cap 5 | problemas y pruebas

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Dedicado a Gelen.

Narra Charles:

Es hermoso ver como esta castaña duerme entre mis brazos, ahora que la luz de la mañana choca de frente con mi cara es que me he cerciorado de que ya ha amanecido, pero se ve tan jodidamente hermosa así entre mis brazos que ni despertarla quiero.

¿Que estoy pensando?

Es una hija de papi y mami, esas personas no van conmigo.

Me voy poniendo de pie, liberándome de su agarre lentamente cuando... Ella abre sus ojos y me mira.

-Roncas horrible! -se burló.

-Eso no lo decías cuando me abrazabas. Recuerdo como dormías plácidamente y hasta tierna te veías.

-¿De veras? ¿No tuve ninguna pesadilla?

-No, dormías como un angelito, no parecías la chica ingreida que eres.

Me voy levantando cuando ella me agarra de un brazo y me dice:

-Espera! ¿Como me llamaste?

Iba a responder cuando abren la puerta del área de la cafetería.

-¿Que hacen ustedes aquí? -preguntó el director quien iba al junto de los de la dirección.

¡Oh No!

-No es lo que parece yo... Nosotros no hicimos nada - dijo la castaña ingreida.

-¿No es lo que parece? ¿Que haces con la camisa de él? ¡Que romántico! Solo que este Instituto no es un hotel "señorita" Keren, por lo que veo tendré que darle parte al señor Martín. -dijo el director cabreado.

-Susan!! -dijo Sheilyn con cara de sorpresa llegando a la escena. -Con razón no me fuiste a buscar anoche...

-Director déjeme explicarle yo...

-A la dirección ambos! -Dijo el director interrumpiendo a la castaña.

¿Podría ponerse peor?

Keren le explicó a Sheylin como terminamos en esta situación, la explicación fue clara y convincente hasta que ella me preguntó:

-¿Verdad cavernícola que fue así?

-¡Aun recuerdo como gemias gritando mi nombre anoche! Incluso conservas mi camisa. -dije haciendo señas hacia ella.

Entonces escuché los <<<wow>>> de asombro y sorpresa de casi todo el Instituto que al parecer se había aglomerado donde estábamos, ya que el director había hecho un escándalo.

-Idiota!!! -Me dijo la castaña dándome golpecitos con sus frágiles manos en el pecho.

Me volteé separándola de mi e intenté salir del lugar.

Entonces pasó...


Me encontraba tirado en el suelo, con la playera desgarrada y la boca ensangrentada. El chico que me golpeó de sorpresa seguía propinándome golpes por doquier. Como pude me puse de pie, y entonces empezó un gran pleito en la cafetería. El novio de la castaña era rudo, golpeaba fuerte y estaba totalmente furioso, mientras el me daba yo también le daba. Los teléfono de los chicos grababan el vídeo y unos que otros se escuchaban vociferando a su favorito.

La hija del magnate americanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora