66 Días para que funcione.

28/05/17 Sueños o realidad.

Haz lo que puedas pero hazlo bien, nadie puede ser perfecto en el mundo mientras este vivo por eso si vas hacer algo aunque sea poco trata de hacerlo bien y poniéndole mucho empeño a lo que sea que harás.

Dan pasó el día escribiendo mucho sobre lo que le pasaba pues quería ayudar a alguien que también estuviera pasando por lo que el pasaba, creía que en un futuro podría publicar un libro con esos simples escritos tenia en esa libreta, mientras Dan escribía lo alcanzó la noche y después de unas horas lo alcanzó el sueño quedando Dan rendido hasta el otro día.

Al día siguiente Dan se levantó de la cama y algo lo impulsó a mirarse en el espejo de su cuarto, Dan fue y se miró en ese espejo quedó un buen rato mirándose y pensaba ¿Que haces Dan? ¿Por qué estas así? Dan miraba su rostro hasta que tuvo miedo de el mismo.

Al sonar la alarma Dan salió de ese leve trance frente el espejo y se fue a duchar, al entrar al baño miró la bañera y pensó que seria mejor un baño largo y así relajarse mas para aferrarse a la vida. Mientras Dan estaba en la bañera metió sus manos al agua lentamente y se hundió un poco, duró un buen rato en esa posición sentía paz y el agua tapaba sus oídos por lo que no escuchaba casi nada, después de un rato Dan sintió como una mano hundía su cabeza hacia abajo lo cual hizo que el chico entrara en pánico Dan trataba de quitarse de la cara esa mano extraña pero la mano tenia mucha mas fuerza que el, era obvio La fuente aprovechó el momento y mando a una entidad para que acecinara a Dan y lo estaba logrando, Dan no podía contener mas la respiración y se sentía muy cansado por lo que dejó de luchar y en ese momento el chico que tanto había sufrido, que tanto había luchado murió y fue directo a las sombras.

-Hola Dan, por fin en casa. -Dijo La fuente-.
-No estoy en casa. -Dijo Dan levantándose del piso pues cayó desde muy alto-.
-Ahora lo es y tienes que acostumbrarte Dan. -Dijo La fuente riendo un poco-.
-Tenemos un pacto y sabes que si me quedo aquí tu estarías incumpliendolo. -Dijo Dan señalando a La fuente con mucha rabia-.
-Es mi pacto y puedo deshacerlo Dan, ya deja de pensar que tienes un plan mírate das asco. -Dijo La fuente-.
-¿Por qué quieres tanto mi alma? -Preguntó Dan dejando el miedo atrás-.
-¿Crees que voy a dejar que un simple niño le habrá los ojos a mas personas? No podrán ser engañadas por las entidades Dan y eso no te lo voy a permitir, yo me alimento de sus lagrimas de tristeza y me alegra aun mas cuando los tengo aquí conmigo ¿Crees que voy a dejar que eches a perder los planes de mi padre? -Dijo La fuente algo molesta-.
-Pero si yo no hablo con nadie ¿De que hablas? -Preguntó Dan un poco confundido-.
-Sabes perfectamente de lo que te hablo Dan no puedes mentir aquí porque yo lo se todo.
-No miento ¿dime de que hablas?
-Mmm ven acompáñame y te muestro. -Dijo La fuente atravesando un muro de arbustos-.
-¿Que es este lugar? -Preguntó Dan que había seguido a La fuente-.
-Es tu cuarto.
-No, no lo es mi cuarto no tiene esta mesa ni este color en las paredes.
-Este iba a ser tu cuarto en un futuro digo iba porque me adelante y ahora estas conmigo. -Dijo La fuente llena de orgullo por lo que hizo-.
-Sera así entonces. -Dijo Dan afirmando que su cuarto en un futuro iba a ser así pues saldría de ese lugar-.
-Ese que acaba de entrar ibas a ser tu, mírate ¿Ves lo que tienes en la mano?
-Si, es un libro ¿Pero que tiene que ver eso con que ayude a personas?
-El libro es tuyo y por medio de ese libro le ibas a abrir los ojos a muchas personas que por ahora las tengo aseguradas y hundidas en la depresión, son mías -Dijo La fuente levantando la voz y soltando una risa muy macabra-.
-Un libro, nunca pensé que escribiría un libro para ayudar a las personas, o sea si lo pensé pero nunca creí que iba hacer realidad ese pensamiento. -Dijo Dan-.
-No lo vas a escribir Dan. -Dijo La fuente mientras la imagen del cuarto de Dan desaparecía y aparecía una cueva donde entraban poco a poco-.
-Sácame de aquí. -Dijo Dan muy fuerte mientras el pánico de apoderaba de el-.
-Ya no hay salida Dan eres mio ahora.

Mientras se internaban en esa cueva oscura al ir caminando mas y mas Dan comenzó a escuchar gritos como si torturaban personas, el pánico y la imaginación de Dan lo hizo pensar que estaba en el mismo infierno, aunque nunca creyó en tal cosa ahora que lo vivía la verdad hacia que sus huesos se retorcieran.

-¿A donde me llevas? -Preguntó Dan con mucho temor-.
-Te reserve un lugar VIP para ti Dan no te preocupes después de un siglo te acostumbras a los gritos y sobre todo al dolor que sentirás. -Dijo La fuente mientras arrastraba a Dan ya que no quería caminar por el miedo-.
-Suéltame, quiero volver a casa.
-Llegamos. -Dijo La fuente mientras reía-.
-No! -Gritó Dan al ver a 4 entidades con túnicas negras y lanzas muy afiladas, pero también en ese lugar había una bañera como la de su habitación donde el había muerto pero esta estaba llena de lava muy roja envés de agua-.
-Muchachos miren quien llegó por fin. -Dijo La fuente-.

En ese momento apareció ante La fuente Astaroth el ministro, su cara de preocupación inquieto mucho a La fuente la cual le preguntó.

-¿Que pasa Astaroth? No ves que estoy en asuntos de mi padre.
-Mi señor tengo malas noticias. -Dijo Astaroth algo nervioso-.
-Habla ya mequetrefe. -Dijo La fuente en voz alta-.
-Es Clarck, viene por el muchacho. -Dijo el ministro llenando de alegría a Dan y de odio a La fuente-.
-Clarck no puede pelear contra mi es un simple ángel nada mas. -Dijo La fuente-.
-Señor pero no viene solo, viene con un ejercito de ángeles.
-Inútil eso es lo que es Clarck. -Dijo La fuente llena de rabia-.

Las entidades que estaban ahí se fueron al escuchar esta noticia, Astaroth pidió disculpas y también se retiró de la cueva y desapareciendo. Así en un minuto llegó Clarck con su gran espada quitando a todo aquel que se interpusiera en su camino mientras gritaba -Dan ¿Donde esta Dan?-.