Pasado

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Plano espacial. El tiempo no se rige por las leyes naturales en este lugar.

Aaron

La ilusión se evaporo en seguida, mis ojos y mente volvieron a estar en sincronía mientras recuperaba la conciencia poco a poco. Ja'zie se hallaba parada en el centro de la habitación, pero ya no nos encontrábamos solos.

Valeska, Chloe y Jared habían llegado; cada uno se encontraba a la misma distancia entre ellos y Ja'zie formando un tipo de x a su alrededor. Todos la observábamos expectantes, alertas. No me agradaba para nada la forma en que la miraban; y mucho menos el hecho de que la mirada de ella estuviera sobre Jared.

Este sonreía mientras observaba divertido a Ja'zie, su estúpida sonrisa me desagradaba casi tanto como su mera existencia. Su mirada se desvió de la de Ja'zie hasta encontrarse con la mía, volvió a sonreír. No le devolví la sonrisa, su simpatía no me engañara, no de nuevo. Él se encogió de hombros y se giró hacia Chloe. Una mueca de desprecio cambio su semblante divertido. Ella sonrió, Jared no le devolvió la sonrisa.

—Es hora de que despierten— Ja'zie empezó a emanar un brillo cegador. —Todo vuelve a comenzar y ustedes deben ser capaces de procesar y retener la mayor cantidad de información posible...

De golpe, varias imágenes comenzaban a llenar mi mente. La primera prueba. Cuando aun éramos casi cincuenta chicos de cada punto débil en el planeta. Éramos niños, no teníamos mas de once años; pero las decisiones que nos hicieron tomar, así como la información que se nos dio, sobrepasaría los limites mentales de una persona mayor.

Logre pasar, poco menos de la mitad lo hizo igualmente. Habíamos resuelto todos los problemas planteados, y de igual forma resistimos toda la información brindada. Fue la primera vez que los conocí, no sabia quienes eran o en quienes se convertirían, pero con el tiempo las distintas piezas encajaron y lo comprendí.

Fue justamente en este punto donde mi mundo cambio para siempre. Me distancie de la vida que llevaba en la tierra y descuide así mismo de esta. Cosa que lamentaría aun a día de hoy....

Chloe

Los recuerdos inundaban por completo mi mente. La primera prueba fue fácil unos cuantos problemas básicos e información fundamental, nada de qué preocuparse.

Sin embargo, durante la segunda prueba las cosas cambiaron radicalmente. Era incapaz de pasar las pruebas por mi cuenta, la individualidad parecía inútil. Necesitaba ayuda... Pero la cosa no quedo ahí.

Conocí a otros chicos como yo, corroboré algo obvio claro, pero fue un golpe duro en mi orgullo. No era ni por asomo la mejor estudiante dentro de los dos grupos de mi zona. Ni siquiera llegaba a entrar entre los mejores veinte si tomaba en cuenta a los otros veintidós grupos. Fue duro, humillante. Aun así, no me deje intimidar; poco a poco mejore y subí de posición sin importarme a quien dejara por el camino. Hasta que llegue al final; mi grupo supero al otro eliminándolo de la academia, y aunque quizá aun no lograba entrar entre los mejores diez globalmente, logre posicionarme muy bien dentro de mi grupo quedando solo por detrás de Andrew.

Creo que justo después de este momento, empecé a perder cualquier signo de empatía por los demás...

Jared

Los recuerdos de Grey'vold comenzaron a llenar mi cerebro de una forma mucho mas apresurada que las dos pruebas anteriores; lo cual era de esperarse, después de todo está junto con la cuarta habían sido las más recientes, así como las de mayor duración.

Podría decir sin temor a equivocarme, que la tercera prueba fue la más entretenida de todas. De los veinticuatro grupos tan solo habíamos quedado ocho.

El objetivo de esta se nos dio en la recta final de la historia del planeta en turno, algo irónico en mi opinión. Los ocho grupos debían afianzarse, definir los puntos fuertes y eliminar cualquier eslabón débil. Fue muy entretenido ver la encarnizada lucha interna de cada grupo, las maquinación e intenciones entre las relaciones interpersonales de los integrantes eran imprevisibles. Cualquiera podía apuñalarte por la espalda con tal de no ser desechado.

Y aunque las traiciones y mentiras fueron la parte más divertida, los lazos que se llegaron a formar entre aquellos que confiaron entre si ya sea de forma pura o con mentiras y artimañas, llegaron a ser mucho más interesantes e importantes para el clímax de la prueba.

Cada grupo había iniciado con doce o trece integrantes, pero al final de la prueba, los ocho grupos eran formados por siete almas entrelazadas por algo mucho mas fuerte que una simple amistad o imposición de las reglas. Y aunque algunos grupos poseían lazos más fuertes que otros. La fuerza de estos no era definitiva, cosa que comprobé luego.

Bueno, digamos que me tome la tarea de demostrarlo en Feaden...

Valeska

Los últimos recuerdos de la tercera prueba terminaban de afianzarse en mi mente. Tengo una relación de amor odio por esta prueba, odie la forma en que nos hicieron dudar unos de otros dentro de los grupos; pero al verlo en perspectiva esto ayudo a fortalecer nuestra amistad por encima de cualquier unión terrenal. Y aunque los métodos no son mis preferidos (además de que creo que existían muchas formas distintas de lograr su objetivo final), no puedo negar los resultados...

Los recuerdos de los ejercicios posteriores pasaron mucho más rápidos que los anteriores, y aunque estos abarcan mas del doble de años que las otras tres pruebas juntas; no conllevaron a una diferencia tan grande en el número de graduados.

Al menos hasta la cuarta prueba. No se cual fue el criterio para ponernos a Jared, Aaron, Chloe y a mi en el mismo equipo; pero lo agradezco, sin importar quienes hubieran sido sus contrincantes, Jared y Chloe hubiesen vencido de igual forma. No es que Aaron, Sara, Dimitri, Wang Fei, Blaise o yo no fuésemos capaces; pero Jared y Chloe estaban a un nivel muy por encima...

El objetivo era simple: eliminación. El equipo que eliminara al otro ganaría, y podría continuar hacia la ultima prueba. El que perdiera seria eliminado... para siempre.

Suena un poco radical, pero esas eran las reglas. No me apetece rememorar todos los detalles, por lo que ignoro las imágenes hasta que terminan.

Un destello cegador ilumina por completo mi campo de visión. La hora ha llegado. Es tiempo de escuchar las reglas para la ultima prueba. 

Crónicas de un Jugador: El principio del finDonde viven las historias. Descúbrelo ahora