A la mañana siguiente, el grupo se dirigió al lago junto a cinco centauros, entre los cuales se hallaba Diana y Marcus, el jefe de la tribu. Conforme iban avanzando en el camino se percataron de que el sol se ocultaba entre las esponjosas nubes. Por ellas, se filtraban unos diminutos rayos que formaban tonalidades amarillas y anaranjadas. Por lo que, el cielo parecía una hermosa obra de arte. Presentaba una amplia gama de colores que contrastaban entre sí: el gris de las nubes, el celeste cielo, el amarillo y el naranja de los rayos de sol.
Una extraña ave la cual estaba posada en una de las ramas de un árbol cercano a la laguna, despertó con su hermoso canto a algunos animales que aún soñaban. Otros pájaros vecinos se reunieron con él para entonar la misma melodía, como si fuesen uno sólo. La laguna quedó repleta por los cantos de los animales, mientras que algunas aves juguetonas revoloteaban cerca de la catarata y la orilla del lago.
El grupo y los centauros se acercaron a una distancia prudencial del estanque pues la corriente de agua empezó a fluir con bastante fuerza. Entonces de la catarata provino un estruendoso sonido que interrumpió la bella melodía. Todos se acercaron para escuchar con más detenimiento. Sin embargo, el sonido era igual que el de unas cadenas arrastrándose, pero ¿Cómo era eso posible? Luego se produjo un breve silencio, no obstante, la catarata ya había desaparecido y en su lugar se dejó ver un enorme hueco, por el que el grupo se disponía a infiltrarse.
– Esperad – dijo uno de los centauros: - pues a partir de aquí sólo podrá acompañaros Diana – la criatura la señaló – ya sabréis que a las amazonas les desagrada la presencia de hombres en su urbe así que no tenemos más remedio que esperar aquí.
– ¿Eso quiere decir que mi hermano también debe quedarse con vosotros? - preguntó Ariadna mientras se humedecía con la lengua el labio inferior.
– Claro, todos los hombres sin excepción - Ante la respuesta Ariadna comenzó a morderse los labios y a mirar a su hermano, daba la sensación de que mediaba con algún conflicto interior - ¿Qué ocurre? - Le preguntó el mismo centauro que le respondió, el centauro de pelo escarlata y pecas que estaba junto a Marcus cuando los interceptaron por primera vez en el lago.
– No estoy segura de dejar a mi hermano solo en el bosque, si le ocurriese algo no me lo perdonaría.
– Sé que nos conocemos desde hace muy poco, pero nosotros nos quedaremos aquí con él, no le pasará nada malo. Conocemos el bosque como si fuera la palma de nuestra mano y te aseguro que este es el lugar más seguro.
– De todas formas, no se quedará solo, yo también estaré con él y te aseguro que lo protegeré como si de mi propio hermano se tratase – Dijo Dante mirándola directamente a los ojos y apoyando su mano al hombro de la muchacha. Ella lo apartó con un movimiento brusco y le devolvió una mirada torva – De hecho, tú eres quien me preocupa.
Uno de los centauros frunció el ceño y dijo - ¿A qué te refieres?
– No, no es nada. – Entonces Ariadna cambió de tema rápidamente: - Ciro, si Jacky está contigo, yo me quedaré más tranquila ¿De acuerdo? – el niño asintió y depositó un beso en la mejilla de su hermana.
– No te preocupes, estaré bien ¿No ves que estoy en buenas manos?
– Eso espero – le susurró Ariadna al oído – Si ves cualquier cosa extraña o cualquier indicio que te haga sospechar, huye. Ni se te ocurra esperar a que volvamos – Ella le acarició con cariño la cabeza y le besó en la frente – Estaremos aquí antes de que te des cuenta.
El chico hizo un gesto de despedida con la mano derecha y contempló la silueta de su hermana alejándose por el hueco. Cuando no era más que un diminuto punto, la catarata volvió a aparecer, Ciro se acercó rápidamente e intentó pasar por ella, pero el hueco ya se había cerrado por completo, en su lugar había una resistente roca. Dante también se acercó y abrazó al niño con ternura, a Ciro se le escaparon unas lágrimas, tenía la extraña sensación de que jamás volvería a ver a su hermana. Jacky permaneció al borde, mirando recelosamente el agua, pero sin atreverse a meterse dentro del lago.
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La reliquia encantada
FantasyEn Irëdia, un reino mágico y sombrío, estalla una cruenta batalla entre humanos y demonios. El conflicto da lugar al gobierno del tirano rey Baltor, cuyas ansias de poder y control amenazan con resquebrajar los cimientos de las alianzas y la paz de...