El castillo estaba desèrtico, Venus caminaba con Serena tranquilamente hasta su habitaciòn, en la oscuridad de la noche las làgrimas solitarias de Serena, se veìan inusualmente brillantes.
~Las chicas aùn no han llegado...me imagino que aùn estan arreglando la casa del lago...Pensò Venus.
Serena se abrazaba asì misma, no hacìa frìo pero se sentìa helada, su calor corporal habìa disminuìdo considerablemente, ambas llegaron en pocos minutos a la habitaciòn real.
Venus entrò despuès de su mejor amiga, se quedò parada en la entrada de la habitaciòn mientras Serena acudìa al baño y se desvestìa para ponerse un camisòn ligero y se metìa a la cama.
Venus se acercò ràpidamente y la arropo, Serena se tomò las rodillas y las pego a su pecho, las làgrimas seguìan fluyendo en su rostro.
~¿Quieres que me quede contigo? Decìa Venus conmovida pero tambièn culpable.
~No...quiero estar sola...quiero escucharlo...Decìa Serena lastimosamente.
Venus sintiò que su corazòn se encogìa, sus ojos se pusieron cristalinos mirò un instante a su Reina antes de salir de aquella habitaciòn lujosa en la cual ella se encontraba sola y cerrò la puerta, dònde se recargò angustiada.
~Tengo que hablar con Healer...algo no està bien...Pensò Mina y saliò corriendo por el pasillo, sabìa a dònde tenìa que ir, el objetivo era que no podìa ser vista y sòlo una persona la podrìa ayudar, o màs bien sabìa quien tendrìa la soluciòn.
~FIGHTER! FIGHTER! DEMONIOS ABRE LA PUERTA!! Gritaba enfurecida Healer golpeando aquella puerta, habìa salido corriendo despuès de que la princesa Kakyuu les dijera a grandes rasgos lo que Fighter hacìa, su alma, la parte màs pura de ella, se desprendìa de su cuerpo fìsico para viajar por toda la galaxia hasta encontrarse con su cometido, la Reina de la Luna.
La princesa kakyuu y Maker llegaban corriendo, en sus rostros se veìa la procupaciòn y la ansiedad.
~No abre la puerta...Decìa Healer, derrumbàndose a los pies de su reina.
La princesa Kakyuu sacò un par de llaves y seleccionò una con dos dientes y la introdujo en la cerradura, con un medio girò, la puerta se abriò, los ojos de la princesa Kakyuu se enfocaron en los ojos azules de la chica rubia que estaba pintado en las paredes de la habitaciòn justo frente a la cama de su amada estrella fugaz.
Healer entrò velozmente, Fighter estaba tendida en su cama, inconsciente, unas làgrimas se veìan en su rostro, pero sonreìa.
Healer mirò confundida a su princesa y a Maker.
La princesa Kakyuu se acercò cautelosa al cuerpo inerte de Fighter, sacò el cristal de fuego que traìa siempre colgando de su cuerpo y tomò la mano de Fighter, cerrò los ojos.
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EL AMOR DE UNA ESTRELLA ES INFINITO
FanfictionLa vida de Serena como la Neo Reina Serenity del siglo XXX, no es còmo ella lo imaginò ni còmo creyò que fuera, ahora el destino le brinda una oportunidad de ser feliz, ¡tendrà el valor de tomarla? ENERO 2019