Es Real...

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Hoy fue el examen de matemáticas, definitivamente reprobaré... no importa si me hubiera quedado en vela toda la noche estudiando... "-Je, eso no es verdad, no dormiste esperando a que aquel apuesto chico apareciera de nuevo...-"

-¡Aah!~ el examen estaba difícil, ¿Cómo se le ocurre poner ecuaciones exponenciales si ni hemos llegado al tema?, ¡Profesor bastardo!- Mi amiga se quejaba una y otra vez, habían tocado para almorzar y aquí estabamos, me mantuve callada mientras comía mi desayuno.

- Y a ti, ¿cómo te fue? - me preguntó una vez habia terminado su "martirio".

- Estoy muerta...- respondi con lagrimillas en mis ojitos. Esta no evitó darse un "face palm".

-Enserio, deberías de tratar de concentrarte más pequeña. -Me reprochó, hice caso omiso encongiéndome de hombros para restarle importancia.

El receso habia acabado y estábamos de vuelta en el aula, el profesor no estaba por lo que el curso daba rienda suelta al hablar, puras cosas vanales, programas, chicos, programas de chicos... nada interesante, tenía mi cuaderno de dibujos fuera, haciendo lo primero que se me viniera a la cabeza, llevaba rato asi, cuando lo termine me sorprendí al ver lo que habia dibujado, era el rostro del chico que se aparecía en mi habitación por las noches.

El profesor luego de un rato entró, todos nos callamos y cada quien se fue a su lugar. Luego de acomodar sus cosas laa clase empezó, aburrida como siempre. Luego de un rato, un alumno entro, diciendo que el director queria ver a una estudiante.

- Milenne...- Dijo el susodicho, el curso me miró, yo me encogí en mi asiento, me ponía muy incómoda la fija mirada de mis compañeras de curso.

-Señorita Mizuno, tome sus cosas y diríjase a la oficina del director. - ordenó el porfesor, torpemente empece a meter todo en mi mochila.

- ¿Que sucede Lenn?- susurro sorprendida.

-No lo se...- susurré de igual forma, me despedí con la mirada y me dispuse a seguir al chico.

Llegamos a la oficina sin decir ni una palabra, asentí con mi cabeza en forma de agradecimiento y este se marchó, tardé unos segundos en reaccionar y tocar miedosamente la puerta, se escucho un "adelante" por lo que cuidadosamente la abrí, asomando mi cabeza primero y luego entrando por completo.

-Tome asiento señorita, hay cosas de las cuales discutir.- hice exactamente lo que dijo, por insitinto mire a mi lado, me quedé paralizada. Acaso... es él... ¡Es él!. Estaba sentado de una forma grácil, con una pierna cruzada encima de la otra y su rostro apoyado de su mano, me miraba con una minuscula sonrisa.

-Buenos dias, Milenne- su voz... tenia tanto que no la escuchaba, esto... esto es increible.

-Verá señorita, el es Kaname Kuran, es un allegado a sus padres biológicos, por lo que de ahora en adelante el podra encargarse de usted.- Esperen... ¿Qué?.

- N-no... no entiendo...- hablé atónita, "¿Qué esta pasando aquí?".

- Yo le explico señor director, no pude hacerme cargo de ti puesto a que, si bien tenia la edad suficiente al cumplir los 13, aún debia estudiar y hacerme cargo de algunos asuntos familiares- Me he quedado prendada en esa mirada, un poco mas y no escucho lo que decía.

- Y... ¿Que pasará con mi madre y mi hermano?- pregunté desviando mi mirada hacia el director, aun no me creia que esto estuviera pasando.

-Ellos estuvieron informados en cuanto te encontraron y te llevaron a la comisaría, no tenían registros de ti puesto a que no eres de este estado, estabas perdida y muy lejos de tu hogar, pero ahora podras ir de vuelta a tu lugar de origen - Mi garganta se secó, ellos sabian... y nunca me dijeron.

Yo... sabia que era adoptada, pero nunca supe de mis verdaderos padres, ¿Como es que de repente este chico aparece diciendome que era un cercano a ellos? Esto parece incluso absurdo.

- Imagino que no puedo refutar el irme - había que ser realistas, no conseguía nada haciendo algun berrinche y mucho menos.

- Lamento no haber aparecido antes, tengo mucho tiempo buscándote, te prometo que de ahora en adelante te cuidare, trataré de ser mejor.- Le miré, sus ojos mostraban una tristeza y melancolia inefables, el corazón se me rompió al ver esos orben tan tristes. Sus palabras sonaban dolidas, verdaderas, como una promesa de esas que te haces internamente.

- Dentro de una semana vendrán a buscarte, tu madre y hermano te darán los detalles cuando llegues a casa, pueden irse. - me pare e hice una corta reverencia para luego salir despues de Kaname, mi mente estaba difusa, mucha informacion que procesar. Casi se me quedaba la mochila en el despacho del director.

-Milenne... - Me llamó, hablaba tan calmado y bajo que si no prestabas atención no podrías escucharle, aunque algo en su ser te hacía no despegar la mirada, tenia una belleza única, casi irreal...

- ¿S-si? - el caminar por los pasillos vacíos del intituto con él hacía que los nervios afloraran como si nada.

- Siento el que todo esto pasara tan rápido, no se me permitía buscarte hasta ahora - miré sus ojos tan cautivadores, con un color borgoña intenso, tan raros como los mios.

- Y... ¿Qué edad tienes? -pregunte con pena, una armoniosa risilla salio de su boca, quede embobada con ello.

- Que directa... tengo 19 años - me respondió con una sonrisa. " Para tener esa edad... tiene una actitud muy madura y serena"  

- Y... ¿Porque nunca supe de ti?. Me resulta extraño que de un momento a otro, despues de tanto tiempo aparezca alguien quien dice ser cercano a mis verdaderos padres...- dije nerviosa al sentir su penetrante mirada en mi, haciendome sentir minuscula. Este no respondió...parecia pensativo, ¿Acaso habia dicho algo malo?, creo que si...

- ¿A donde me llevarán? - pregunté para cambiar de tema, a decir verdad me entristecía el tener que dejarlo todo e irme tan... inesperadamente.

- Te incribirás en el instituto Cross, allá tienen dormitorios, es casi como un internado, solo que... mas libre, no se si me explique. - Internado... ¿Enserio?

- Entiendo...- fue lo unico que respondí, no sabía ya en que pensar.  Lejos de mi curiosidad por quién era este hombre que caminaba con tanta tranquilidad y pacifidad a mi lado.

Ya habían dado el toque de queda para salir a casa, Kaname se habia ido justo como habia dicho anteriormente, tenia mi mente lejos, más que la preocupacion de tener que irme, pensaba en aquel chico, sabía perfectamente que era el mismo que me visitaba por las noches... tenia su misma aura... me hacia sentir exactamente lo mismo al mirarlo o tenerlo cerca, pensaba que era solo una ilusion, pero no... es real, ¿Tal vez todo este tiempo estuve soñando con él?, Como una preminición o algo asi...

Kaname Kuran... que curiosidad te tengo.

The White Queen And The Black King (Kaname X OC) (Yuuki X Zero)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora