-¿Porqué últimamente eres así conmigo?
-¿Así cómo?-Respondió el indiferente.
-Frío,cortante,indiferente,como si...como si ya no me quisieras.
Él simplemente se quedo mirándola en silencio, con una mirada impenetrable que la llevó a preguntar lo que pondría fin a su relación.
-¿Acaso...acaso ya no me amas?-Esas palabras ardían en su garganta esperando que lo que pensaba no fuera verdad.
-No,ya no te amo-Dijo lo más frío posible destrozandola pero aún así ella no lo demostró.
-¿Hay alguien más verdad?
-Sí
-¿Cuándo-Trago el nudo en su garganta-Cuándo fue que dejaste de amarme?
-No lo sé, solo sé que simplemente de un día para el otro estar contigo se sentía como si fuera parte de una rutina, ya no era lo mismo que al principio y luego la conocí a ella.
-Pero yo aún te amo-Dijo ella conteniendo las lágrimas.
-Pero yo no, y no puedes obligarme a amarte, lo siento pero este es el final de nuestra relación, lo superarás.
Al escuchar tan crueles palabras ella llegó a la conclusión de que él nunca la había amado de verdad cómo había dicho. Llegar a esa conclusión la decepcionó y la entristeció más de lo que ya estaba.
-Tú nunca me amaste como yo te amo a ti, porque un sentimiento sincero no muere de la noche a la mañana.
Él solo la miro y se fue, dejándola sola con un corazón echo pedazos que aún después de todo el dolor que le había causado seguía amandolo.