Capítulo 36

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pv's Rachel Roth

Estos últimos días me he sentido muy mal, y con esa loca idea de que estoy embarazada me hace sentir peor, pero una parte de mí dice que es imposible porque nos hemos cuidado, y otra parte dice que si es eso, no importará tanto porque Damián jamás me dejaría sola.

Asmodeo me llevo al infierno para corroborar unos resultados que no me informó a pesar de mis amenazas. Solo se molestó y enojó para después salir con la especie de curandero demoníaco, a quien le gritó desesperadamente. Luego volvió a la habitación y suspiró con pesadez.

Asmodeo o Asmodeus es en verdad en "mi nombre" o el que representa a la lujuria, pero a mí me gusta el nombre que tengo ahora, así que Belfegor (su verdadero nombre) usa el mío. Recordado esta situación de acordar que él se quedará con mi nombre se me escapa una risita a lo que él me mira mal para luego masajear su cien.

Antes de venir aquí, Dick habló con los demonios en la sala de conferencia. Era basado en las habilidades que más debería entrenar el equipo para derrotar con efectividad a todos esos demonios.
Cuando finalizó la eterna reunió, Amon en cuestión de segundos me sujetó fuerte del brazo para llevarme al techo de la torre.

Me dijo básicamente que estaba loca, que entendía lo que tenía con Damián, pero que como era tan estúpida de dejarme embarazar de un humano con el "riesgo" de tener un hijo humano cuando tenemos que enfrentarnos a miles de demonios y entrenar a otros miles para que suba al trono, cumpliendo mi rol como princesa de las tinieblas. Así luego de que me escupiera en la cara toda su rabia, me tocó a mí insultarlo... finalmente entendió que yo no creía estarlo por varios motivos, sin embargo el miedo siempre esta.

~Tengas o no un bebé aquí ~ dijo el posando su mano en mi vientre ~ Los protegeré a ambos en la batalla y luego de esta.

Recuerdo que ante tal acto lo empujé con fuerza y lo hice a un lado, bajé las escaleras hasta llegar a la sala común y ver como los demás pecados disfrutaban hablando y riendo con los titanes. Hice un pequeño puchero al notar a Habibi algo triste o preocupado por la situación, me acerqué a él pero Amsodeus me tomó del brazo para informe que vendríamos aquí, con este tal Platón para saber que me está pasando, entonces aquí estamos, con un pecado enojado y yo sin saber que me pasa.

-¿Y bien? ¿Tan malo es para tirarle los papeles e insultar a ese "médico"?

-Eh... Rachel no sé cómo decir esto... Mierda, solo vámonos de aquí.

Nuevamente me toma de el brazo y salimos por el portal, llegamos a la torre, me siento por fin junto a Damián diciéndole lo que pasó. Claramente me pregunta por los resultados como todo el resto de la torre que hablen escucho, sin saber qué decirle le invito la excusa más barata que cruzo por mi mente para desaparecer nuevamente por uno de mis portales y aparece nuevamente aquí, en el infierno.

-¿Cómo lograré que todos estos demonio me escuchen cuando aún tengo forma de humano?

Me sumerjo en mis pensamientos un rato, pues claro que puedo "sacar" los 4 ojos amarillos y que mi piel se torne roja... pero ningún inmundo demonio le va a sorprender esto cuando mi cuerpo es aún el de una humana. Suspiro cansada de todo este cuento... quizá solo debería dejar que alguien más lo hiciera.

Me reclinó hasta atrás para apoyarme en la roca que hace atrás mío. Mis ojos me comienzan a pesar nuevamente y el estómago se me comienza a revolver. Mis respiraciones se hacen inusuales mientras que mi cabeza me comienza a matar de dolor. Agarro mi cabeza con las dos mano para lograr algo que ni yo tengo claro.

Solos tú y yo •••Damirae••• [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora