Capítulo 2: El Prat

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Septiembre 2018

Alfred

Los rayos de sol inundaban la vacía habitación de aquel piso de Barcelona y una sonora alarma despertaba a un Alfred aun somnoliento. Se levantó de la cama desenredando muy despacio los brazos de Amaia que le tenían atrapado y sonrió. Estaba preciosa, con los labios entreabiertos, el pelo cayendo sobre su espalda y una expresión despreocupada.

No quería despertarla así que se metió en la ducha y dio gracias a que encontró ropa suya que se había dejado en Pamplona en una de las cajas. Se vistió, se comió un par de croissants y maldijo en voz baja tener que ir a esa dichosa reunión un jueves por la mañana. Pero sabía que era importante, tenía unos días intensos, el pregón y su ultimo concierto de la gira #1016IsCommingTour en su casa, en el Prat. Y nada le hacía más ilusión que terminar la "gira" allí. Amaia estaba más que invitada, pero lo que ella no sabía es que no sería solamente una mera espectadora.

Así que sin más titubeos Alfred cogió su mochila, se acercó a una Amaia dormida y la zarandeó un poco.

-Amaia, titi.- Le intentaba despertar mientras dejaba suaves y pequeños besos en la cara de la chica.- Me voy, tengo que ir a la reunión.-

-Mmmm ¿Qué hora es?.- Contestó Amaia con sonidos casi inaudibles.

-Muy temprano, te llamo luego, mañana te vienes al Prat recuerdas? Haz la maleta, por la mañana paso a por ti no te olvides.- Le dijo sabiendo que iba a tener que llamarla para recordárselo.

Lo que pareció un "vale" salió de la boca de Amaia, se dio por satisfecho y le dio un último beso.

12:30

Una adormilada Amaia se levantó de su cama, miro el reloj espantada de la hora que era. A pesar de que aún no había demasiadas cosas en su casa seguía aún todo revuelto, río imaginándose a un Alfred desesperado esa misma mañana intentando encontrar algo. Y recordó que tenia que hacer la maleta para irse al Prat lo que quedaba de semana. Ella solamente tenía que acabar de componer unas cuantas canciones, pero aun tenía tiempo, no quería hacerlo con prisa. Así que el resto del día se dedicó solamente a acabar de desembalar cajas y a hacer la pequeña maleta para irse a casa de Alfred.

Tenía muchas ganas de ir, recordaba cuando Alfred le acompañó al Ayuntamiento de Pamplona y lo feliz que fue en aquel momento. Y ella quería que fuese un día especial para Alfred, sabía que estaba muy enfrascado en su disco y que tenia que descansar y disfrutar y ella se encargaría de ello. Y pensando en todas esas cosas cayó en los brazos de morfeo recordando a Alfred durmiendo con ella esa misma mañana.

Al día siguiente.....

Una llamada de Alfred le sobresaltó esa mañana, "seguro que piensa que me he olvidado".- pensó Amaia. Pero no, eran más de las once de la mañana cuando ya lo tenía todo listo. Sonó su teléfono una vez más, Alfred le anunciaba que estaba abajo y para no hacer esperar más a su novio cogió la pequeña maleta y bajó a su encuentro.

Un Alfred con bermudas, camiseta blanca y gafas de sol la esperaban tras su portal.

-Hola cucu.- Dijo Amaia sonriente dándole un beso en los labios.

-Bon dia, Amaix, ven sube.- Posó suavemente la mano en su cintura y pusieron rumbo al Prat del Llobregat.

Unos alegres Xus y Alfredo los recibieron en casa.

-Amaia que alegría bonica, estás guapísima.- Dijo Xus abrazándola y esbozando una enorme sonrisa.

-Muchas gracias Xus, que alegría veros.- Contestó Amaia dirigiéndose esta a vez a saludar a Alfredo mientras Xus y Alfred entraban en casa.

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