Dulce como el Cielo
Peligroso como el Infierno
Solo un pequeño roce y quedé a tus pies
Tus labios eran las puertas al paraíso
Fue como recibir una descarga eléctrica y sobrevivir a ella
De tus labios probé el café más dulce que haya existido jamás
Nuestras narices se abrazaron
Nuestras frentes se unieron
Era como si nuestros rostros bailaran una canción lenta
Una de la que no sabía muy bien los pasos
Y que sin embargo me enseñaste con paciencia
Ese beso derrumbó mis paredes
Las murallas que había alzado, cayeron
Tú las hiciste caer como buen conquistador
Y me rendí ante ti
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El Príncipe Solitario 1.0
Short StoryHabía una vez, en un reino muy lejano... no, en esas historias siempre alguien tiene que ser salvado y en esta historia no hay ni buenos ni malos; ni príncipes ni princesas solo personas. ¿Estás decepcionado? No deberías. Verás, que las mejores hist...