She

10 | Volturis

Capítulo diez.

   Habían pasado dos semanas desde que aquella extraña chica apareció, aparentemente los Cullen hicieron la conclusión que solo era un vampiro que paso por Forks, sin embargo Camila no dejaba de pensar en aquellos ojos rojos, y en aquella frase, seguía en su mente día y noche.

—¿Cariño?—pregunta Edward colocándose a su lado, colocando una mano en su cadera—¿Todo en orden?—deja un beso en su hombro.

—No lo se—ríe levemente-Sabes, me creerás loca pero sigo pensando en aquella chica—mira sus manos mientras juega con ellas—Estos últimos días han sido estresantes para mi, solo, cierro mis ojos y el recuerdo de cuando huía de los Volturis viene a mi mente, una y otra vez. Estoy exhausta—entrelaza su mano con la de Edward, quien deja un tierno beso en su frente.

—Amor jamás diré que estas loca—acaricia su mano para acercarse y besar sus labios, tiernamente y con amor, su agarre en la cadera de la vampiresa se hace más fuerte al mismo tiempo que su novia coloca su mano en la mejilla del vampiro.

   Sonríen a medio beso para continuar besándose, dando gracias por no tener la necesidad de respirar.

   Se alejan lentamente sonrientes para mirar hacia abajo, como Esme y Carslile regresaban de su cacería, la vampiresa mira a Edward, quien sonríe atrayendola a el, abrazándola suavemente.

—Por fin tengo tiempo a solas contigo—la chica ríe en los brazos de su compañero, sus manos rodeaban la cintura del vampiro, mientras este dejaba suaves caricias en la piel de porcelana de su novia.

—Te quiero demasiado Cam—besa su frente.

—También te quiero Eddie—sonríe dejando un beso en su pecho, justamente en la altura de su frío corazón.

—¡Carslie, Camila, Edward!—se separan para mirar a Alice, quien se acercaba corriendo a la casa con una expresión de terror, igual que su hermano.

—¿Que sucede?

—No lo se, tiene demasiados pensamientos, me impide ver que sucede.—mira a Camila, quien frunce el ceño, dando media vuelta.

—Vamos—camina hacia las gradas, con Edward tras ella, confundido por los múltiples pensamientos de su hermana.

   Bajan de la terraza con sus manos juntas en dirección a la sala, mirando a los vampiros con confusión al igual que todos.

—¿Que pasa Alice?—pregunta Carslile acercándose a su hija, la vampiresa miraba a Jasper con terror mientras este parecía intentar tranquilizar a su novia.

—Es Camila—la mira con miedo y temor en sus ojos, al igual que su hermano.

   Edward y Camila comparten una mirada de confusión, regresan la mirada al frente, sintiendo como el agarre en sus manos se hace más fuerte.

—¿Que pasa con Camila?

—La han encontrado, los Volturis vienen por ella.

   Y en ese momento Camila sintió como la habitación se hacía mas pequeña y Edward a su lado comenzaba a imaginar diversas formas para matar a todo aquel que intente tocarla.

   Sentía como su cuerpo dejaba de funcionar, no podía moverse, su vista se encontraba fija en Alice, quien la miraba con preocupación, su hermano da un paso hacia ella, pero la vampiresa retrocede, sorprendiendo a todos.

—Debo ir a Volterra—dice mirando al bosque, no quería, ni podía mirar a alguien de los presentes.

—¿Estas loca?

—Edward, por favor—lo mira—Desde un principio te dije que les traería problemas, si están conmigo cuando ellos vengan los matarán, me ayudaron a escapar y me han estado escondiendo por mas de dos meses, los mataran a todos.

—¿Y que pasará si vas tu sola, te unirás a ellos?

—Edward

—No Carslile-suelta la mano de su compañera para encararla—¿Dime que harás Camila? Quieres sacrificarte por nosotros, para que no nos ocurra nada, ¿Pero sabes que pasara conmigo, con Jasper? Literalmente perderemos la cabeza si algo te pasa.

—No pienso sacrificarme, simplemente quiero evitar el caos, piensa tu, ¿Que pasa si alguno de ustedes muere? No me lo perdonaría jamas, menos si fueras tu. Hablaré con ellos.

—Camila los Volturis vienen a matarnos, no a hablar—La voz dura de Emmett se hace presente, haciendo que todos los miren.

—Pues yo no pienso dejarte ir.—Dice Edward con seguridad.

—Y yo no pienso pedirte permiso.

—No esta a discusión, eres una de nosotros—dice Esme junto a Carslile.

—Esto que quieren hacer, es un suicidio.

—Si es un suicidio para nosotros piensa que será para ti sola.

—No solo eres de la familia Camila, eres la compañera de mi hijo, si algo te sucede el irá tras tuyo, y no perderé a mi hijo.

   La vampiresa suspira pesadamente al ver como todos asentían a las palabras de Carslile.

—Alice, ¿Que has visto?—pregunta Rosalie.

—Los Volturis vendrán, Aro, Cayus, La guardia, y una chica.

—Morena y de ojos rojos—Alice mira a Camila con el ceño fruncido.

—¿Como lo sabes?

—Era la chica que vi en el bosque-baja la mirada—Ahora entiendo su frase, loro saranno qui presto.

—Estarán aquí pronto.—Traduce Carslile—Ella los debió haber guiado hasta aquí.

—Era de esperarse que mandarían a alguien a rastrearla.

—En ese caso, ¿Porque no mandarían a Demetri?

—Hay muchos vampiros en Volterra, si Demetri sale ellos sabrán que los Volturis están buscando a alguien, sin embargo, si mandan a una chica, cuando ella regrese con la información posiblemente la mataran, no les gusta dejar testigos.

—¿Estuviste con ellos?—pregunta Camila, mirando a Carslile, quien rodea los hombros de Esme, asintiendo débilmente.

—Un siglo—la chica agranda los ojos.

—¿Cuando vendrán?—interrumpe Edward.

—Cuando la nieva endurezca, aproximadamente en un mes y medio. Esta comenzando a nevar.

—Lucharemos—voltean a ver a Emmett quien se endereza, cruzando sus brazos.

—Chicos.

—Comenzaremos a entrenar mañanas-dice Carslile interrumpiendo a Camila, dando una suave sonrisa a la chica, quien asiente con una débil sonrisa falsa.

—Estaremos bien.—La abraza Esme, dándole una sonrisa maternal.

—Eso espero.