La mejor decisión (Lemon)

Cap 8

En la madrugada un chico peli azul observaba como dormía su compañero de habitación. El peli blanco abrió sus ojos para volverlos a cerrar para retomar su sueño

Valt vió la hora en el reloj que se encontraba en muble el mismo que separa a Shu y a él. La hora marcaba las 4:30 de la madrugada, se reincorporó en la cama para laventarse y dirigirse al cocina por un vaso de agua

Cuando salió de la habitación, el silencio en todo el pasillo era tan tétrico que sentía un escolafrio recorrer todo su cuerpo, trago saliva y siguió con pasos lentos y seguros. Cuando llegó a la puerta, escuchó ruidos dentro que casi le provoca un susto grande, iba tocar cuando alguien abrió de golpe la puerta. Valt soltó un grito grande que casi despertaba a todos pero la persona que estaba enfrenté le tapó la boca

Rantaro: Cállate Valt – le dijo en voz baja

Valt al escuchar esa voz y ver de quien se trataba, se tranquilizó. Rantaro se separó de el retirando su mano de su boca

Valt: Casi me matas del susto – le contestó de igual forma – ¿Que haces?  – preguntó recordando los ruidos que escuchó

Rantaro: En la cocina ¿que no ves? – respondió muy obvio

Valt: Entonces... – lo observó de pies a cabeza – ¿A donde llevas eso? – señalo las cosas que cargaba consigo

Rantaro: Que te importa

Valt: No seas grosero, y dime

Rantaro: Deberías estar dormido

Valt: Me dieron ganas de tomar agua es todo... Oye no me cambies de tema y dime

Rantaro: Es imposible contigo – rodo sus ojos – es para Wakiya

Valt: ¿Para Wakiya? ¿Por que? ¿Para que quiere eso? – pregunto sin entender nada

Rantaro: Oye amigo nunca te han dicho que no debes meterte en los asuntos de los demás

Valt lo observo con los ojos entre cerrados

Valt: Algo me ocultas – recordó lo que le dijo su amigo Shu – ¿Por que todos me ocultan algo?  ¡SIEMPRE SOY EL ÚLTIMO EN SABER TODO! – grito

Rantaro: Cálmate amigo– suspiro – te diré, lo que pasa es que Wakiya desde hace una hora tiene fiebre y no le baja la temperatura, así que le llevó estas cosas – habló con preocupación

Valt: ¿Por que no le avisas... – le interrumpió

Rantaro: Ya le dije y no quiere que nadie se entere, eso me pidió él

Valt: ¿Por que te lo dijo a tí? ¿Por que no quiere que nadie se enteré? ¿Por que tu lo cuidas? Esta enojado contigo ¿que no? ¿Por que te preocupa? – le interrogó a su amigo rubio

Rantaro: Cálmate, ni loco te responderé todo eso. Me preocupó por el por que me gusta y quiero que este bien

Valt: ¿Te gusta Wakiya? – pregunto sin creer lo que escuchó. Rantaro asintió – ¿por que últimamente a todos les gusta alguién? – se pregunto a si mismo

Rantaro: ¿Por que lo dices? Y no me digas que nadie, recuerda que hace unos segundos atrás acabo de confesarte quien me gusta

Valt: Lo digo por Shu, el también me dijo que le gusta alguién pero el no me dijo de quien se trataba

Rantaro: Se paciente con él, tampoco es fácil decirlo, lo digo por experiencia

Valt: Entiendo

Rantaro: Bueno me voy Wakiya me necesita – Valt le sonrió y levantó sus cejas varias veces

Valt: ¡RANTARO Y WAKIYA POR SIEMPRE! – grito – ¡Te apoyo! – ánimo el peli azul

Rantaro: Si gracias pero PODRÍAS CALLARTE

Valt: ¡Ups! Perdón – sonrió inocente

Rantaro se marchó deprisa a ver a su querido peli dorado que lo esperaba con ansias ya que su fiebre no disminuía

Wakiya: ¿Por que tardaste? – habló con su voz débil. Su mejillas rojas eran evidentemente

Rantaro: Me quedé hablando con Valt pero ya estoy aquí – le tocó la frente – sigues igual, no puedo dejarte así

Wakiya: Tranquilo ya estaré bien, se va pasar

Rantaro: Eso dijiste hace una hora – se sento a un lado de el. Colocó la cabeza en su pecho para descansar mejor – trata de dormir, yo estaré aquí

Wakiya: Gracias – cerró sus ojos – Eres lindo conmigo y te lo agradezco

Rantaro al escuchar decir eso de la boca de la persona quiere no pudo evitar sonreír. Paso una mano por el cabello de wakiya para que se sintiera más tranquilo

Cuando por fin tomó su agua volvió a la habitación que compartía con su amigo peli blanco pero se llevó una sorpresa grande cuando lo vio despierto sentado. Valt hizo una mueca cuando lo observó de pies a cabeza

Shu: ¿A donde fuiste? – pregunto

Valt: Solo a tomar agua

Shu: ¿Estas enojado? 

Valt: No para nada, ¿Por que lo dices? – camino hasta su cama para sentarse en la orilla

Shu: Pensé que si

Valt: Oye Shu se que la otra vez me dijiste que te gustaba alguién, y no te voy a obligar pero también me siento decepcionado por que soy tu amigo y eso significa que no tienes confíanza. Aún que eso sea así no importa, pasé lo que pasé estaré para ti, nunca te abandonaría. Nuestra amistad va más allá de cualquier cosa, no existe límite para decir cuando renunciar – suspiro – quiero seguir contigo hasta el final – observó a Shu con una sonrisa

Shu se quedó sin palabras por le que acaba de decir Valt

Shu: Gracias Valt – agachó la cabeza

Valt: ¿Por que estas rojo? – le preguntó

Shu: ¡¿Que?! ¡NO ES CIERTO!  – se tiro a la cama de nuevo, tapándose por completo con la sabana

Valt sonrió por completo por que era la primera vez que miraba a Shu con ese semblante tan tierno. Se acercó a él y se colocó a un lado

Shu: ¿Que haces? – le preguntó retirando la sabana de la cara

Valt: Solo dormir

Shu: ¿Aquí?

Valt: Si, solo por hoy es que ya no tengo sueño – observó el techo – todo por culpa de Rantaro – susurro

Shu: ¿Por que tiene la culpa? – preguntó escuchando lo que dijo

Valt: Cuando fuí, el estaba ahí y me asustó

Shu: Ya veo – observó a Valt con su cabello suelto para después ver el techo de igual forma – Valt cuando amanezca podemos salir a caminar

Valt: ¿Eh?... Si claro Shu

Después de eso se quedaron dormidos juntos