Nervios

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15 años...

No lo había mencionado verdad, Shawn cumplía años el mismo día que yo, ¿algo mas podría arruinar mi vida?.

El año pasado ni siquiera me había acordado de mi propio cumpleaños, ni siquiera lo festejamos ya que como siempre mamá estaba ocupada. Y recuerdo que ese día no di señales de vida. No había salido de mi habitación por ningún motivo; recibía la comida en la cama, tenía Netflix frente a mí y una gran manta; la usaba aunque no estuviera haciendo frío. Mi madre, Aaron, Cameron y la pequeña Aaliyah me dieron un amistoso abrazo.

Y como hoy era sábado, suponía que estaría acostada todo el día, festejando mi cumpleaños con las cosas que más amo hacer; estar acostada y ver películas en Netflix.

—Arréglate que saldremos a comer—Aaron entra a mi habitación y después sale.

Woah ni siquiera un abrazo, ni un "Feliz cumpleaños hermanita, te amo". Me levanto de la cama con emoción. Por fin tendríamos una comida familiar, con mi madre y mi hermano.

Entro al baño, me quito toda la ropa quedando completamente desnuda, me miró al espejo y veo que mis pequeños pechos aún no crecen, me doy la vuelta y me doy cuenta que mi trasero sigue igual de cuando tenia 10.

Que triste.

Me adentro a la regadera y me doy una ducha rápida. Al salir me pongo un vestido guinda con unos converse blancos, dejo mi cabello suelto. Salgo de la habitación ya lista, bajo las largas escaleras de mi casa y me dirijo a la sala, ahí se encuentran todos.

Mi sonrisa se borra al ver que no solo iremos mi hermano y yo, si no también Karen y sus hijos, y también Cameron, creí que por fin, a pesar de tanto tiempo pasaríamos un tiempo a solas en familia, pero creo que me equivoqué.

Cameron me recibe con un abrazo mientras me eleva un poco.

—Feliz cumpleaños cuchi—Susurra en mi oído. Le sonrió tímidamente.

—Feliz cumpleaños cariño—Mamá se acerca y me estrecha a su cuerpo.

—Gracias mamá—Digo aún abrazándola.

Todos me dan un abrazo, menos Shawn, ya que desde la última vez cuando nos besamos tratábamos de hablarnos lo menos posible.

Todos salimos de la casa, y nos subimos a distintos autos, Aaron llevaba su auto y mamá también para no ir apretados. Mientras el auto avanzaba iba pensado en lo distinto que hubiera sido mi cumpleaños si papá estuviera con nosotros.

Llegamos a un restaurante, el cual tenía una bella vista al mar. Era el lugar favorito de papá y el mío, me traía demasiados recuerdos de cuando era más chica.

—Que los cumpleañeros se sienten juntos—Aaron opina sarcásticamente. Lo miró seriamente.

—Me parece buena idea—Dice mi madre siguiéndole el juego. Me siento en la mesa, Shawn se sienta a mi lado sin decir nada.

Miraba atentamente el mar, mientras tenía una mano en la cabeza, los demás platicaban animadamente mientras yo estaba callada contemplando y sintiendo la brisa del mar. Sentí como la rodilla de Shawn choco con mi muslo desnudo, el vestido se me había subido un poco.

Mire despistadamente nuestras piernas ser tocadas, sentí una ligera oleada de nervios recorrer por todo mi cuerpo. Volví a poner mi vista al mar, aún sintiendo su rodilla en mi piel, por un momento me relajé pero recordé que era la rodilla de Shawn, de SHAWN, ósea del chico al que odio. Rápidamente la separé y crucé mis piernas alejándome de él.

La comida llegó, y cada quien se puso a comer mientras disfrutaban de un buen día para ellos, porque para mí; era un día muy común.

Cameron estaba sentado frente a mí, lo observé detalladamente y me puse a pensar; en si aún seguía alocadamente enamorada de él que cuando era niña. Claro que sí, aún seguía enamorada de él, pero no tanto como hace un par de años. Aún me seguía gustado, pero él nunca se fijaría en mí, en su pequeña hermana.

—Creo que estás babeando—Dice Aaron interrumpiendo mi transe mientras me mira. Cameron me mira y sonríe, dios, su sonrisa era tan única, tan risueña, la amaba.

Y me di cuenta que aún seguía enamorada de él.

Todo paso tan rápido, teníamos un pequeño pastel Shawn y yo, los demás nos cantaban las mañanitas. Yo simplemente miraba el pastel, sin ningún gesto, no tenía ánimos de nada.

—Pidan un deceso—La pequeña voz de Aaliyah se hace presente. Me hace sonreír.

Me acercó al pastel y miró la vela.

"Yo, deseo tener un día solo con mi familia."

Y sople mi vela al mismo tiempo que Shawn. Miró como en cámara lenta todos aplauden radiantes de felicidad, incluso Shawn, sentía un poco de felicidad por él, por lo menos él se la estaba pasando bien.

Todos había decidido dar una caminata por la playa mientras el sol se ocultaba, yo caminaba detrás de los demás, mirando como se divertían y sobre todo Shawn y su pequeña hermana, por un momento la tristeza me invadió, Aaron y yo teníamos mucho tiempo sin convivir como unos hermanos. Hasta en algo insignificante Shawn tenia mejor suerte que yo.

—¿En que tanto piensas?—Cameron se pone a mi lado mientras tiene ambas manos en sus bolsillos del pantalón.

—En lo miserable que es mi vida—Cameron me mira de repente. Maldigo por lo bajo al decirlo, creí que lo había pensando.

—Tu vida no es miserable—Dice con un poco de miedo. Bajo el rostro si nada que decir—Tienes familia y amigos que te aman—Pasa uno de sus brazos alrededor de mis hombros, en forma de abrazo.

—Familia que no tiene tiempo para mí. ¿Amigos? Solo te tengo a ti—Digo con ironía mientras miraba el mar.

—Me tienes a mí, por eso te amo—Mi corazón se detuvo por varios segundos.

Mi mente analizaba cada letra que Cameron había dicho hace unos segundos "Por eso te amo" era la frase que más rondaba en mi mente en estos momentos.

—¿Qué hacías hace dos años en casa de Lucy? Nunca me lo dijiste—Me atrevo a preguntar, no sabía que tema sacarle cuando me dijo que me amaba.

—Verás—Murmura.


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❤️
Perdón por cortarle, pero hoy nada más dejaré un capítulo.

I'm sorry

[19.07.18]

Del odio al amor-¿Shawn o Cameron? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora