cap 8 | ¿Te vas a rendir?

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Dedicado a: Eva Rasari.










Pov Charles:

Mi mandíbula tensa como roca, mi corazón acelerado, mi mente vuelta añicos y todo mi ser en un estado que hasta yo desconocía.

¿Y todo porqué?

El idiota de Luthor estaba acabando de pedirle a Keren un compromiso formal públicamente, lo que me dolía no era eso, lo que me carcomía era que ella estaba con ambas manos cubriendo su cara y no había ningún astibo de negación en en sus facciones más bien había algo como...

¿Alegría?

Si, desgraciadamente eso era lo que podía notar.

¿Pero porqué me sentía tan mal?

El era su novio, aquí el allegado era yo; yo fui que hice que ambos pelearan y quizás yo también soy el culpable de que ella esté alegre en vez de pensativa.

Salí de aquel lugar inmediatamente, no sabía qué hacer, me encontraba triste, abrumado, melancólico... y un sin número de cosas que no podría explicar. Era ella, era la chica que más me gustaba, aquella que había logrado hacer que mis sentimientos se desbordaron otra vez. ¡Qué pena que ese idiota haya tenido el valor para decirle que la quiere y yo no! Y no lo niego con un teatro como ese que acaba de montar hasta yo siendo mujer le hubiese dicho que sí, y no pasó otra cosa.

Ya que me le escapé a Jay y Max, no quise tomar taxi ni llamar a Marcos a la mansión. Me fui caminando a pie observando cada una de las pautas de la calle era un lugar muy bello y en ese momento de tristeza lo pude notar. << cuando estamos tristes y nuestros corazones abatidos podemos observar cada una de las cosas a nuestro alrededor y darnos cuenta el valor que tienen, de qué forma son en realidad, y qué belleza las caracteriza>>

****
Me encontraba acostado en la mansión, el Don (siempre con su antifas), estaba en la casa cuando llegué de la playa. No me hizo ninguna pregunta y tampoco le brinde respuesta a preguntas que no me había hecho, simplemente entré a mi habitación, caminé, pense, lloré y recordé aquel día en la cafetería como pude dormir al lado de Keren... No me explicó como en tan poco tiempo ha llegado a gustarme tanto.

-Señorito Charles, ¿Se encuentra ahí? -preguntó Carlos.

Saliendo de mis pensamientos me puse de pie y caminé hacia la puerta.

-Si, Carlos. Estoy aquí.

- Sólo vine a decirle qué voy para donde mi familia, y creo que esta es la mejor oportunidad para que vayas y conozcas a la pequeña Helen.

- Sabes Carlos este es la mejor noticia que me has dado en todo el p*** día.

Carlos salió de la habitación a preparar el auto, ya que él había hablado con el Don y todo estaba arreglado, incluso mi permiso. Y se había olvidado la falta que tuve ayer al instituto. Pero sabía qué esa pregunta muy pronto me la iban a hacer ¿por qué rayos había vuelto del instituto a la hora que no era? No sé si la iba a responder, pero al Don pocas cosas se le escapaban, no sé como debajo de ese antifaz sabía tanto.

Desde que cumplí con la primera regla el se siente mejor conmigo debido a que puede cumplir con una de las reglas que el quería, formar un pleito en el Priston Hi.

Cuando vine del viaje, lo primero para poder entrar al centro y volver a estudiar, tuve que llevar al Don y eso era lo que él quería, él hablo con Ana y con toda la directiva del Priston Hi.

La hija del magnate americanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora