Bailas Conmigo?

Capítulo 7

-Muy bien clase, eso fue todo por hoy, muchas gracias por venir a compartir con todos nosotros, los que me conocen hace un tiempo saben que creo que la vida es un conjunto de momentos compartidos.- Algunos dentro de la sala asienten con un movimiento de cabeza- Acuérdense que tienen un cupón válido para una bebida y se pueden quedar hasta que cierre el lugar. Nos vemos la próxima, gracias!- Todos los que participaron de la clase aplauden a Juliana, ella hace una reverencia y también los aplaude. A Valentina le hace pensar que es muy querida por todas esas personas, ella también la aplaude porque realmente le pareció muy buena su clase y aprendió un poco del género que quería aprender hace un mes. Decide retirarse del lugar porque le pareció que ya no tenía nada que hacer allí, pero en cuanto se da vuelta para irse Juliana la detiene. -Esperá Valentina- Val se da la vuelta en cuánto siente la mano de Juls en su hombro- Quería saber que te pareció la clase?- Le consulta

-Estuvo buena, veo que te quieren aquí- su voz es más gentil de lo normal para tratar a Juliana

-Oh sí, la mayoría son alumnos habituales. Todos los Viernes a esta hora en este lugar doy clases de algún ritmo, hoy tocaba Bachata. Puedes venir el próximo Viernes si quieres, eres muy buena en esto.- la anima Juliana, realmente quería que viniera

-Lo pensaré. Tú eres muy buena enseñando

-Gracias, quieres un trago? Puedo conseguirte uno

-No, gracias. Estoy con un amigo- y lo señala a Sergio que ya estaba en la mesa que se encontraban antes

-Puedo conseguirle uno a él también. Dale, vení- y la dirige a la barra, Valentina la sigue por detrás, Juliana era muy convincente cuando quería.- Qué quieres?

-Una limonada está bien

-Perfecto, y para él?

-Em...- duda- otra una limonada

Le hace un gesto de aprobación con la cabeza y mirá al chico de la barra- Oye Juanchi me preparás dos limonadas??- el chico asiente- Y un Jugo de Naranja por favor.- vuelve a asentir y se da vuelta para preparar las bebidas. Una vez que están, se los pasa a Juliana- Gracias, agrégalo a mí cuenta.- le pasa las limonadas a Valentina, ella le agradece- Hace mucho que bailas?

-Pues la verdad que esta es mí primer clase hace mucho tiempo, de chiquita solía ir a clases de baile pero lo dejé y no he vuelto

-Una lástima que lo hayas dejado porque eres muy buena

-No soy buena, me cuesta

-Mira, he tenido muchas alumnas en mí vida y a ti no te ha costado tanto agarrar el ritmo -Valentina la mira sin saber que decir- Ya, olvídalo. Te espero cuando quieras.

-Gracias por los tragos, nos vemos - Y se retira casi con las mejillas enrojecidas, agradece que el lugar este bastante oscuro para que Juliana no se de cuenta de ello

Valentina vuelve a la mesa donde Sergio la estaba esperando, le da una de las limonadas y se sienta frente a él.

***

Han pasado dos meses ya desde aquella clase. Dos meses bastantes intensos para Valentina, por lo general a ella no le gustaba llevar una vida intensa, buscaba la tranquilidad y no hacerse problema por muchas cosas que podrían sucederle, pero por alguna extraña razón a Valentina le estaba gustando esta vida intensa que estaba teniendo, y esa extraña razón tenía nombre y apellido. Las cosas con Juliana habían mejorado, a decir verdad lo que mejoró fue su trato hacía ella y eso hizo que todo, absolutamente Todo, cambiará. Se dió cuenta que efectivamente Juliana Valdéz era una buena chica y que tenía sentimientos nobles. El ambiente en el trabajo ya no era tan tenso, y eso hacía que Valentina se levantará con ganas de ir a trabajar. El Chino Valdéz estaba muy contento con su desempeño y eso se lo recalcaba cada vez que se cruzaban dentro del gran edificio, era un hombre muy agradable y al ir conociéndolo entendió porque su hija también lo era. A la mamá de Juliana no la habría visto pero sabía de su existencia gracias a Juliana que cada tanto le contaba que salía antes para ayudar a su madre a hacer las compras o algún favor que le habría pedido. Realmente la familia Valdéz le parecía buena gente y hasta ese entonces no tenía idea que una familia podía llevarse tan bien, cosa que no le pasaba a ella más que con Guille.