Tu interior un rompecabezas, dentro de ti faltan piezas, algunas rotas, un problema sin solución, algo confuso que ni varias mentes pueden entender, que pueden resolver. Algo tan complejo que no tiene parangón es la cuestión de ¿Por qué sigue sonriendo como si nada después de estar roto?
La razón es aquella caricia inocente que te da esa persona que tienes al lado, tu novia, una amiga de la infancia, o simplemente alguien que has conocido hace poco, un simple gesto que solo con rozarte te hace sonreír como tonto, luego al voltear la cabeza y fijarte en las caricias ves esa carita mirando lo que hacen sus dedos en tu piel, y tu pecho empieza a emitir un sonido extraño, pum... pum... algo que te resulta familiar pero que desconoces por el tiempo que hacia que no lo escuchabas, exacto esa máquina oxidada que solo te hacia cargar peso empezó a funcionar de nuevo aunque fuera un latido débil y momentáneo.
Sientes en tu cuerpo una ilusión extraña, nada propia de ti, pero si necesaria, por el hecho de poder sentir que todo da un vuelco para mejor, que en un mundo de blanco y negro llueve color.
ESTÁS LEYENDO
Entre Relatos
RandomEste libro contiene una colección de relatos variados, donde la gente se pueda identificar y/o ayudarse con los distintos casos, espero que os guste y disfrutéis. Si tenéis alguna critica o algun consejo contactar conmigo por donde quieras, contest...
