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R.
Menta. El olor a menta y fresco aroma de colonia para después de afeitar invade mis fosas nasales mientras mis ojos hinchados se ajustan lentamente a la luz que entra por las grandes ventanas. Procedo a levantarme inmediatamente de las almohadas que hacía unos momentos me envolvían y me concentro en el mini ataque al corazón que me provoca despertar en un ambiente que no me es familiar. Mis manos agarran febrilmente la cama vacía en busca de algún tipo de familiaridad. Sin embargo, cuando mi mente finalmente se despeja, suspiro y me río de mi misma antes de volver a acomodarme entre las cómodas almohadas.
Estoy en la habitación de Harry.
Me lleva menos de uno segundo reconocer de dónde viene el delicioso olor. Estoy agarrando el dobladillo superior de la camiseta masculina que llevo puesta, levantando la tela lentamente hacia mi nariz antes de inhalar. La fragancia es relajante y puedo sentir que mis ojos se cierran perezosamente mientras doy a mi cerebro la oportunidad de despertar. No obstante, siento que me arrepentiré de esto poco después. intento abrir mas los ojos y suspiro mientras frunzo el ceño hacia el techo. El recuerdo de la noche anterior llega de forma espontánea; Primero recuerdo el suelo frío y cómo me había torcido el tobillo, que seguramente se hincharía pronto . Recuerdo la llamada con mi madre, es algo muy triste que debería dejar de lado, pero no puedo evitar revolcarme y sentirme muy mal al pensar que esta haciendo todo esto por nuestro bien. O al menos creo que eso hace. Recuerdo haber tomado el autobús desde las afueras de Londres, ignorando las extrañas miradas que recibe una adolescente completamente empapada dentro de un autobús en medio dela noche, demasiado concentrada en todo lo que que tendría que hacer una vez fuera del medio de transporte.
El entumecimiento ocasionado por el frió de la lluvia se ha convertido en un simple recuerdo, pero sigo pensando en como la letras que forman STYLES fuera del edificio en el que me encuentro, habían sido el primer atisbo de esperanza que recibí la noche anterior.
Y luego vino él.
Sus brazos y la forma en que me llevó a la cama, sin ningún esfuerzo aparente. A pesar de todos los horribles sucesos que quería olvidar, ya que tenía cosas más importantes que atender hoy, no puedo dejar atrás lo cálido y cómodo que se sentía a mi lado la noche anterior, pero ahora la cama se siente vacía. Mis manos frotan mis ojos mientras saco las piernas de las reconfortantes sábanas, mis pies descalzos golpean el duro suelo de madera, me levanto y comienzo a caminar hacia la salida de la habitación. Cuanto más me acerco a la puerta, más y más siento como los nervios se apoderan de mi.
Estoy en la habitación de Harry. En su desván, dentro de su edificio de oficinas, usando nada más que su ropa. Honestamente, no sé qué temo más: que me saque de aqui, o peor, que se sienta incómodo con lo que pasó entre nosotros.
De acuerdo, dormimos juntos. No juntos, sino uno junto al otro. Ahora incluso yo, a quien se consideraría una niña ostensiblemente ingenua de diecisiete años, sabe que un acto pequeño como ese no es algo de lo que preocuparse o avergonzarse. Pero tal vez la preocupación de lo que hice con él no sea lo que me molesta en realidad. Tal vez no se trata del beso inocente o el abrazo de sus brazos radiantes a mi alrededor mientras dormía.
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Flower » h.s. [Español]
Fanfiction"En realidad, nunca llegué a ser una niña pequeña" "Bueno, ahora eres mi niña". La inocencia es un premio que no se da por sentado. Para Rose, de diecisiete años, una infancia es algo que anhela, mucho después de que la suya terminó...