*Narra Louis
Me despertaron unos murmullos y unas luces. Abrí los ojos un poco, pestañeando varias veces para acostumbrarme a la claridad de la cabaña. Sólo pude divisar una luz blanca cegadora que hizo que volviera a cerrar los ojos repentinamente. Supuse que había tormenta y relámpagos y por eso la habitación se iluminaba por esa luz.
Pero ahora que lo pienso detenidamente...La única ventana que hay en la cabaña, está al otro lado de la habitación. Así que abrí los ojos de nuevo, y me encontré con esa luz cegadora muy cerca mío. Pensé en alguno de los chicos jugando con una linterna para joder. Hasta que me di cuenta de que esa luz era el flash de la cámara del móvil de Jess. ¿Y esta ahora por qué sacaba fotos? Me hice el dormido cuando vi que Harry estaba con ella y murmuraba algo mirándome y riéndose. Qué cabrón el tío. Entonces, me percaté de que _____ se movía al lado mío.
—Ala, ya la has despertado — susurró Harry.
—Querrás decir ya LOS HAS despertado — dije yo abriendo los ojos una vez más.
Jess guardó el móvil rápidamente. _____ estaba mirando hacía Harry y su amiga, igual que yo, por lo que no veía su cara. Sin embargo, pude notar cómo la chica se ponía tensa a mi lado y los demás intentaban aguantar la risa.
—Louis, cariño. ¿ME EXPLICAS QUÉ HACE TU MANO EN MI CINTURA, Y POR QUÉ TUS PIES ESTÁN SOBRE LOS MÍOS?
Miré hacia mis pies. Uno de ellos estaba encima de la pierna izquierda de _____, quedando así nuestros pies entrelazados.
—Yo... —me sonrojé. La verdad es que cuando _____ se quedó dormida, yo aún seguía despierto. Y oí como susurraba en sueños, pues tenía una pesadilla. La había abrazado y consolado hasta que dejé de oírla y supuse que había tenido otro sueño. Después de eso, había dormido así toda la noche, sin darme apenas cuenta. —Pues no lo sé...
—LOUIS WILLIAMS TOMLINSON. ¿ME EXPLICAS POR QUÉ SIGUE TU MANO AHÍ? ¡LEVÁNTATE!
—¡Ya voy, ya voy!
Me incorporé y me senté en la cama.
—No me puedo bajar si no te quitas.
Ella bufó y se levantó de mala gana.
—Buenos días a ti también, preciosa —bromeé.
—¡No me llames así! Y tú —dijo señalando acusadoramente a Jess. —Ya estás tardando en borrar esas fotos.
—¡Pásamelas primero! —le grité.
—CÁLLATE —me contestó _____.
Mientras, Harry reía a carcajadas y Jess se movía nerviosa.
—Déjame verlas al menos.
La mejor amiga de _____ me pasó su móvil con la foto en pantalla. Sonreí. La verdad es que parecíamos una pareja.
—No sonrías. ¿Por qué sonríes? No es gracioso — dijo ella mirando también la pantalla del móvil de nuestra amiga.
—No es gracioso. Es... — bonito. Sí. Bonito es la palabra.
—Es... ¿qué? — insistió ella.
—¡No sé! — grité levantando los brazos como si me estuviesen atracando y apuntando con una pistola a la cabeza.
Ella resopló.
—A todas estas, ¿qué hora es?
—Las ocho y media — respondió Harry mientras yo devolvía el teléfono a su dueña. Después de haberme enviado la foto a mí mismo, claro.