Seamos realistas, busquemos lo imposible

#13

**Pov Sora**

Sobrara decir que fue la mejor navidad de mi vida… claro si pudiera recordarla ¡mi madre me noqueo!, no se en que momento fue solo se que estábamos esperando que mi linda abuelita deje de torturar a mi madre, cuando vi salir a Oba-san tranquilamente de la cocina, le sonreí esperando saludarla ahora si amenamente, me extrañe al ver como sin ninguna razón aparente ella se agacho… pero lo entendí cuando vi como venia una olla directo hacia mi, no alcance ni a moverme cuando me dio directo en la cara y todo se volvió oscuro.

Desperté por la mañana con una Pile a mi lado profundamente dormida, la cabeza me palpitaba no quise ni mirarme en el espejo cuando logre levantarme de la cama sin despertar a Pile.

Afirmándome de las paredes logre bajar, tengo un hambre que podría comer lo que sea que me pongan al frente incluso así sea la comida de Mimorin… entre a la cocina y para mi sorpresa estaba Oba-san preparando algo.

-me alegra verte medianamente bien mi niña -. Asentí mientras buscaba algo de leche en el refrigerador.- debiste ver las caras de todos cuando caíste inconsciente, tu madre estaba sorprendida, tu padre molesto, tu hermano estaba preocupado pero la que mas me sorprendió fue esa linda chica Eriko-chan quien casi se come viva a tu madre, hace bastante tiempo que no veía como tu madre era callada y reprendida por alguien que no sea yo -. Me voltee totalmente sorprendida.- pero lo mas sorprendente fue que tu madre no le respondió nada… pero bueno te perdiste la gran cena que hizo tu madre y Eriko-chan -. Mi madre dejo a alguien más aparte de Oba-san entrar en su cocina con su consentimiento o peor aun dejo que alguien más cocine con ella ¡¿pero que esta pasando?!.- es una buena chica y con lo de ayer me dejo totalmente convencida de que es la indicada para ti, tiene mi consentimiento para entrar a la familia.

-Oba-san entre Pile y yo no hay nada… y aun no se si llegue a… -. Vi como mi abuela me silencio entregándome un plato con fruta picada y un vaso de leche.

-puedo ver el mutuo amor que se tienen, retrasar lo inevitable no te llevara a ningún lado mi niña -. Me indico que vaya al living y yo solo fui hasta allí.- mañana es tu cumpleaños y te traje un lindo regalo mi niña, ahora que veo a esa chica aquí creo que no pude haber pensado en algo mejor que lo que te daré, ten toma esto -. Me decía dándome unas pastillas de seguro y eran analgésicos.

-Oba-san… tengo miedo, miedo a salir herida -. Vi como miro al techo y solo me sonrió.- ¿no dirás nada?

-tu ya tomaste una decisión lo puedo ver en tus ojos y aunque tengas miedo ahora créeme mi niña… fue la mejor decisión -. No entendía a que se refería ¿yo tome una decisión? ¡¿Cuál?!

Iba a protestar pero me calle al ver a Pile bajar las escaleras mirando a todos lados buscando algo y al verme corrió hacia mi.

-¿Cómo te sientes?, ¿te duele algo? -. Vi en sus ojos tanta preocupación hacia mí que solamente le pude sonreír, Oba-san se levanto y fue a la cocina dejándonos solas.- estaba tan preocupada y hoy al despertarme no te veo a mi lado ¡casi se me sale el corazón! Pense que te había pasado algo.

-estoy bien Pile, tenia mucha hambre además… te veías muy cómoda que no pude despertarte -. Oba-san volvió pero ahora con otro plato y un vaso para dejárselo frente a Pile.

-lo mejor será que desayunes Eriko-chan -. Pile asintió y le sonrió a mi abuela… no me deja de sorprender lo bien que se lleva Pile con mi familia, con mi madre hablan como si fueran amigas de toda la vida, mi abuela le dice Eriko-chan como si se conocieran de años… para que decir de Yuuta ese traidor la adora y mi padre… bueno el se lleva bien con todos.

Ese día la pasamos entre risas, discusiones sin sentido entre mi abuela y mi madre, peleas entre yo y Yuuta ya que el muy sin vergüenza a cada momento intentaba coquetearle a MI Pile, creo que lo fulmine con la mirada un millón de veces en un solo día… mi padre era un "metiche" cada vez que empezaba una pelea ya sea entre Yuuta y yo o entre mi madre y la abuela el le echaba mas leña al asunto con comentarios como "yo no hubiera permitido que me diga eso" "¿no harás nada? "Pero defiéndete" y cosas así que hacían que la pelea siga y siga.