El Crimen Perfecto ; jjk

el crimen perfecto | 10.

―Jungkook, ¡no se como mierda cargar un arma!―Me gritó Haneul por quinta vez en los últimos diez minutos.

―¿Quieres morir?―Pregunté.

―¡No!―Me devolvió el grito y luego suspiro.

―Tranquila Haneul―Le dijo Suni intentó calmarla, definitivamente para estar calmados mejor las mujeres―No creo que la tengas que utilizar, sólo es en caso de emergencia, tu no vas a entrar

―¿No entraré?―Preguntó con un tono de alivio en su voz.

―No hermosa―Le dijo Suni―Vas a estar a ciertos metros de distancia, si escuchas algo raro pide refuerzos

―No podemos confiar en la CIA, Sun―Le dije.

―Lo sé amor, pero no podemos hacer nada contra eso. Hay buenos y hay malos, no podemos con esto sólos Jungkook

―Le dijiste amor―Le dijo Haneul y un ligero tono rosado se puso en las mejillas de Suni.

―Somos novios―Le expliqué trayendo a Sun conmigo para abrazarla haciendo que Haneul de un grito descomunal.

―¡¡Dios!! ¡¡que alegría!!―Saltó―¡¡Por fin!! ¡¡son la pareja perfecta!!―Suni me sonrió y yo le devolví la sonrisa.

―Basta de romanticismo, tenemos que irnos―Dije espantándolas a las dos haciendo que rieran.

―Ya sabes Haneul, si escuchas o vez algo extraño, pide refuerzos

―¡Bien!

Haneul quedó en el auto arriba de la montaña.

A medida que avanzábamos lográbamos escuchar una que otra señal de las conversaciones de Black y una de ella nos llevó a unas ciertas coordenadas.

En el camino de venida hablé mucho, resolvimos cada inquietud que tuvimos, nos confesamos ciertas cosas y sobre todo decidimos que no importa lo que pasara, oficializaremos nuestra relación. La amo y no podía evitar detener ese sentimiento y para mi fortuna ella también me ama, así que no veo motivo para frenar esta relación.

―Antes de llegar quería preguntarte algo―Le dije mientras caminábamos en medio del bosque.

―Dime―La tomé por el brazo haciendo que detuviera su paso, ella me miró sin entender y vio como me agaché abriendo su boca al suponer lo que venía.

―Nunca me había enamorado, nunca en mi vida había tenido un amor tan puro como el tuyo hacía a mi―Ella me miró sonriendo mientras sus ojos se comenzaban a cristalizar―Hemos pasado muchas cosas, cosas malas y buenas, nuestra relación quiero pensar yo que se ha vuelto más fuerte y sé que no soy el hombre romántico, ni que es el prototipo de hombre que una mujer busca, pero te puedo prometer que puedo ser lo más romántico posible para que tu mi amor, estés contenta―Una lágrima cayó por su rostro―Quiero despertar contigo cada mañana, quiero hacerte reír, quiero que me retes cada vez que haga algo estúpido, quiero que entrenemos juntos, pero sobre todo quiero pasar el resto de mis días contigo―Le sonreí y ella me dio una de vuelta―Así que Lee Suni ¿quieres casarte conmigo?

―¡Si, si, si, si!―Me atrajo hacía ella para poder besarnos.

Esos labios, esos hermosos labios. La abracé pegándola más a mi mientras nuestros labios seguían danzando el mejor baile del mundo.

Se separó de mi y saqué el anillo que lo había envuelto en un pequeño papel.

―¿Lo sacaste de la máquina en el pueblo?―Preguntó sonriendo enternecida.

―No podía comprar uno mejor, amor―Explicó.

―Es perfecto, bebé―Miré su pequeño anillo de plásticos color plateado con un corazón arriba de plástico―Es hermoso―Sonrió y me miro―Tu eres hermoso, ¡joder te amo!―Gritó. Me volvió a besar y por supuesto le correspondí gratamente.