La última hora de clases, faltaban tan solo 5 minutos para que acabara, en esta clase la daba la
maestra Nava una señora de 52 años en realidad ya no esta en buenas condiciones esta muy
confundida a veces olvida que esta en clases.
Alexander me miraba desde su lugar, me estaba haciendo señales seguro que es por lo de la fiesta
de esta noche, estaba tan distraída viéndolo que sonó el timbre todos comienzan a gritar
emocionados. Alexander se levanta de su asiento y me abraza.
-Vamos -dice Alexander
-De acuerdo –le coneste
Caminamos por el pasillo dónde nos encontramos con Ayde y Samuel
-¡Hey nos vemos en la noche!.-exclama Samuel
-Claro ahí estaremos.- dice Alexander
-Adiós Ayde hasta la noche.-agrego.
-Adiós- conesto.
Alexander me lleva a mi casa, mi padre no está en casa, así que invito a pasar a Alexander un
momento.
-Alex ¿quieres tomar algo?- dije
-Claro
-Ven vamos a la cocina
Alexander me toma de la cintura y me gira para quedar de frente con el y comienza a besarme y
después me acaricia. Todo cada vez sube de nivel hasta que llego el punto de que fuimos directo
a la sala y me pongo sobre en el sofá mientras el sigue besándome, pero antes de hacer algo de lo
que me pueda arrepentir, me detengo y lo miro seria.
-Alexander, basta esto no esta bien.-digo.
-¿No quieres hacerlo? no… no me... olvídalo
-Claro que te quiero, si es eso a lo que te refieres, pero no está bien no quiero hacerlo ahora por
favor entiéndeme.
-De acuerdo, creo que te veré en la noche.
-No estés molesto Alex .
-No, no estoy molesto _______ si tu no quieres no te obligare .
-Gracias te quiero.
Se acerca a mí y me besa.
-Nos vemos en la noche.
Él se va y me quede sola en casa pensando en lo que había pasado con Alexander hace un
momento estoy confundida, lo quiero pero no creo que sea correcto hacer eso.
Después de unas horas llega mi padre y lo salude.
-Hola papá ¿cómo te fue?
-Bien hija gracias ¿y a ti?
-Increíble, de hecho habrá una fiesta hoy a las 8 digamos en 3 horas.
-Ah que bien.
-¿Puedo ir?
-¿Limpiaste tú habitación?
-Sí.
-De acuerdo no te hará daño salir.
-Gracias papá, me iré a bañar.
Subo a mi habitación para darme una ducha. Cuando salgo me visto con unos jeans, una blusa
blanca y unos tenis del mismo color, solo cepillo un poco mi cabello y me lo dejo suelto, después
me maquillo un poco. Más tarde me llega un mensaje de texto de Alexander que dice: “Cariño
estoy abajo” bajo rápidamente, me despido de mi padre y salgo. Afuera saludo a Alexander, le doy
un pequeño beso y nos vamos
