Quedate a mi lado

Capitulo 4.

Completó y sus labios se acercaron a los de la joven

- Hey, vamos a jugar ahora- Gritó Madison, llamando la atención de todas y cortando la interaccion entre la suprema y la peli naranja. Todas se acercaron entre risas y se sentaron en un circulo, la suprema quedó junto a la nueva joven

- El juego es simple, verdad o desafio.. pero cuando eligen verdad deben tomar un shot- Explicó Madison ansiosa y todas asintieron- Empecemos perras-

En la tarde siguiente la suprema despertó con un dolor de cabeza increíble, aún para ella eso era demasiado, pero la sorpresa real fue encontrar a la peli naranja entre sus brazos "Mierda, que paso ayer", intento moverse sin despertar a la joven pero no lo logró, Gabrielle abrió sus ojos, colocó sus manos en su cabeza y gimio de dolor, volteó a ver a la mujer mayor y sus ojos se abrieron de golpe

-¡Mierda!- Exclamó nerviosa- ¿Por que estoy aquí? Auch, me duele demasiado- Completó sentándose en la cama.

-Bebiste demasiado- Afirmó Cordelia - Creo que más que todas- Completó y soltó una risita. Inmediatamente la joven se levanto de la cama bruscamente, corrió al baño se arrodillo junto al sanitario y comenzó a vomitar. La suprema preocupada corrió tras ella y tomo su cabello para que no se untara.

- ¡ No! ¡Por favor señorita Cordelia! déjeme sola, no quiero que me vea así- Suplicó apenada, odiaba que la suprema la viera así, era como un bebe. La mujer mayor le dedico una mirada tierna

- Siempre me ayudas a dormir y te quedas un buen rato conmigo. Ahora déjame hacer algo por ti- Susurró la suprema y la joven solo asintió.

Después de un rato en el baño, la suprema guío a la joven de regreso a la cama, está quedó profundamente dormida por lo que Cordelia decidió prepararle algo para que comiera pues ya era medio día, por suerte era domingo. Al llegar a la cocina se encontró con Madison que sostenía una taza de café y también tenia resaca, se veía en su rostro.

- Buenos días- Habló la suprema preguntándose que hacer para que la peli naranja se sintiera mejor

- Hola Cordy, ¿Cómo está Gabrielle?- Respondió mirando a la mujer mayor y luego hizo una mueca -Mejor no respondas, bebió como loca, no deberías darle de comer aun, créeme- Completo y fingió vomitar. La mujer mayor capto el mensaje, asintió y se devolvió a la habitación tratando de recordar que había pasado la noche anterior. La curiosidad la mataba y decidió hacer algo que no le gustaba. Se acerco a la cama y suavemente tomó la mano de la mujer más joven y cerró los ojos.

La primera visión que tuvo fue de la noche anterior, estaban las dos juntas, bailando muy pegadas. La suprema le susurraba cosas a la joven, "Eres hermosa", "No dejas de sorprenderme" "Me la paso muy bien contigo", " Me haces feliz". Siguió con una visión de las chicas jugando verdad o desafío; la pregunta era para todas ¿Cuál les parece la persona más sexy de la habitación? La joven fue la primera en responder señalando a la suprema; Zoe, Madison y Cordelia habían votado por la peli naranja, y el resto prácticamente estaban en blanco. La suprema no pudo evitar sonreir ante tal acción. La siguiente visión era confusa, aún para Cordelia, Una mujer rubia, mayor, gritaba y antes de poder entender que decía la mano se soltó rudamente y se topo con un ceño fruncido mirándola.

- ¿Qué estas haciendo?- Preguntó con desconfianza la joven

- Yo solo... emmm yo...- La suprema no hallaba las palabras adecuadas para decir lo que estaba haciendo

- Estabas husmeando en mi pasado- Interrumpió secamente la menor

- Yo... lo siento.- Murmuró apenada la suprema bajando la mirada.- Quería recordar lo de anoche- Diciendo esto ultimo tan bajo que la joven apenas pudo escucharlo. Su rostro se suavizó y sus ojos se hicieron más cálidos, luego se sonrojó un poco.