Oye... ¡Aún No Te Vayas!

TRES: No es un adiós

A tu carta #1.

Bien, cuando leí tu primera carta que tenías para mí, ví que me pediste que jamás vuelva a mirar hacia atrás cuando la solucion está detrás mío, cuando fuiste tú quien causó que mi "niña cursi" saliera y se expresara de maneras que antes no conocía ni sabía que existían y hoy en día vuelvo a ti para decirte que el perdón es necesario a veces para aprender a seguir adelante.

Me dices que no mire hacia "tus recuerdos" cuando eran "nuestros recuerdos" aquellos que me hicieron feliz porque esta historia no sólo era tuya si no que también era mía, tu y yo eramos los protagonistas de ella y no tienes ningún derecho para decir que son sólo tuyos, y aunque haya dicho que eras "mi todo" dándote "besos llenos de hipocrecía" déjame decirte que también me prometiste muchas cosas que no cumpliste y yo sabiendo la verdad seguía a tus pies, comiendo de la palma de tu mano sin poner excusa alguna, confiaba una y otra vez en ti.

Sólo déjame decirte que si piensas que el amor no necesita perdonar porque si es verdadero no puede fallar, ponte a pensar una segunda vez, y esta, hazlo frente a un espejo y mira hacia enfrente.

¿Qué ves? Es alguien que ha dado y recibido amor ¿No es así?.
¿Ha caído o fallado en cualquier sentido alguna vez en su vida?, ¿Si?, ¿No?

Así es, somos personas que fallan, que cometemos errores en nuestras vidas, y si el amor no tiene que fallar, entonces tendrá que venir de algo que no puede ni deberá fallar ni caer jamás. El amor no tiene límites ni condiciones y puede llegar hasta donde menos nos imaginamos. Y así podemos formar algo perfecto a base de imperfecciones, porque los errores son los que nos hacen cada vez más sabios. Pero no por que 'fallemos' debemos aprovecharnos de los demás para cometer faltas una y otra vez, o poner excusas tontas e inmaduras así como alguna vez lo hice.

Ahora, gracias a ti y a tus palabras pude crecer rápidamente y puedo reflexionar cosas que jamás pensé que llegaría a comprender y por eso y más he llegado a un punto en el que quiero hacer las cosas diferentes, ser alguien diferente.
Fuiste y serás siempre mi primer amor, te llevaste los mejores momentos de mi vida y partes de las que no, sólo tu y yo las sabemos y prefiero que se queden así siempre.

Simplemente quiero intentarlo de nuevo a pesar de lo que haya pasado y de lo que hayas hecho, quiero volver a sentir tus caricias, tus besos y escuchar que tu voz diga "te amo" agregando mi nombre.

Aún te espero, te extraño, te anhelo y no pienso dejarlo de esta manera...

Y pueda que esto termine mal como puede que termine bien, y aún así no será una total despedida, yo te seguire viendo, seguirás pasando frente a mí pero no nos hablaremos, como si nunca hubiese pasado nada.