Capítulo 8: Bajo la máscara

80 6 4
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Denika: – Maestro

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Denika: – Maestro... ¿Qué pasó? ¿Qué hago aquí? – dijo aún confundida, como si despertara de dormir. Mu la miró un poco shockeado por unos segundos; no imaginaba que despierta era aún más bonita, ella lo miró con sus enormes ojos grises y algo adormecida.

Mu: – Tranquila, te golpeaste la cabeza y quedaste inconsciente... – le dijo tratando de ser lo más natural posible. Sabía que era inevitable ya, y en ese momento ella sin pensarlo, se llevó una mano a la cara porque le dolía la cabeza; allí se dio cuenta que faltaba algo, abrió los ojos muy grande y quedó paralizada un segundo. Hubo un silencio que pareció eterno.

Mu: – Lo siento, Denika... fue un accidente... – dijo mirando a otro lado.

Denika: – Oh, dioses... – dijo cubriéndose la cara con ambas manos mientras el corazón le martillaba el pecho y su mente se volvía un torbellino de dudas y miedos.

Mu: – Vuelve a recostarte y descansa, por favor. Enseguida te traeré un té. – dijo mientras se retiraba para darle un momento a solas.

Denika casi no lo escuchó, pero el dolor era más fuerte que su vergüenza y se recostó otra vez. Fue un momento intenso, no podía procesar con claridad, parecía un sueño de esos que no quería que suceda y a la vez sí; sólo que en sus sueños, el final feliz era posible, en cambio la realidad era mucho más incierta. Su maestro había contemplado su rostro descubierto y apenas era el segundo día. No era una realidad tan fácil de asumir, en especial cuando fue resultado de su propia torpeza... Mientras esperaba, se percató que estaba sin su armadura de entrenamiento y se sonrojó de solo pensar que él tuvo que quitarle todo lo que llevaba puesto.

Mu volvió con el té para ambos, estaba muy nervioso y no sabía si ofrecerle que se ponga la otra máscara o sólo se quedaría así.

Mu: – Denika ... ¿Prefieres usar tu máscara? – preguntó finalmente.

Denika: – Ya no es necesario maestro... pero sabe lo que esto significa, ¿Cierto? – dijo con la mirada algo perdida y con evidentes gestos de dolor, mientras se acomodaba para tomar el té. Él no pudo ocultar su timidez y se ruborizó sin poder ocultar la sorpresa ante tal pregunta.

[SaintSeiya] Algo Más Que GuerrasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora