Ya estoy en el apartamento, no hay nadie. Ha sido realmente un viaje largo y agotador, lo primero que hago es quitarme los zapatos, dejo las maletas en la habitación, me siento cansada y que mejor que una buena ducha para descansar, tomo una botella de vino y entro a la bañera.
Llevo alrededor de una hora, mi celular no ha sonado, el citófono tampoco, es como si nadie me esperara, bueno creo que eso es en parte porque desde hace un tiempo llevo una vida solitaria y sin tantos altercados. Una vida tranquila para alejarme así de las malas situaciones, me ha funcionado hasta ahora.
En ocasiones la clave es olvidarse de todo lo malo y solo quedarse con lo bueno, así se puede tener una mejor vida. Mi mala tendencia es quedarme con lo malo, lo melancólico, lo triste y lo que no tiene sentido, soy consciente de esas cosas pero ¿cómo hago para cambiar eso?
Ya he desempacado las maletas, los regalos los he dejado en el sillón de la habitación, son sencillos pero bonitos. Pongo música para relajar el ambiente, Alex no me ha llamado, escucho el sonido del celular y corro para ver quién es, un mensaje de mi Sara hermosa.
6:00 p.m
Hola mi niña, ¿ya estás en el apartamento?
6:04 p.m
Nana, ¡siiii! Estoy ya en el apartamento, llegué me bañé y estoy terminando de desempacar.
6:11 p.m
Pórtate bien mi niña, come algo por favor.
Mañana iré. ¡Te quiero!
6:13 p.m
Si señora, ya voy a voy a ver que ceno, estoy cansada tal vez pida algo.
Te espero, te adoro mi Sara favorita.
Y así es como sé que por lo menos le importo a alguien, mi Sara hermosa y favorita. Recuerdo que tengo que cenar así que pediré algo de algún restaurante pero antes de que pueda buscar en dónde pedir el citófono suena, es Javier diciéndome que Alex está abajo y que si lo dejo subir, ¡por fin! Se acordó de que tiene novia o lo que sea que somos.
Abro la puerta. — Hola ángel. — Su calma me enoja.
— Me voy una semana y lo único que se te ocurre decirme es "Hola ángel." — Voy hasta donde dejé la copa de vino. — Y después de tres horas de que yo llegara, esperaba que por lo menos me recogieras. — Parezco una chiquilla.
— Me hiciste falta, estaba resolviendo unas cosas pendientes y venía pedirte que cenaras conmigo. — Cierra la puerta y se acerca a mí.
Un momento. — ¿Qué cosas pendientes? — ¿Qué estaba haciendo?
Está sexy, se pasa el dedo índice izquierdo por el labio y yo me termino el vino, paso saliva y no puedo dejar de verlo directamente a los ojos. Este hombre tiene el poder de idiotizarme, me toma de la cintura y básicamente me derrito en sus brazos, ¿cómo puede este hombre hacerme esto?
— Vamos a cenar. — Está tentadoramente cerca de mis labios.
Me engancho a su cuello y le susurro a su oído. — ¿Qué te parece si vamos a mi habitación? — Una semana sin él, es mucho.
Siento como baja sus manos a mis nalgas. — Vamos a cenar. — Me da una palmada en una de ellas.
— Pero podemos cenar aquí después de — Trato de poner mi mejor mirada de ojos tiernos, pero solo veo una sonrisa traviesa de su parte.
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ESTA VIDA Y LA OTRA.
RomanceLos miedos son los mayores obstáculos que se pueden presentar en nuestra vida. Vivir en el pasado sin duda alguna nos impide avanzar. Adaline a pesar de todo no ha tenido una vida fácil, su pasado, sus miedos son muestra de ello, pero sin pensarlo...