Amigos con Derechos *YoonNam*

6

🌤️🌤️🌤️

La cuarta potencia daba ese pequeño aparato y Dios estaba torturando a Namjoon.

En la habitación solo se podía sentir el agobiante calor y el aroma a sexo, con un toque a la fragancia de los dos amigos.

- Carajo ya no aguanto más - hablo en un susurro YoonGi.

Quién desabrochó su ya ajustado pantalón, lo jalo junto con su bóxer hasta las rodillas, rebotando en su ombligo, su ya dura y larga erección.

- Empezamos baby boy - y con esa corta frase Nam se corrió manchando las aperladas sábanas, hace tiempo que no escuchaba ese apodo.

~Baby Boy~

Y después de esa corta acción por parte del menor, YoonGi se inclinó unos centímetros y alineó su miembro hasta rozar su ya dilatada entrada.

Lo tomó de la cadera y se adentro de golpe hasta que sus testículos chocarán con el culo de Namjoon, era el mismo Edén y YoonGi lo sabía, estaba más que consiente de lo sabía, pues Nam era una de las siete maravillas.

No era mentira que YoonGi se llegó a, acostar con cualquiera, pero al "formalizar" con Jimin eso cambio, pues "solo tenía ojos para el", sabiendo que lo que buscaba no estaba en Jimin, ni con ninguna persona con la que estuvo.

Hasta ahora.

- Puedes sentirlo Jonnie - los dedos de YoonGi apretaron la cadera de Namjoon hasta dejar la marca de sus dedos - Lo bien que tú lindo interior se adapta en mi palpitante pene - eso último lo susurro, para que después dejara un mordisco en el hombro de Nam.

Y volvió a sentir ese escalofrío en su columna, pues la vibración junto con la  penetración era algo nuevo para el, esta vez YoonGi lo llevaría hasta el paraíso, pues no era mentira que su amigo lo hizo venir incontables veces, hasta serle ver las estrellas.

Pero esta vez era distinto, era algo más.

- Dime baby boy, sientes esa vibración - la respiración de YoonGi era agitada.

Y por un momento el menor vio el rostro de su amigo quien lamía su labio, su melena negra estaba húmeda y pegada a su frente, los músculos de sus brazos estaban un poco más marcados, y por fracciones de segundo quiso que esto no sólo fuera sexo, lo quería y demasiado para una triste realidad.

Por otro lado YoonGi, al estar dentro de Nam sentía la vibración constante en su glande que lo hizo sonreír y a la vez morderse ligeramente su labio.

Lentamente en camino su mano derecha al muslo de su amigo, un recorrido lento pero excitante, suave pero firme, cariñoso pero dominante.

Lo quería, claro era más que obvio, pero como se vería frente a los demás juntos, como se verían frente a sus padres quienes los miraron como hermanos... ¿Cómo llegaron a esto?.

Para que de un brusco jalón subiera su pierna hasta su hombro y embestirlo con más certeza.

- Ahí - dijo en un grito mezclado con un gemido, la escena era a no más poder excitante, que si fuera posible saldrían corazón es de lugares tan erógenos por parte de ambos.