¡Welcome to the bar! [Yugkook]

F i v e

- Esto va a estar muy bueno~ -sonrió ampliamente Jackson mientras caminaban con rumbo a un lugar donde su noche podría cambiar.

Aquel famoso bar donde un montón de chicos y chicas de diferentes edades daban de sus servicios sexuales a cambio de cierta cantidad de dinero o que le pagaras una bebida así soportar la noche.

Desde lo ocurrido hace un par de semanas el menor del grupo de amigos no había dejado de pensar en lo ocurrido en ningún momento. Así que, apenas se dio la oportunidad de salir entre todos a liberar sus penas en alcohol o música fuerte no dudó ni un segundo en sugerir ir a ese bar al que tanto se había negado asistir la primera vez por "la prostitución" que no le llamaba la atención, incluso recuerda entrar con un rostro asqueado mencionando que quería irse lo más pronto posible.

O al menos hasta que su vista se clavó en un chico de estatura pequeña -no tanta- daba justo en su mentón, teniendo la idea que era alguien perfecto de estatura como para dejar besos por toda su frente cubierta por su cabello castaño mientras sus largos dedos acariciarían esas rellenas mejillas merodeando el lugar como un pollito asustado.

Su aura de inocencia pura, brillitos en sus ojos curiosos y sin duda esa linda boquita le llamó la atención apenas pisó el lugar. Si se lo preguntan, desde esa vez tan mágica tenía muchísimas ganas de regresar a donde fue feliz, volver hablar con aquel lindo y pequeño conejito que le agitó su corazón tanto con su voz como con su apariencia y personalidad, sin embargo, en el mundo tan cruel de los negocios en el que vivía no se le permitió encontrar un tiempo libre para llegar hasta él como un príncipe azul de cuentos de hadas para liberarlo de la torre luchando contra el feroz dragón.

Su trabajo en la oficina le ocupaba todo su tiempo y ganas de levantarse de su cama por las mañanas, no había momento donde pudiera darse una escapada para divertirse, menos en esos momentos donde estaba pasando por cierta crisis económica (la cuál no era tan problemática, pero debía percatarse de que todo estuviera en orden sin cometer errores porque la situación podría empeorar, sus empleados serían despedidos o se marcharían y él tal vez quedaría en las calles) Estaba en un momento importante en su empresa y el bar quedaba lejos de su casa.

Agregando que era alguien inexperto y nuevo que fue cedido a un cargo importante por parte del jefe del lugar, aun se pregunta internamente si su jefe lo subió de puesto porque quería verlo sufrir o porque realmente vio su desempeño en el lugar.

No obstante, el papeleo se terminó, su jefe se estaba encargando de todo ahora y su trabajo lo pasó a alguien más temporalmente. Eran como unas minis vacaciones de las cuales no dudó en aprovechar, así cuando su mejor amigo Jackson preguntó qué harían ese fin de semana no dudó en casi gritar que quería ir al bar donde encontró al chico más hermoso que sus ojos vieron alguna vez.

Con burlas entre medio por parte sus amigos al ver ese cambio repentino de emoción (considerando que el señor Kim el primer día que fue dio comentarios denigrantes del lugar) decidieron aceptar, después de todo uno que otro había encontrado su persona ideal en el lugar también.

- No lo dudo. -sonrió en grande el menor de sus amigos en lo que iban en su auto junto a Jackson rumbo al lugar donde se encontrarían con los demás, aunque YuGy no iba dudar en que apenas pisara el lugar correría a los brazos de su pequeño conejito.

Su corazón estaba latiendo con muchísima fuerza contra su pecho trasmitiéndole sentimientos agradables y a la vez un poco sofocantes debido a los nervios que tenía de volverlo a ver, pero su enorme sonrisa en sus labios no se la podía sacar nadie.

- ¿Realmente hay chicos buenos? -cuestionó otro de sus amigos que estaba en los asientos de atrás fijando su vista en la ventana. JaeBeom la primera vez no los había acompañado por cuestiones de trabajo, así que apenas se desocupó y lo invitaron no dudó en subirse al automóvil de su menor para seguirlos sea donde fuere.