O.V Venus.
Acostada en mi casa pienso, como mi vida cambió de un momento a otro.
Nuevamente sola, y ahora en un lugar completamente desconocido.
Y yo que quería una jodida vida normal.
Abro el libro nuevamente y me vuelvo a concentrar en la lectura..
Flashback
Me encontraba con mi padre corriendo por el espeso bosque, como hacíamos normalmente todos los días a la mañana.
Cuando de repente se escuchan gritos provenientes de nuestra aldea, o sea de "Transilvania", mi padre y yo nos miramos alarmados, para después asentir y dirigirnos hacia el comienzo de la ciudad.
Una vez frente a esta, observamos, entre confundidos y enfadados el lugar, el cual se encontraba en llamas, ayudamos a salir a algunas personas de entre las llamas, ya que ser de la realeza vampirica te hace obtener un par de dones, entre ellos no quemarse, como antes dije, ayudamos a la mayor cantidad de vampiros a llegar hasta el castillo,donde era seguro, lamentablemente, no llegamos a tiempo para salvar a todos.
Subí hacia la planta superior junto con mi padre, pues había unos ruidos provenientes de mi habitación, lo cual me pareció raro, pero sin tomarle mucha importancia intenté abrir la puerta, lo cual no funcionó, al parecer se encontraba con el seguro.
Respire un poco y tome rápidamente la mano de mi padre, y pensé en mi habitación, y al instante aparecemos en ella, dentro estaba mi madre Anna usando su magia contra unos demonios, mi padre y yo nos aventamos para ayudar a mi madre.
Me tiré sobre un demonio, combatiendo cuerpo a cuerpo, pero claro, que un vampiro es más fuerte que un demonio.
-Dolor.- susurré, mirando a todos los demonios de la habitación, al tiempo en que sentía que mis ojos se volvían de un rojo sangre, los demonios cayeron al suelo retorciéndose del dolor, cuando yo apreté mi puño todos se hicieron cenizas, y yo caí de rodillas al suelo, debido a que usar tanto de este poder gastaba mucha de mi energía.
Mi padre me ayudó a levantarme, ya estando de pie hablé.
-¿Por qué nos atacan madre?- le pregunté confundida.
-Venus, te buscan a ti- me respondió ella.
-Pero, ¿por qué?-pregunté.
-Porque tú, Veex- dijo mi padre usando el apodo por el que me llamaban él y mi hermano cuando era una niña-eres hija del gran conde Drácula, y tus poderes son muy poderosos, todos lo quieren utilizar.- siguió mi padre.
-Por eso, tu y tu padre se tienen que ir, yo me quedaré aquí protegiendo al clan.- dijo mi madre.
-Pero madre, yo no me quiero ir, no voy a sentarme con los brazos cruzados a que todo esto termine, puedo ayudar.- le dije tratando de convencerla.
-No voy a arriesgar a que te pase algo hija, entiéndelo, así que tu, y tu padre se van a Los Ángeles ahora, yo estaré bien , no se preocupen por mi.- dijo mi madre.
-Pero...- iba a replicar pero unos pasos afuera de la habitación llamó nuestra atención.
-Rápido ya se tienen que ir, no olviden que los amo, cuidensen- dijo con los ojos cristalizados mi madre, yo asentí, sabía que no iba a poder hacerla cambiar de opinión.
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Dulce Cliche
De TodoTodos querían su magia..pero el su pequeño y frio corazón. Definirla en una palabra seria: Poderosa. Muy poderosa, tan poderosa que con un solo chasquido te hace añicos. Tan poderosa, que con una sola mirada te roba el corazón. Y por lucifer, estás...