Más que un negocio - LGBT

lugar secreto

La semana que viene es nuestro cumpleaños número trece, mis padres organizaban todo y mi hermana y yo solo decíamos qué queríamos en la fiesta.

Pero este fin de semana que pasó fue de explorar más la finca junto a mi hermana y nuestros niñeros. El sábado levanté temprano y tuve que correr a levantar a mi hermana, ella duerme muchísimo y estoy seguro de que despertó porque era fin de explorar y a ella, tanto como a mí, ama los fines de explorar.

Es muy divertido salir a explorar con ellos, siempre nos inventan historias y tenemos unos artefactos que le llamamos "gran-tore" entre nosotros mismos lo construimos junto con mis padres, de verdad los amo, son tan cariñosos cuando logramos compartir puesto que pasan mucho con el trabajo.

El gran-tore es la unión de las palabras "magnífico" y "buscador" donde buscamos alguna cosas sobre los animales o plantas que vamos encontrando, así como también hacemos nuestros apuntes.

Es realmente divertido, ese día nos vestimos de exploradores y nos preparamos para hacer un desayuno en medio del bosque al norte de la propiedad, a este nunca habíamos ido muy largo, así que mientras caminábamos, tomábamos fotos con nuestros gran-tore además de una de las cámaras profesionales que mis padres nos compraban.

Entre lo que caminábamos llegamos a un hermoso lago, no muy grande, que era alimentado por un río que bajaba en forma de cascada, recuerdo que cuando llegamos fue impresionante, además recuerdo que a la par había una casita muy pequeña, al parecer lleva muchos años aquí, estaba ya cuerbierta la mitad por una enredadera de unas pequeñas flores rojas.

Así que le dije a mi hermana Lucrezia que fuéramos a verla y los dos nos emocionamos muchísimo, le pedimos permiso a los niñeros y ellos accedieron, dijeron que hasta aquí quedaba la expedición de hoy, que ellos iban a preparar la comida mientras nosotros veíamos la pequeña casa.

Primero investigamos por afuera, estaba en una pequeña ladera así que la parte más alta quedaba al nivel, otra más abajo estaba subida en unos pequeños troncos y también una pequeña parte de las más bajas también quedaba al nivel, se veía como un modelo hecho por mi papá arquitecto. La casa era de madera y podíamos ver que estuvo pintada de un color celeste, no tenía un mal olor, aun así de su forma se podía ver que tal vez era del tamaño de una de las habitaciones de la mansión, cuando la rodeamos y vimos que al parecer todo estaba bien, dije - hay que entrar! - di mi primer paso apurado hasta que sentí un tirón de mi hermana que me dijo - no! Piensa un poco, no sabemos que hay adentro, tenemos que ir despacio - bueno ella tenía razón así que no pude reclamar nada.

Mi hermano siempre es tan tirado a hacer las cosas sin pensar lo que puede pasar después, es muy impulsivo, pero bueno ya qué, así lo amo.
Por eso es que no pude dejarlo que entrara sin más. Los dos nos acercamos poco a poco a esa puerta. Cuando estábamos cerca él me colocó atrás de él, eso es otra cosa más, es capas de dar su vida por salvar a alguien que ama, él siempre me ha protegido y defendido; claro! Yo también lo cuido cada que puedo, no lo puedo dejar solo por su impulsividad.

Cuando llegamos a la puerta, vemos que está abierta, él me vuelve a ver y empuja la puerta con su pie, esta se abre y los dos nos asustamos y encendemos las linternas, adentro no hay nada, ni animales ni nada, todo se ve un poco viejo, así que entramos con cuidado y buscamos las ventanas que habíamos visto antes desde afuera, las abrimos y ya todo se podía ver con claridad.

Es un lugar muy acogedor, así que le digo a Galileo - este va a ser nuestro lugar secreto de hermanos! Te parece? - él me vuelve a ver emocionado y asiente, me da un beso en la mejilla y nos abrazamos.
Decidimos que lo íbamos a llenar de cosas de nosotros y venir a aquí a jugar.