―Hola linda ¿Como estás?―Sonreí al entrar a su oficina y sentarme justo en frente de ella.
―Jeon Jungkook―Mencionó mi nombre sonriendo―Te hacía en una isla afrodisíaca disfrutando de la libertad de este trabajo.
―Créeme linda, yo también me hacía en un lugar así ahora mismo―Sonreí con algo de resignación en mi rostro.
―Entonces, ¿que te trae a la oficina de la hermosa Min Haneul?―Preguntó alagándose a si misma.
―Mi último caso princesa―Le dije y ella frunció el ceño.
―¿Último caso?―Asentí torciendo un poco mi boca―¿Te han dado otro caso?
―Si, el último y me largo de aquí.
―Pero no me han traído expedientes para ti.
―Pues tiene que haber, Hwan me lo asigno esta mañana.
―Oh, entonces tiene que estar en los nuevos―Me dijo―Déjame revisar.
Se levantó de su silla hasta el extremo derecho de su oficina justo en la pila de folders color café.
―¿Estás seguro de hacer esto Jungkook?―Preguntó mientras sus manos seguían registrando los papeles.
―Es el último caso Haneul, además Hwan tiene un interés especial por este, por cual la comisión será muy buena―Le dije y ella me sonrió―Nada mejor que un retiro por lo alto, ¿no crees?
―Como siempre, quieres lo mejor―Me dijo ella riendo.
―Quiero algo perfecto Han―Sonreí para mis adentros mientras ella me miraba tratando de comprender mi mirada.
―Bueno, espero que lo encuentres―Dijo encogiéndose de hombros―Aquí está tu último caso―Se volvió a sentar delante de mi con un folder en las manos.
―Infórmame linda.
―Bien―Abrió el folder―Oh, es una chica.
―Lo sé.
―No, enserio es una chica―Dijo y fruncí el ceño.
―¿A qué te refieres?
―Es una joven Jungkook―Me miró― Tiene 19 años. Hirai Suni, estudiante en la universidad de Seúl, de hecho está en su primer semestre de psicología, graduada como la mejor estudiante de su escuela―Sonrió―Y quedó en las primeras del distrito.
―Es inteligente―Dije y ella asintió―¿Como me acercaré a ella?
―Según el expediente, está buscando un guarda espaldas y que a la vez sea profesor de autodefensa.
―¿Que mejor que yo para eso?―Sonreí.
―Exacto―Dijo ella y frunció el ceño de repente leyendo algo.
―¿Que pasa?
―Tienes fases―Me dijo― Tienes que enamorarla Jungkook―Ahora su mirada salió de las hojas para estar en mis ojos―Es una joven Jungkook te lleva 6 años.
―Será más fácil de enamorarla―Sonreí―Y más fácil de matarla.
―¿Estás seguro de esto?―Preguntó con cierta empatía con la víctima lo que es algo raro en ella.
Haneul llevaba años dándome todos los casos de las personas que debía de matar y nunca le había visto esa mirada en sus ojos, esa tristeza, culpa y sobre todo, lástima en ellos.
―Completamente seguro Haneul―Sonreí tratando de tranquilizarla con mi sonrisa, estiré mi mano para que me entregara el expediente de Hirai e irme de ahí.
Esa mirada de Haneul me había puesto algo incómodo, en este trabajo nos han enseñado a no tener ninguna clase de empatía con la victima, nunca debemos relacionarnos ni demostrar algún tipo de sentimientos por ellos, pero por primera vez en los diez años que llevo trabajando en la agencia, vi sentimientos en una de mis compañeras hacía la victima.
Sacudí mi cabeza para no pensar más eso y me dispuse a abrir el expediente, pero en eso se sale un papel cayendo al suelo, me agacho recogiéndolo viendo el contenido.
Es una foto, una foto de ella.
Dentadura perfecta dando a una hermosa sonrisa; pestañas largas, sus mejillas algo rojas, su cabello cae en ondas sueltas delicadamente, sus labios tenía un ligero color rojo bastante deseable a mi parecer, contextura normal y una dulce y hermosa mirada.
Hirai Suni es perfecta.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
