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Jeongin estaba esperando al mayor en el lugar en el que habían acordado encontrarse. No tenía ni idea de dónde iban a ir o de qué trataría la cita porque Hyunjin había insistido en que todo fuera una sorpresa. Ni siquiera sus pucheros lograron convenverlo.

Se había esmerado en elegir una ropa bonita para su hyung, incluso Minho un "ícono de la moda" lo había ayudado.

Su peinado, su ropa, Jeongin se veía increíble. Era el causante de muchas miradas y comentarios de chicas que pasaban por su lado que hacían que el menor sonriera, probablemente al mayor también le gustaría como se ve.

Luego de esperar aproximadamente unos 5 minutos pudo visualizar a Hyunjin acercándose rápidamente con un poco de sudor en su frente.

-¡Jeongin! Dios mio perdóname por llegar tarde me atrasé con una de las cosas que tenía preparadas y yo-

El menor sólo lo veía con una sonrisa mientras el otro hablaba muy rápido tratando de explicarle todo.

-Tranquilo Jinnie, sólo fueron 5 minutos y además ¡ya estás aquí!

-Lo siento de verdad pero... te ves precioso Jeongin.

***

Alrededor de las 5 de la tarde los dos llegaron por fin al lugar en el que Hyunjin tenía todo lo que había preparado.

Era un lugar preciosísimo al aire libre, a esa hora ya el cielo empezaba a pintarse de tonos rosados y anaranjados para dar paso al manto negro decorado por estrellas brillantes y una luna hermosa.

En ese lugar habían muchas flores de distintos colores y un quiosco precioso al que en ese momento se dirigían.

El quiosco estaba decorado con flores, luces y velas que aún no habían sido encendidas porque aún no llegaba la oscuridad. En el centro había una mesa con un mantel blanco y dos sillas, en el centro de la mesa habían más velas y ya estaban colocados unos platos y cubiertos para comer.

Todo estaba perfecto, Jeongin quería largarse a llorar porque Hyunjin era un maldito detallista. Nunca nadie había hecho nada así por él y justo llega este chico tan irreal luciendo tan maravillosamente increíble y teniendo los más lindos y puros sentimientos. Quería abrazarlo y encerrarlo en una pequeña burbuja para protegerlo de cualquier daño que pudiera hacerle una persona.

¿Cómo alguien tan increíble podía existir?

Hyunjin miraba con una sonrisa todas las reacciones del menor y su corazón se aceleró a niveles inmedibles.

Jeongin estaba como en un trance viendo cada detalle del lugar por lo que Hyunjin aprovechó y lo abrazó por la espalda.

-Innie ¿te gusta?

-¿Bromeas? Me encanta, Hyunjin nadie nunca había hecho algo así por mi

-Innie eres una persona maravillosa te mereces esto y muchísimo más

-Dios, eres increíble

El menor se volteó para abrazarlo. Siendo él más bajo encajaban perfectamente, los dos eran el uno para el otro.

-Epaaaa

Jeongin se soltó del abrazo para voltear hacia donde había sonado esa voz encontrándose a Chan. Llevaba una camisa de manga larga blanca con las mangas recogidas, un pantalón negro ajustado y un delantal del mismo color, como si fuera un camarero o algo por el estilo.

-¡CHAN! TE DIJE QUE NO ARRUINARAS LAS-

-Lo sé, no tienes que repetirlo, sólo les iba a preguntar si sirvo la cena ya o aún no

-Espera un rato

-Bueno, sigan con lo suyo veré twitter un rato

-Dios... no sirve para esto

-Jajajaja no te preocupes hyung. Chan hyung es gracioso.

-Ya casi anochece, ven acompañame

Hyunjin guió al más bajo hasta otro lugar, Jeongin pensó que irían al quiosco de una vez pero pasaron al lado de él y siguieron. Había una especie de mirador, Hyunjin había puesto unas cuantas mantas y almohadas en el césped por lo que fueron hacia allí. Se sentaron y ambos veían como poco a poco se hacía de noche, como los colores del cielo cambiaban.

-Recuerdo que mientras hablábamos un día sobre diferentes cosas tú me dijiste que tu cita perfecta era algo tan sencillo como sentarse juntos a ver el cielo, a ver como amanecía o como anochecía, a ver las estrellas o ver las nubes pasar. Y es un poco complicado por varias cosas venir aquí de madrugada por lo que te traje ahora. Sé cuanto amas el cielo Innie, por lo que quería que nuestra primer cita fuera aquí. Este lugar es precioso y estar contigo acá lo hace más especial.

-Todo es tan perfecto Hyunjin, te acordaste de todo, eres el mejor chico que he conocido.

Y en ese momento en el que la noche ya había caído ambos chicos entregaron su corazón al otro. El corazón de Jeongin permanecía sólo a Hyunjin y el de Hyunjin a Jeongin, no había nadie más, era una ecuación de dos.

Los dos sellaron esto con un pequeño beso que sólo fue presenciado por la luna y las estrellas que se encontraban en el cielo.

Y puede que también por un Chan que se encontraba observándolos emocionado detrás de un árbol, pero eso ambos no debían saberlo.

Destiny; HyunInDonde viven las historias. Descúbrelo ahora