La vida es un libro (Eunhae fanfic)

Capítulo 2

"Un chico extraño"

Hyukjae.

1

Le di una mordida a mi sándwich y asentí ante todas las instrucciones que me daba Heechul, mi asistente.

—La conferencia durará una hora entera y será transmitida por la página web de la editorial. Trata de hablar fluidamente y no dar respuestas que puedan durar más de un minuto. Tenemos que hacer esto lo más dinámico posible. Habrá como veinte reporteros hambrientos de respuestas y 120 personas que esperan una firma tuya, todo para tres horas de evento. Entiendes la gravedad de esto ¿cierto?

Yo volví a asentir. Tomé una servilleta del enorme escritorio y limpié la mayonesa de mis comisuras.

—Lo tengo todo controlado.

—Si los reporteros te hacen una pregunta personal tú contestas...

—"Ese es tema para otra reunión".

—Y...

—Y sonrío —le mostré mi mejor y más hipócrita sonrisa de oreja a oreja.

—Asombroso —Heechul me dio unas palmadas en la espalda—. Estaré atento detrás del escenario por si necesitas algo ¿okay?

—Bueno.

—Otra cosa —Heechul se cruzó de brazos y se apoyó contra el escritorio —Esto es una mierda. No sé porque vendieron tantas entradas, pero tendrás que controlar muy bien tus tiempos. Cada lector tendrá solo un minuto para hablar contigo ¿Entiendes? Solo uno. Si alguien se alarga un poco esto terminará mucho más tarde de lo estimado. De todos modos habrá un guardia controlando eso.

—Se me va a caer la mano por firmar 120 libros. —En las firmas normalmente había unas setenta personas. Miré mi mano derecha con la que sostenía el sándwich. En menos de dos horas estaría doliéndome como la mierda. Lo sabía.
Podía verme a mí mismo por la noche en mi cama, sosteniendo una bolsa de hielo para bajar la hinchazón. Aunque de pronto... —¡Se me acaba de ocurrir una idea para un libro!

—Ay, no otra vez...

—Este es un hombre de 40 años. La gente a su alrededor cree que es un tipo normal, pero lo que no saben es que es un profanador de tumbas. Es un pervertido total, desentierra cadáveres de mujeres y los lleva a su casa porque le excita el olor de la muerte, aunque nunca se ha atrevido a matar. El caso es que en una noche de crimen la policía casi lo pilla, entonces se ve obligado a huir, pero no puede robar el cadáver que ha desenterrado, razón por la cual se limita a cortarle la mano y llevarla consigo. Todo marcha relativamente normal hasta que pasadas unas noches comienza a encontrar la mano fuera de la nevera donde la guardó.
Lo que le pobre imbécil ignoraba es que aquel cadáver pertenecía a una bruja muy poderosa que...

—Alto —Heechul me cortó el rollo y se puso la palma de la mano sobre la frente—. Hazme el favor de terminar primero con "En las catacumbas de Medellín". Tienes que entregarme ese maldito libro terminado en dos semanas ¿Entiendes? O me voy a enojar mucho.

—Vale —asentí como niño regañado. Aunque de todos modos saqué mi teléfono móvil y me hice una nota con la idea.

—Faltan veinte minutos. Ya dejamos entrar a los reporteros. —Una chica vestida formalmente llegó a nosotros y nos dijo aquello. Era parte del personal.

—Perfecto —Heechul se frotó las manos y soltó un suspiro. Él se ponía más nervioso que yo en este tipo de eventos—. Acomódalos en las filas del frente. Dentro de diez minutos deja entrar a los lectores y ayúdenlos a tomar sus correspondientes asientos. No quiero que esto se torne un desastre ¿vale? Quiero que todo salga de acuerdo a lo estipulado y que termine a las 12:00 p.m. en punto ¿okay?