Absurdo.

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Dos días después...

Presioné el timbre de la casa de mamá, no estaba segura si estaba haciendo lo correcto. No mentiré que seguía molesta con mamá, pero debía hablar con ella para que le ascendiera un puesto en la empresa a Jack, que de alguna u otra manera me lo debía. Por mentirme de una manera en que me obligara a casarme con Cam. También debo aceptar que fue mi culpa, por caer en su estúpido plan. No entiendo porque quería casarse conmigo, sabía que era por el bien de la empresa pero se me hizo muy extraño que la empresa haya caído y se haya levantado sin que nadie lo supiera. Algo así como si se tratase de un fantasma, nadie se dio cuenta de lo que ocurría.

La puerta se abrió dejándome ver a Aaron parado frente a mí, mi boca literalmente se abrió de asombro.

—¿Qué haces aquí?—Preguntamos los dos en unísono.

—Viene a hablar con mamá sobre un asunto, y ¿tú?—Pregunto para darle un abrazo.

—No importa, bueno si importa. ¿De qué hablaras con mamá?

—Ocupó que le dé empleo a Jack.

—¿Jack? ¿tu amigo?—Pregunta dudoso.

—Sí.

Pude notar como Aaron estaba un poco tenso, parecía nervioso.

—¿Ocurre algo?—Pregunto entrando a la casa.

—Hijo, ¿quién era?—Mamá no se percata de mí ya que usaba el celular sin apartar la vista de el. Levanta el rostro y me ve, al parecer le sorprendió verme aquí.

No había pisado su casa en aproximadamente un mes y medio, era porque estaba molesta con ella y lo seguía estando. Pero era importante conseguirle el empleo a Jack antes de que nazca el bebé.

—Hija, ¿qué haces aquí?—Pregunta mamá mirándome.

—Quiero que le des empleo a Jack y que tenga un buen puesto. No preguntes por qué, solo te diré que él ahora mismo necesita de uno.—Digo con firmeza sin apartar mi vista de sus ojos profundos que estaban clavados en mí.

—Por supuesto, se lo daré.

Hubo un completo silencio en la entrada de la casa, no sabía si correr y dejarlos ahí o quedarme con Aaron para platicar con él.

—Debes decirle—Murmura Aaron a mamá y volteo a verlo.

—¿Decirme qué?—Pregunté con intriga.

—No tiene porqué enterarse, el pasado es pasado y listo. Ahora puedes callarte—Mama voltea a ver a Aaron con tremenda seriedad.

—No lo calles, si algo me estás ocultado es mejor que me lo diga. Ya estoy harta de que me escondas cosas para que hasta el último la perjudicada sea yo.—Mamá se queda callada.

—No quiero decirte por tu bien hija, es mejor que no lo sepas.—Dice mamá mirándome, pero después voltea a ver a Aaron—No quiero que hables de esto en mi casa. Ni le cuentes nada.

—Estoy cansado mamá, de que ella no sepa la verdad. De mentirle durante todo este tiempo y todo por tu absurdo rencor, no volví aquí para quedarme de brazos cruzados.

—Entonces lárgate—Exclama mamá a Aaron.

—¿Estás corriendo a tu propio hijo?—Pregunto irónicamente.

—Si lo hizo contigo, ¿por qué no hacerlo conmigo?—se cuestiona Aaron así mismo.

—Tienes razón, vámonos de aquí.—Volteo a ver a mamá—Espero y algún día te des cuenta que hay una cosa que nunca se puede ocultar—Me quedó callada observando a mamá—La verdad.—Terminé por decir en un susurro.

Del odio al amor-¿Shawn o Cameron? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora