Yoongi sintió que sus pies se helaban cuando vio a Taehyung y Jungkook luego de escuchar la puerta de entrada. Ambos estaban empapados de pies a cabeza, y el menor tiritaba un poco, abrazándose, mientras su padre los apresuraba a entrar. Yoongi notó que encima de sus hombros llevaba la chaqueta de Taehyung, y supo que de seguro él se la había dado, y supo que no debía sorprenderse cuando vio aquel frasco lleno de papelitos entre sus brazos, como si la prioridad fuera mantenerlo a salvo de la lluvia cuando tranquilamente podría haberlo dejado en casa.
Realmente no lograba entenderlo.
— ¡Santo Dios! ¿Por qué están...? — la señora Min se acercó apresurada a los dos menores, con toallas preparadas y les cubrió los hombros. — Están helados.
— No encontré un lugar para estacionar siquiera un segundo. — respondió su esposo, dejando las llaves y mucho menos empapado que los otros dos.
— Tuvimos que caminar una calle y no teníamos paraguas. — musitó Taehyung, casi temblando de frío, pero eso no era lo importante. — Mamá, Jungkook necesita darse un baño caliente. Estuvo resfriado y podría empeorar.
— Taehyung, tú también tienes que bañarte. Tu hermano le prestará su baño a Jungkook, tú usa el otro.
— B-Bien...
— Estás muy frío. — se quejó Yoongi luego de apenas posar un dedo en su mejilla, y miró a Jungkook. — Ven, apresúrate.
El menor asintió con la cabeza vagamente y lo siguió, subiendo las escaleras hasta la última habitación del pasillo.
La habitación de Yoongi era espaciosa y, diferente a lo que alguien creería, bastante ordenada. Jungkook vio la cama bien tendida, los muebles de un color caoba y alguna que otra fotografía en una especie de pizarra de corcho frente a un escritorio. Cerca de una de las ventanas, había una puerta pequeña que por lógica debía ser la que daba al baño.
— Conseguí el único cuarto con baño individual. — mencionó cuando obtuvo una mirada curiosa del menor. — Puedes dejar tu ropa en esa cesta y ahí tienes colgadas unas toallas limpias. Te traeré algo de ropa de Taehyung, ustedes dos deben tener la misma talla. ¿No necesitas nada?
Jungkook negó con la cabeza y entró lentamente, mientras Yoongi cerraba la puerta y daba media vuelta para salir de la habitación, entrando sin reparos en el cuarto de Taehyung y comenzando a revolver sus cajones. No tenía idea qué camiseta o que pantalón podría tomar, porque el castaño era algo quisquilloso con su ropa, y había cosas que no prestaría ni aunque tuvieran que arrancárselas.
¿Debería preguntarle? O quizás simplemente podría prestarle algo suyo, pero no estaba del todo seguro. Rebuscando entre los cajones acabó por tomar una playera blanca con estampado y un pantalón de pijamas color bordo. Luego tomó también un par de medias, no creía que fuera la gran cosa, además dudaba que Taehyung pudiera molestarse con Jungkook.
Regresando a su habitación, dejó la ropa sobre su cama y tomó su teléfono antes de volver a salir, de ese modo al terminar Jungkook podría cambiarse en paz. Bajó de regreso a la sala justo cuando Taehyung entraba también, llegando desde el pasillo, con una toalla alrededor de sus hombros y secándose el cabello.
— ¿Tan rápido?
— Mamá me alcanzó algo de ropa y fui lo más veloz que pude. — se encogió de hombros, sentándose en el sofá. — ¿Y Jungkookie?
— Tranquilo, le dejé todo en mi habitación. — dicho esto, cubrió un bostezo. — A todo esto, no me habías dicho que irías a su casa.
— Es que estabas dormido. — sonrió levemente. — No creo que te hubiera gustado que te despertara para decirte algo así.
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𝙏𝘩𝘦 𝘵𝘩𝘪𝘯𝘨𝘴 𝘵𝘩𝘢𝘵 𝘐 𝘭𝘰𝘷𝘦 «ᴛᴀᴇᴋᴏᴏᴋ» • 𝐂𝐎𝐑𝐑𝐈𝐆𝐈𝐄𝐍𝐃𝐎 •
Fanfic[Ganadora de los Taekook Awards 2021 en la categoría "Historias que todos deberían leer"] Taehyung veía a frecuentemente ese chico del año inferior. No sólo porque fuera atractivo o un estudiante nuevo trasferido hacia pocas semanas de Busan, sino p...