Capítulo V

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Al entrar en la habitación, me encontré con una señora muy joven y gentil, no tuve que presentarme, me reconoció en cuanto entré y me sonrió como si me conociera de toda la vida.

- Me alegra que hayas llegado.

- ¿La conozco?

- No lo creo, soy Taly, era medimaga en San Mungo, atendí muchas veces a la Orden del Fénix, pero tú eras muy pequeña, con una carga muy grande encima, no espero que me recuerdes, ni si quiera tuve el placer de tratarte a ti alguna vez, pero puedo reconocer a una de las brujas más fuertes de Hogwarts.

- Gracias, creo. Esto es todo muy extraño, ¿Qué debo hacer?

- Solo párate ahí para examinar con mi varita si hay alguna fractura o hueso roto, quizás alguna herida oculta. –Le hago caso y espero pacientemente –Vaya, ¿has tenido heridas en estos dos años?

- Si, por supuesto, pero me las curé yo.

- Ya lo veo, lo hiciste muy bien, no tienes ninguna marca –Me hace señas para que me siente en la camilla esta vez, se acerca y me examina los ojos y los dientes con su varita- veo que Poppy tenía razón...

- Disculpe, ¿Quién?

- Poppy Pomfrey, me enseñó magia sanadora cuando iba en Hogwarts, después de que logré entrar a la escuela de Medimagia seguimos en contacto, y me habló mucho acerca de ti – Taly toma una silla y se sienta frente a mí, me sonríe con tanta gentileza que cualquier desconfianza que hubiera dentro de mí, desaparece –Ella decía que tenías un talento único, que serías la mejor medimaga de todos los tiempos, y tenía razón, ni los mejores sanadores son capaces de borrar tantas heridas de guerra que me imagino debiste haber tenido.

- No, no fueron tantas, solo me acostumbre a curarme tan pronto recibía una.

- Y es lo mejor que pudiste hacer –Toma mi brazo y comienza a ponerme las vacunas, la mayoría son muggles, ya que las enfermedades mágicas solo algunas pueden prevenirse con pociones, las cuales también me da –Sé que debes inscribirte en algunas actividades, si estas dispuesta me encantaría que fueras mi ayudante aquí.

- ¿Es enserio?

- Claro, si no fuera por esta guerra estoy segura de que estaría aprendiendo todo esto en la escuela de Medimagia.

- La verdad no, tenía pensado entrar en el Ministerio, en el Departamento de Criatura Mágicas, para ayudar a todas esas criaturas que son esclavizadas o tratadas injustamente.

- Es una buena opción también, pero ¿Por qué desechaste el ser una medimaga?

- Porque... quería mantenerme con mis amigos, Ron y Harry entrarían a la escuela de Aurores y trabajarían para el ministerio también, no quería irme a una escuela en el sur de Inglaterra por cuatro años.

- Es difícil separarse de los amigos, pero bueno, aquí empezarás de nuevo, y lamentablemente, ellos ya no están, así que te recomiendo rodearte de gente que te haga sentir bien, en casa, e ir por nuevos sueños, porque tengo la esperanza de que esta guerra termine algún día.

Taly me hace un par de preguntas sobre mi origen, mis padres y como llegué hasta el refugio, respondo todo sin problema, es fácil conversar con ella, pareciera que solo tiene diez años más que yo. Antes de irme me da el reloj para que pueda encontrar el camino al área de inscripción de actividades, pero antes de irme, tomo consciencia de lo mucho que postergué mi vida y mis sueños por la guerra y por Harry, así que me devuelvo.

"Corazón Destrozado" - DramioneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora