M o t h e r

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Segunda semana. Roger tuvo bastantes problemas en adaptarse a todo lo ocurrido, aunque no era muy difícil al final de cuentas, solo era obedecer las reglas.
"Comer cuando es hora, nada de números o cantidades, no celulares."
Que difícil era tener que obedecer la última, al no estar conectados a la tecnología muchos tenían que crear música, dibujar, escribir o leer libros.

Ahora mismo eran las 9 de la mañana, habían desayunado a las siete y ahora todos estaban metidos en sus cosas. Roger estaba en su cuarto decorando su parte con Freddie, bueno él se estaba decorando a si mismo, en el espejo de su parte se encontraba maquillándose los ojos y polveandose la cara.

-¿Que color me recomiendas hoy, Roggie?-Dijo Freddie, mostraba unas sombras color morado y otras color rosa.
Roger, quien estaba pegando fotos en su pared se giró para poder prestar atención, se quedó pensando un momento hasta que llegó a una decisión.

-Rosa.-Sonrió un poco y siguió en lo suyo.
Fotos de él y su familia cuando eran felices, de sus amigos, de sus parejas. He incluso fotos de sus ídolos, como The beatles, Rolling Stones he incluso Sex pistols.
Puso unas luces que parecían ser navideñas, si no fueran blancas de seguro lo serían, una lampara roja y el clóset lo llenó de posters y pegatinas. Compró peluches para no hacer ver su cama más solitaria he incluso ropa, estaba satisfecho con su decoración. Suspiró cansado y se acercó a Freddie, tomándole de los hombros mientras reía.

-¿Como es que tienes un puto piano acá?-Señaló el instrumento.-¿Que hago para tener un instrumento también?

-Sólo pídelo, my dear.-Se pintó los labios de rosa, se veían naturales.- Algunos lo tienen, como Brian. Bueno, él trajo su propia guitarra y otros aprendieron a tocar un instrumento por aburrimiento.

Roger pensó. Siempre quiso tocar la guitarra, y tocaba un poco el ukelele, no sería mala idea comenzar a aprender cosas nuevas. Miró la pared de Freddie, habia fotos de él con artistas y cantantes, como era David Bowie y Paul McCartney. Sonrió con emoción y se acercó a ver, también había fotos con la chica rubia Mary, con su aparente familia y escritos.

-¿Conociste a Bowie?

-Si, fue hace mucho tiempo... Tenía como unos quince o dieciséis.-Sonrió un poco melancólico.- me escuchó cantar en un bar... Estaba un poco ebrio. Una fiesta escolar...

-Ya veo. ¿Cantas?-Freddie asintió.- veo que escribes música... Tu madre debe estar orgullosa.

-Si... Espero que si.-Se levantó se acercó, al rubio, entonces señaló otra foto; Freddie en una camilla de hospital en donde estaba su madre dormida. Él sonreía, sostenía la mano de su pobre madre, tenía tubos en todo el cuerpo.
Roger se apartó, pronto vió que Freddie comenzó a llorar, pero él rápidamente se secó las lágrimas y verificó que todo estuviera bien con su maquillaje.
-Murió hace un año, leucemia.

-Lo siento tanto...

-No me des compasión, por favor. Solo son minutos perdidos.-Suspiró,tomó aire y sonrió nuevamente, tomó a Roger de la mano y salió.
"Vamos a buscarte un instrumento" dijo. Parecía más emocionado que Roger, como si el instrumento fuera para él.

Después de buscar un poco, se encontraron con John anotando cosas que comprar.

-¡Hola Deaky!-Freddie soltó a Roger.-Cariño, te traigo un pedido.

-¿Que necesitas, Fred?

-No, yo.-habló Roger.- Quiero un instrumento, un ukelele y una guitarra.

-Yo quiero una corona, como la de un rey.

Deaky comenzó a anotar.
-Entendido, llegarán para el sábado.-Fue lo último que dijo antes de irse a atender a los nuevos.
Ambos chicos rieron emocionados, se abrazaron y brincaron de alegría. ¿ahora qué?,Freddie se fue con Mary, dejando a Roger solo sentado en la sala viendo la Tv con otras personas, pero algo le hizo sacar de su zona de comfort; gritos.

Se levantó, se sorprendió al vee que era el unico que puso preocupación en esa situación, al fijar su mirada en lo que pasaba, se encontró con una madre y una hija peleando, la chica era bastante alta y muy delgada, estaba en los huesos. Se jalaba de su madre, hasta que ella le soltó un golpe.

-¡¿Por qué me haces esto, Mah?-Gritó la mujer.-¿Ves todo lo que nos pudimos evitar...?

-¡Mamá, déjame!-Lanzó la chica.-Mamá... No sabes que pasa por mi cabeza... Hay tantas cosas que explicar y no encuentro la forma de decirte lo que hay en mi mente... Mamá, ¿por qué no te preguntas el porqué de mi situación?

Se la llevaron, los ayudantes se llevaron a la chica arriba con todas sus cosas, dejando a la mujer llorando desconsoladamente preguntándose una y otra vez que había hecho mal. Maldijo una última vez y se fue, Roger parecía estar en shock... Realmente había sido algo muy fuerte que no entendía que estaba pasando, hasta que un recuerdo se vino a su mente.

Cuando eras joven y todo parecía ser fácil.

Roger comenzó a bajar de paso rápidamente, su madre estaba muy preocupada por él, hasta que en una cena familiar ella se atrevió a hablar. Todos tenían alimentos, menos Rog. Él solo bebía agua de un vaso, y aveces jugo.

-Roger, come...

-No gracias, mamá.-Respondió él.
Lo último que recuerda, era que estaba lejos de todos los demás, su madre lo regañaba.

-¡¿Por que me haces esto?!, ¡me estás dejando en ridículo!

-¡Mamá por favor ya hablamos de esto!

-¿Que hice, Roger?-Su madre comenzó a llorar.-¿Por qué les pones atención a otros?, ¿me odias, Roger?,¡¿Me odias porque saliste igual a mi, verdad?!

-No mamá ...yo te amo...

-¡No es cierto!, traté de darte lo mejor pero no te importa, me odias.

-¡Mamá, me odio a mi mismo! -Dijo por fin su madre se detuvo.- Mamá... No puedo ignorarlos, son muchas cosas... No puedo hacerlo, mal. Mal. Me siento mal, no estoy conforme conmigo mismo... No eres el problema, lo soy yo.

Su madre golpeó su mejilla, entre lágrimas y sollozos le gritó un "Has lo que quieras",se fue.

Roger miró a su alrededor, estaba llorando y no se había dado cuenta, por suerte Brian pasaba cerca y fue a ayudarle.
"¿Que pasa?" le dijo, tomó su mano con cuidado y trató de ver si estab herido, no lo estaba físicamente.

-Recuerdos...

-Lo entiendo... Tranquilo,estás bien. Estás salvo acá, nadie te hará daño...-Lo abrazó.
Roger cerró sus ojos, se apegó y se sintió a salvo. Solo necesitaba que alguien le abrazara, que le dijera que todo estaba bien y que pronto habría una solución.

-mamá, abrázame por favor...

-No Roger, no te defiendes por tonto. A mi cuando me hacían eso, yo los ignoraba.

-No puedo, mamá... Por favor abrázame...

-Deja de llorar.

-Está bien si lloras, es normal...-Brian hablaba, tan relajado y confortante. Acarició el cabello del chico, sentía como él lloraba cada vez más y más.

-Mamá... Lamento ser un mal hijo...

Ella no respondió.

-Estoy decepcionada...

-Lo sé... Soy un desastre...

-Estoy orgulloso de que sigas aquí. Sigues vivo Roger, eres muy valiente.

Si... Todo estaba bien.

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Lo siento...
Necesito sacar lo que siento...

Su fiel escritora;
Llumy-

🌕Ana y Mia🌙 ﹏QueenFanfic﹏Donde viven las historias. Descúbrelo ahora