El llanto de un bebé quebro la soledad y el silencio del Santuario del Partenón. Aquel hombre al escuchar ese llanto no pudo más que arrodillarse. El patriarca, levantando al bebé entre sus brazos, comprendió que no se trataba más que la reencarnación de Athena . Juntos salieron al balcón que por tantos años no había sido usado, ni siquiera por él.
Patriarca; Así que ya es hora...
Dijo contemplando las estrellas, notó como un cometa cruzaba raído el cielo, dejando tras de sí un clarisimo rastro azul. Parpadeó varias veces. Pensó que había imaginado aquello...
Diez y seis años después, un día de verano, un muchacho asiático de cabello castaño oscuro y ojos marrones, había logrado vencer a todos los aspirantes, ganándose así la armadura de bronce de Pegaso, siéndole entregada por la misma Athena quien, desde su trono en el estadio del Coliseo, junto con el Patriarca, observaba la competencia.
Un hombre desconocido, más allá, oculto entre las sombras, miraba con alegría aquella escena. Este era el antiguo maestro, el caballero Dorado de Capricornio, quien, por encargo de Athena, había residido los últimos doscientos años en los Cinco Picos de China, vigilando la Torre Sagrada. Dando así el comienzo a la Segunda Guerra Santa...
No pasó mucho tiempo después para que estos dos hombres se dieran cuenta que aquél muchacho era la reencarnación del Caballero de Pegaso, pues habían visto renacer una vez más, el amor entre él y Athena intacto, como si no hubiese pasado más de doscientos años desde la última vez que se vieran...
Así comenzaron las peleas y los conflictos bélicos entre hombres. Por primera vez se supo de la existencia de una mujer misteriosa llamada Pandora,quien jugaba un papel decisivo en este conflicto. Se trataba de la principal sacerdotisa y la más fiel seguidora de Hades o como muchos comenzaron a llamarla, hermana de Hades...
Las ordenes que se le dio este fue, que buscara la persona con el corazón más puro y frágil, siendo elegido para el alma del dios habitara su cuerpo...
El patriarca y la diosa dedujeron que su verdadero cuerpo se encontraba en los Campos Elíseos, y decidieron que, partirían hasta allá para vencerlo. Pero Hipnos y Thanatos eran los guardianes y segundos al mando de Hades. Prontó llegó el momento en el que este y Pegaso se enfrentaron una vez más. Y una vez más hirió el cuerpo en el que el terrible dios habitaba...
En el último segundo, durante el ataque contra Hades, su espada maldita voló en el aire, y aprovechando la oportunidad, Hipnos la atrapa y atraviesa el cuerpo de Athena por la espalda, y desapareciendo de escena...
Pegaso;
¡!Athenaa¡!....
Se oyó un grito desgarrador. Ahora era el turno de Pegaso de verla morir....
Sintiendo que la furia y el odio se apoderaban de él, ardió su cosmos hasta el máximo poder. Con el corazón roto, dio el golpe final, destruyendo así , el cuerpo, mientras que el alma de Hades regresaba al otro mundo, jurando venganza en contra de Pegaso, quien mortalmente herido y casi muerto, sólo tuvo fuerzas para arrastrarse ante el cuerpo de Athena, que yacía en el suelo, y que ya comenzaba a desintegrarse en miles de estrellas, y solo lo miraba a él, y un segundo después, cerró los ojos para siempre...
Pegaso;
¡!Nooo...¡! Gritó amargamente,.. Athen...
En aquel instante giró lentamente mirando a Hipnos y Thanatos quienes observaban aquella escena, pero antes de que ellos dijeran algo. Pegaso solo dijo algo en susurro... Que al parecer los dioses sin interes pudieron escucharlo
Thanatos se acerco y Pegaso sintió como su carne fue atravesada por el filo de la lanza quién con despreció dijo
Thanatos;
Muere basura.. Y de un tiro la sacó bañada en sangre...¡! Simple Humano...¡!
Terminó dejando una enorme herida en la espalda de Pegaso, de la cual emanaban abundantes y densos ríos manchando su armadura divina. Sólo así había dejado de brillar claramente, signo de los rastros de su cosmos.
Hipnos y Thanatos se retiraron tras un agujero que los transportaba a otra dimensión. "HASTA LA PRÓXIMA"... Se despidieron sarcásticos y al segundo, ambos desaparecieron. El Caballero de Pegaso, una vez más, había muerto...
Por otra parte los Santos Dorados de Aries y Virgo únicos sobrevivientes, una vez más uno tomo el puesto de Patriarca y el otro fue a los Cinco Picos a vigilar por encargo de Athena la Torre Sagrada...
Continuará...
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The Love Of A Goddess
RomanceSegún la leyenda contada desde principios del siglo la Diosa de la Tierra se enamoró de uno de sus caballeros...