Quitando máscaras || Uta no prince-sama ||

Capítulo 17 Fortaleciendo lazos

—Reiji-kun... Necesitamos hablar.

El chico aceptó como si nada, pero sabía a dónde iba aquello.

Salieron de la mansión y una vez se alejaron lo suficiente se detuvieron.

—¿Y bien?

—Quiero saber por qué me besaste esa vez. Escucharé lo que sea que tengas que decir —fue directa, como esperaba que él lo fuera con ella. Sin embargo él se tardó más en responder.

La miró por unos segundos, dándose cuenta de lo que quería escuchar casi de inmediato. "¿Qué planeas hacer con tus sentimientos por ella?". La frecuente pregunta de Ranmaru llegó a su cabeza. Él quería ir en serio... Y era por ello que mentiría por ahora. Se había descontrolado cuando la besó y terminó por asustarla. Sabía lo que para ella significaba su trabajo en ese momento y no se arriesgaría a que por su culpa ella terminara sufriendo también las consecuencias. Iría en serio con ella, sí, pero aún no era el momento para eso... No ahora.

—L-Lo siento —se rascó la nuca—. En verdad estaba feliz por el concierto y quería darte las gracias. Pensé que tal vez un beso mío podría ser... Ya sabes, como un premio.

—¿Premio?

—Para muchas chicas lo sería —hizo pucheros, a lo que la chica se llevó la mano a la frente algo irritada.

—¿Por qué pensaste que algo así me gustaría? ¡No he dejado de pensar en eso!

—Ehh~ después de todo sí te gustó —comentó en tono bromista.

—¡No seas tonto!

—Kusun...

—Tsk, sólo para aclarar, tú... ¿No lo hiciste con nada de fondo?

—Lo siento Mattsun, me pareces muy linda~ pero... No de esa forma.

Makoto lo miró sólo por unos segundos más antes de suspirar aliviada. Decidió creerle a Reiji, tal vez porque realmente no veía en sus ojos que estuviera mintiendo o tal vez porque era lo que quería escuchar desde un principio.

—Bueno Mattsu, creo que ya es algo tarde así que...

—Ah, claro.

—Buenas noches —la chica respondió lo mismo y entonces él se fue.

Una vez estando sola caminó hacia donde había más pasto y entonces se recostó sin preocupación alguna.

—¿Acaso eres un tapete? —comentaron al verla totalmente acostada a lo que la chica se levantó al escuchar la voz de Ai.

—Ai-chan, ¿qué haces aquí? Es raro verte pasado las nueve de la noche.

—Aún no necesito dormir. Acabo de toparme con Reiji, ¿pasó algo? —Makoto guardó silencio y desvió la mirada hacia el lago—. ¿Puedo sentarme?

—Claro —sin mas, el chico se sentó a su lado, sin dejar de mirarla—. ¿Sigues pensando en ello?

—No —acercó su mano hasta su cabello, quitando con delicadez un par de hojas secas (lo cual era lo que Ai estaba viendo)—. Si no contestaste mi pregunta es porque realmente no es nada o no quieres hablar de ello. Supongo que no me incumbe, así que no te obligaré a hacer algo que no quieras.

Makoto sonrió enternecida, su simple presencia lograba tranquilizarla.

—...Reiji-kun me besó... —decidió contarle. Tal vez Ai tenía razón y era algo que no le incumbía, pero por su expresión se notaba que le preocupaba lo que le pasara, así que quiso que lo supiera—. Dijo que quería recompensarme por mi trabajo y pensó que era una buena idea.