La mejor decisión (Lemon)

Cap 13

Valt: ¡SHU! – gritó desde la habitación

Shu se encontraba con Daigo y Rantaro en la sala palaticando sobre los lanzamientos de sus Bey

Shu: Ahora vengo

Rantaro: Ya va detrás de su príncipe azul – le dijo al momento de soltar una carcajada – obedeciendo la órdenes de su novio, lo que sea Shu lo hará

Shu: Cállate Rantaro tu estas igual que yo o incluso peor

Rantaro: ¿A que te refieres?

Shu: Tu también vas detrás de Wakiya de lo que sea. Si Wakiya quiere un vaso de agua ahí vas tu. Si quiere esto y lo otro ¿quien se lo consigue...? – contraatacó

Rantaro solo lo ignoro y Shu sonrió

Wakiya: ¿De que hablaban?  – pregunto cuando llegó con ellos

Shu: Nada importante – se encogió de hombros, para despues irse

Daigo: Yo también me iré, necesito dormir – dijo para salir del lugar

Rantaro: Oye, oye Wakiya estamos solos – dijo con una voz bastante seductora

Wakiya se cruzó de brazos sonriendo

Wakiya: No seas estúpido – cerro sus ojos – ya no tengo miedo, así que si crees que con eso me vas intimidar, estas equivocado

Rantaro: De acuerdo – sonrió – me voy

Wakiya: ¿A dónde? 

Rantaro: Por ahí, ¿Quieres venir conmigo? – le extendió su mano hacia él. Wakiya dudo por un momento

Wakiya: No creo... Estaré en mi habitación – se alejo de el

Rantaro: Bien – habló mientras lo miraba alejarse

Cuando Wakiya caminaba por el largo pasillo escucho unos gritos, se detuvo para escuchar bien y descubrió que venían de la habitación de Shu y Valt. Cuando estaba a punto de tocar, abrieron la puerta saliendo la persona a toda prisa, chocando con el

Wakiya: ¡Cuidado!  – exclamó con dolor por el golpe

Valt: Perdón, perdón es que... ¿Que haces aquí Wakiya?

Wakiya trato de levantarse pero solo logró volver a caer, debido a que Valt estaba ahí impidiendo a que se levantará. Wakiya lo empujó para volver a levantarse, sacudió su ropa y después trató de ayudar a Valt

Wakiya: Escuché unos gritos ¿por que estas despeinado? ¿Por que tienes la camisa al revés? – le observo de pies a cabeza

Valt: ¿Eh?  Por nada olvídalo, solo estaba dormido y... Me dieron ganas ir al baño. Me voy – salió corriendo

Wakiya: ¡Oye idiota cada habitación tiene su baño! – grito

Wakiya lo ignoró y siguió su camino hasta llegar a su habitación cerrando la puerta detrás suyo, dejando caer todo su cuerpo en la cama

Wakiya: Cada vez que le niego algo o no le hago caso, me siento mal – habló por si mismo – Como me gustaría ser más abierto con él, Pero... Cada vez que lo intento yo mismo me cierro y le niego todo y no acepto por lo menos su ayuda por más mínima que sea. Cierro mis ojos para no verlo por que no me gusta mostrar mi rostro cuando el esta cerca

Wakiya escuchó gritos y golpes y salió de inmediato para observar a Valt corriendo sin camisa persiguiendo a Rantaro y Shu le gritaba a Rantaro que lo dejara en paz

Valt: ¡OYE ESO ES MÍO!  – grito molesto

Shu: Déjalo Maldito Rantaro. Valt no quiero que nadie más te vea

Wakiya observo a Rantaro como trepó hasta un árbol eso le hizo recordar la vez que también se subió con el para bajar un globo. Soltó una carcajada estruendosa cuando recordó aquel momento, Rantaro lo escuchó inmediatamente volteo, distrayendose para caer del árbol arriba de Valt y Shu. Wakiya paró de reír y cuando los vio volvio a reír

Shu: No es gracioso Wakiya – dijo molesto

Rantaro rápidamente se levantó tirando la camisa de Valt en su cara dejando extrañados a los dos por su actitud, mientras Wakiya reía, Rantaro se acercaba a él para abrazarlo. Wakiya dejó de reír para ponerse nervioso

Rantaro: Tu risa fue la gota que derramó el vaso – susurro para tomarlo del brazo y jalarlo

Wakiya: ¡SUELTAME!  – intentó soltarse de su agarré, por más que forcejeó era inútil. Cuando paso por un lado de Daigo este le pidió ayuda con la mirada pero el no entendía nada – ¿A donde me llevas? Rantaro esto ya no es divertido – dijo molesto

Cuando llegaron a la habitación Rantaro cerro la puerta con llave, asustando más al peli rubio

Wakiya: Muévete, quiero salir

Rantaro lo tomó de ambas muñecas para que dejará de moverse y lo empujó contra la pared

Wakiya: Si... Si quieres saber por que me reí, es por lo de un recuerdo – habló con miedo – nada importante. Recordé la vez que subimos a un árbol a bajar un globo y yo tenía miedo a la altura

Rantaro: Ya veo, de acuerdo no haré nada malo – se alejó – solo por pensar en mi por un instante me basta. Pero es raro ¿sabes? – Wakiya lo observo con atención – digo es raro por que te divertiste de tu propio miedo

Wakiya: Quería... – observo el piso sonrojado – recordar un momento contigo. Me siento mal cada vez que te niego algo y cuando te ví feliz quería recordar algo junto a tí 

Rantaro abrazo a Wakiya bien fuerte que este se sorprendió pero después de unos segundos correspondió al instante, su olor llegó a sus fosas nasales quedando encantado al olor a chocolate que el tenía

Rantaro: Gracias Wakiya – se separó de el para verlo a los ojos – por eso me encantas, claro hablando técnicamente de tus sentimientos por que no puedo decir de otra cosa... – alzó ambas cejas en señal de picardia

Wakiya: Aléjate de mi idiota, no me gusta tu manera de verme

Rantaro: Perdón – le sonrió – me alegro de que te acuerdas cosas del pasado que vivimos juntos

Wakiya: Como sea

Rantaro: ¿Entonces?

Wakiya: ¿Que?

Rantaro: ¿Que sientes por mí? 

Wakiya: Nada olvídalo, no seas tonto

Rantaro no quería insistir tanto y mejor se alejó para irse de ahí. Wakiya de nuevo se sintió mal por rechazarlo, con un poco de temor le tomó del brazo para que se quedará

Rantaro: ¿Que pasa? ¿Te sucede algo? 

Wakiya bajo la mirada para respirar profundo y volvió a subirla con más decisión, trago saliva para poder hablar

Wakiya: Eh... Quédate no te vayas. ¿Quieres dormir conmigo? – expulso todo el aire para preparar lo que iba decir – Estoy dispuesto en obedecer tus órdenes esta noche, adelante puedes pedirme o hacer lo quieras conmigo ¿Aceptas?