DELICATAE ( las chicas de madame Juliette T1)

capítulo 17

La invasión de mercenarios y piratas, parecía rebajarse ante la vuelta de algunos soldados. Gracias a eso, empezaron a irse de Londres, aunque las pérdidas, habían sido demasiadas. Casas, negocios y sobretodo personas, habían quedado tendidas en el suelo.
Muchos voluntarios, ayudaron para llevarse cadáveres y arreglar los destrozos.

En el burdel, Juliette había recibido una carta en donde se le pedía refugio para algunos hombres que estaban heridos de gravedad. No pudo negarse, tuvo que aceptar.

• Juliette - llevarlos arriba - decía a algunos soldados que venían con hombres en camillas o sujetándolos como podían. También habían algunas mujeres que habían sido violadas por mercenarios - a ellas... - miró a Brigitte - que las lleven a mí dormitorio

• Brigitte - si madame... Por aquí - guío a los soldados que llevaban a las mujeres en brazos

• Abraham Davies - gracias madame, no se cómo agradecerte - era un duque de 33 años y amigo de Gabriel. Era alto y delgado, pero tenía ese atractivo londinense que tanto atraía a las damas. Su porte era impecable

• Juliette - no me las des Duque Davies, no se como más ayudar

• Abraham - ya haces suficiente - elevó la vista y vio a Siara saliendo de la cocina con un barreño lleno de agua. Ambos se miraron y se sonrieron

Juliette se fijó en eso, pero no dijo nada al respecto - Siara, lleva el barreño arriba

• Siara - si madame

Juliette y Abraham se miraron - interesante mirada - elevó una ceja

• Abraham - si... Bueno ... - se rascó detrás de la nuca

• Juliette - tiene que decirme algo duque Davies?

• Abraham - es posible que más tarde

Juliette sonrió levemente - como desee, si me disculpa... - empezó a andar hacia Gabriel que venía llevando a otra mujer en brazos

• Gabriel - está grave

Juliette la miró. Tenía el rostro casi irreconocible por los golpes y el vestido estaba desgarrado y lleno de sangre, vió a Oana acercarse - a mí dormitorio

Gabriel asintió y subió escaleras arriba mientras Juliette se quedaba con Oana en el pasillo ante las idas y venidas de los que corrían de un lado a otro con personas en los brazos o material médico

• Oana - madame, puedo ayudar en las curaciones.

• Juliette - sabes hacerlo?

• Oana -si madame, en Rumanía mi madre fue enfermera y me enseñó algunas cosas

• Juliette - de acuerdo, ves

Oana subió por las escaleras y se metió en la habitación de Juliette. Se fijó en todas las chicas que estaban allí. Todas ellas, habían sufrido violaciones. Seguramente más de una había quedado en cinta...

• Gabriel - ella está grave - la sacó de su mundo

Oana se acercó a la cama de Juliette en donde la había dejado - puede traerme vendas y un barreño de agua caliente?

• Gabriel - por supuesto - fue al cuarto de baño y empezó a llenar un barreño de agua caliente de la tina que habían traído los sirvientes anteriormente. Volvió con el barreño a la cama, y lo dejó en el suelo. Cogió vendas del botiquín y se los entregó a la rumana

• Oana - será mejor que se vaya Duque Carter, yo me encargo

• Gabriel - estás segura?

• sí señor, gracias