Capitulo 1

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Se movia impaciente por todo su templo, esos dias tuvo un arduo trabajo y era porque le costaba concentrarse no podia sacarse el rostro del chico que habia visto.

Joel.

Habia descubierto su nombre en otras plegarias y no pudo haber otro nombre mas perfecto para él.

Bufo y se dirigio a su estanque, paso su mano por el agua pensando en el rostro del chico y en su nombre -Muestramelo- susurro mientras el agua se agitaba brillando mostrando la imagen del chico en el que pensaba.

-Otra vez observandolo- Se alarmó al escuchar esa voz, pero se tranquilizó al ver que solo se trataba de Erick.

-Callate- rodo los ojos y siguió viendo a Joel, que parecía estar entrenando con espada -¿Estas libre?-

-No- el ojiverde hizo un puchero -Papa se enfermó y necesita que lo supla en el trabajo-

Chris solto una carcajada, ahora su amigo entendería lo que era estar verdaderamente ocupado su padre no tenia un trabajo facil.

-Suerte siendo Hermes- el ojiverde nego tocando el agua del estanque viendo al joven ahi -No lo toques- le regañó.

-Es ardiente- Erick se mordio el labio al ver los musculos del rizado moviendose al entrenar con su espada.

-No es para ti, Erick- murmuró molesto el castaño.

-Seria divertido- le dijo con una sonrisa antes de soplar sobre el agua creando ventiscas donde estaba Joel.

-Dejalo Erick- reprochó entre dientes el castaño, pero el ojiverde continuó con su accion -¡Dejalo!-

Escuchó el sonido de los truenos en las nubes, algo que pasaba cuando se enojaba, lo habia heredado de su padre.

-¿Hasta cuando trabajaras?- le dijo el castaño sacudiendo el agua borrando la imagen del rizado.

-Hasta que Hermes mejore, si esta muy enfermo-

Decirle o no decirle que los dioses no se enfermaban, era todo un dilema.

-Deberas llevarte mejor con Hades, pasaras mucho tiempo en el inframundo-

-Diablos lo sabia- murmuro el ojiverde, dio un salto para empezar a flotar en el aire -Lo bueno es que ya no caminaré a ningun lado-

-Claro-

-Deja de mirar al mortal, conoces las reglas- le dijo antes de alejarse.

-Adios Erick-

Odiaba sus reglas, el no tenía derecho a pesar de ser hijo de Zeus y el había roto todas las reglas de contacto con los mortales, tenia hijos en cada ciudad de Grecia y el no podia observar al mortal que le habia llamado la atención.

Le haria caso a Erick, dejaria de observarlo, al menos por el reflejo de su estanque porque ahora lo iría a ver mas de cerca.

Camino hasta el borde de su templo viendo el vacio antes de caer, le gustaba la sensación del aire golpeando su rostro, hace mucho no visitaba la tierra.

Cerró sus ojos y se transformó en un aguila antes de llegar a caer por completo, otra cosa que habia heredado de su padre.

Se concentró intentando rastrear la presencia del Joel volando hacia donde creia se encontraba.

Se paro sobre un arbol cercano viendo a Joel entrenar, se preguntaba porque lo hacia pero no encontraría respuestas esperando en un arbol.

Volo para estar detras del árbol y tomó su forma humana. Esperando no sorprenderlo.

-Lamento molestarte- se acerco a paso cauteloso apesar de estar siendo apuntado por la espada del rizado -Estaba buscando Rodorio y me perdi-

-Sigue directo y hay una desviación a la derecha- le respondio com un rostro serio.

-Podrias llevarme- murmuró con la voz mas melodiosa para atraer la atencion de Joel.

Una de sus funciones siendo el dios del amor era que podia hacer que cualquier mortal se enamorará de quien quisiera, aunque eso tambien le daba el poder de controlar sus corazones, bastaba una mirada o unas palabras y podia controlar sus acciones a menos que su corazon ya le perteneciera a alguien mas.

-No creo que seas tan tonto como para perderte con esas sencillas indicaciones-

Chris bufo enojado, no entendía porque era el delirio de muchas personas con la actitud que tenía. Se quitó su disfraz de mortal mostrando su verdadera identidad.

-Esa no es la forma de hablarle a un dios- reprochó el castaño.

-Entonces porque pides indicaciones si eres un dios- le respondió Joel sin prestarle importancia.

Christopher sonrió ante lo que decía, Joel no tenia miedo de enfrentarlo y ese valor le hacia parecer aun mas atractivo, se acercó a Joel aun cuando este vovio a alzar la espada en su contra.

-Ninguna de tus armas puede dañarme- alejó la espada de su camino con una mano -Tus golpes tampoco me haran daño, quieto-

Otro de los dones que poseia era el de inmovilizar el cuerpo de un mortal con su toque cuando la primera opción fallaba.

Ahora sin posibilidades de escapar podia sentirse libre de hablar con Joel, se acerco pasando su mano por los musculos de su brazo.

-Sabes que recibo muchas plegarias de personas que esperan que las ames-

-No me interesa- respondió con el ceño fruncido, queriendo ser libre de esa parálisis.

-Entrenas mucho- dio vueltas viendo el atletico cuerpo de Joel -Ya te he observado, es inevitable, aunque aun no entiendo porque-

-Quiero ser un guerrero-

-Si ese fuera tu destino los dioses te hubieran mandado a Esparta-

-No me importa-

Christopher soltó una risa de una manera extraña esa actitud de Joel lograba hacer que estuviera mas atraido por el.

-Joel, yo podria ayudarte con eso- le castaño se paró frente a el viéndole a los ojos -Sabes quien soy-

-No-

-Soy el dios del amor- soltó ofendido.

-El amor no es algo que ustedes los dioses entiendan-

Dioses & Mortales |Virgato|  TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora