"Say You're Just A Friend" (Miley Cyrus & Austin Mahone)

Loving You Is Easy : Capítulo 10

Desde esa vez no pudo dejar de pensar en ella. En su cuerpo.

Y ella, no podía olvidar la cara que había puesto al verla semi-desnuda.

Aprovecho que la había visto para comenzar su juego de seducción.

Durante una semana había dejado que la viera semi-desnuda, claro, sin que él se diese cuenta de que lo hacía con intención.

Ahora, ella junto a las demás estaban en la piscina techada que tenía dos temperaturas, una caliente y otra fría.

Traía un diminuto bikini, que no dejaba nada a la imaginación.

Austin se encontraba al otro lado de la piscina junto a los chicos, admirándola.

- ¿En qué piensas? – pregunto Tyler, de repente.

- Cosas.

- O mejor dicho en Miley -rio- Haber, ¿Qué piensas?

- Pienso en cómo hacer para tirármela de nuevo, joder la necesito…

- ¿Crees que ella quiera?

- Claro, seguro le hace falta una buena follada.

- Nah, con el cuerpo que se gasta no creo que le haya hecho falta nada –rio.

- Ya, no la mires tanto – Austin golpeo a su amigo en la entrepierna y este grito de dolor- Tienes novia.

- ¿Me quieres dejar estéril? – Tyler se sobo- Además ¡Tú también tienes novia!

- Ya sé, pero es… diferente.

- No, es lo mismo.

- Que no, mira Anne puede complacerte en lo que quieras, pero Caroline uhmm – hizo una mueca- No…

- Uhh –rio- ¿La dejaras?

- No lo sé, nuestra relación va de mal en peor…

- ¿La quieres?

- Creo, no sé. Tengo un afecto hacia ella, pero desde que llego Miley eh estado confundido.

Por otro lado, Miley tenía a Sophie sentada en su vientre jugando con la muñeca que le había regalado Austin.

- Miley -hablo Marian.

- ¿Sí?

- ¿Qué hay entre tú y Austin?

- Nada, ¿Por qué?

- ¡Pues no deja de mirarte!, todos estos días ha estado observándote – dijo Julia.

- Ah… no sé.

- ¿Crees que quiera algo contigo? – Hablo Anne.

- No sé.

- ¿Tú quieres algo con él?...

Miley sonrió.

- Dios… Miley ¿Todavía le tienes ganas? – hablo nuevamente Marian.

No podía mentirles a ellas, eran sus amigas y al fin y al cabo terminarían sacándole información.

- Vale, Austin está más bueno que todos los tipos de estados unidos, joder, si cuando lo vi en casa de Alex las piernas me flaquearon –rio nerviosa.

Las chicas rieron ante la confesión de Miley, mientras que a ella se le ponían las mejillas coloradas.

Tenía que admitirlo, Austin aún habitaba en cada una de sus fantasías

~

Al caer la noche, Miley se levantó y fue a la cocina.

Las luces estaban encendidas y él estaba allí, sin camisa y solo con el pantalón de pijama, sentado con una lata de cerveza en su mano.

Miley sintió como sus bragas se iban humedeciendo, estaba jodidamente bueno.

Austin miro en dirección a la chica y sonrió.

Llevaba su camisa gris, su favorita. Le llegaba hasta el muslo, antes solía taparle todo el trasero pero ahora quedaba gran parte a la vista.

Seguramente ella no se acordaba que aquella le pertenecía a él.

Miley camino hasta el refrigerador y saco una Coca-Cola.

Se sentó sobre el mesón de mármol y tomo la bebida. Pensó un momento en que este sería el momento perfecto para jugar un rato con él.

- ¿Cómo te ha ido con tu novia? – pregunto, rompiendo el silencio.

Austin la miro y se relamió los labios. La camiseta se le había subido.

- Bien –contesto seguro.

- Claro –rio y volvió a tomar la bebida.

Austin se levantó de su asiento y fue hacia Miley. De verdad lo estaba volviendo loco.

Miley se asustó al sentir que le abría las piernas y se metía entre ellas.

- Siempre me preguntas por ella…

- No es así

- Claro que sí, apuesto que te pone celosa, estas mal…

- No, tú estás mal. ¿Crees que no me he dado cuenta de que aprovechas cada momento para verme sin ropa?

Y el que creía que no se había dado cuenta.

Miley bajo su mano hasta la entrepierna de Austin y lo acaricio por encima del pantalón.

Él respiro con dificultad al sentir sus caricias y más aún cuando ella metió su mano por debajo de la ropa.

- ¿Por qué tendría que estar celosa de una anciana como tu novia?, si no llevo ni cinco minutos y mira cómo te he puesto – le susurró al oído y le lamio el lóbulo de la oreja.

Austin abrió sus ojos y vio a Miley sonreírle.

- Si me das permiso - Miley corrió a Austin y se bajó del mesón- Tengo que ir a dormir, buenas noches.

Le volvió a sonreír y se fue de ahí dejando a Austin con una tremenda erección, tal como lo había hecho en su casa en año nuevo…