20# -Segunda oportunidad-

2.5K 329 37
                                    

°ThreeShot.
Extensión = 1013 palabras.
Advertencia: ninguna.
-----------------------------------------------------

-Papi- el pequeño Seokjin había llamado al moreno alto de cabello menta.

-¿Si precioso?- pregunto queriendo saber que le pasaba a su pequeño de cinco años.

-¿Tú amas a papi Hobi?- pregunto con un puchero demasiado adorable.

-Por supuesto que lo amo- respondió con una sonrisa y el pecho alzado, haciendo reír al menor.

-¿Y él te ama a ti papi?- volvió a preguntar con sus ojitos brillando y Tae solo pudo ocultar su tristeza y dolor a través de una sonrisa.

-Si bebé... bueno, ya es hora de dormir- tapó bien al nene y dándole un tierno beso en la frente salió de la habitación.

Suspiró y no quería ir al cuarto que compartía con su "esposo".

A ver, les cuento para que no se me pierdan; Hoseok y Taehyung fueron comprometidos desde que prácticamente nacieron, ellos fueron criados con esa idea. Hoseok no quería, y no es que le cayera mal el hijo de los Kim, sin embargo, él quería casarse por amor y no por obligación.
Tae trato de enamorarlo por qué él ya lo amaba. No funcionó y solo hizo que Jung lo rechazara de la más cruel y sincera forma.

"-No te amo. No siento nada y no quiero sentirlo, Taehyung. Tú no eres lo que busco y punto-"

Oh... ese día lo recuerda con detalle, porque hasta que no tuvo más lágrimas, no pudo dormir.
Fue duro y absurdo. Hasta el lo admite.

Y pues siguiendo con la historia; cuando cumplieron dieciocho años comenzaron con los preparativos. A mediados de año se casaron y tres meses después Hoseok resultó embarazado. Pero no nos equivoquemos, ese bebé no es suyo, es más bien de uno de los tantos ligues a "escondidas" que Hoseok mantenía. Taehyung jamás le reclamo nada y mucho menos le hizo una escena por todo ese... acontecimiento.

Kim se hizo cargo sin reproche y dando todo de sí para que ese bebé naciera sano y bien.
Y cuando el bodoquito nació, Tae supo que no importaba que fuera o no su hijo de sangre, él ya lo amaba como propio.

Su lindo, adorado y pequeño Kim Seokjin.

Y después de cinco años, aún seguian juntos. Hoseok no mostraba señales de que se había fijado en él y... ya estaba cansado.
Sentía que con cada huida por las noches del peli-rojo un fragmento grande e importante de su corazón caía sin piedad y se quebraba en miles de pedazos.

Desde hace mucho había intentado desligarse de su "matrimonio", pero Jung se lo impedía con excusas como: "Seokjin no puede pasar por eso" "Tae, Jinnie aún está muy pequeño para pasar por algo así"
"Jin no quiere que te vayas, hagámoslo por el niño"...
Y seguía la lista. Pero siempre y solo mencionando a su hijo.

El moreno sabía que si seguía en eso iba a terminar muriendo por la gran depresión que se cargaba, cada día su salud mental era peor, había que darle medicamentos para las recaídas, pero nadie -a excepción de los psicólogos- sabían sobre cuál era la causa de ese problema.

Una lágrima se deslizó por su mejilla y antes de pensar en que debería hacer para sentirse mejor, el timbre sonó.
Él algo confundido -pues eran las nueve de la noche- fue a abrir y se llevó con la grata sorpresa de su mejor amigo; Park Jimin.

-¡Tae!- y se lanzó a los brazos del de cabello azulado.

-¡Shh! Seokjinnie está durmiendo- le regaño el moreno entrando con Jimin colgado como un koala.

El rubio río y se descolgó para ir a sentarse en uno de los suaves y cómodos sillones de la sala. Tae suspiró ofreciéndole algo de tomar, pero Park declinó y le invito a sentarse junto a él.

-Quiero que seas mi padrino de bodas- soltó de golpe el de mejillas rechonchas causando el ahogó del menor.

-¿Qué?-

-Lo que oíste. Me voy a casar Taehyung- la sonrisa tímida y el sonrojo de su mejor amigo le hizo deshacerse en ternura.

-Vaya ¡ya era hora! ¡al fin ese cara de conejo te dio el anillo!- se burló el de cabello azulado. Por su parte Jimin hizo un puchero.

-No le digas así a mí Kookie- refunfuño cruzándose de brazos- él solo estaba esperando el momento adecuado para pedírmelo...

Ambos sonrieron, bueno Tae más en burla que otra cosa, pero la felicidad que sentía por el rubio era genuina.

-Te deseo mucha suerte Jiminnie y claro que yo seré el padrino ¿quién más?- sonrió altanero y Park se abalanzó hasta quedar ambos acostados en el sillón riendo.

No escuchando que la puerta principal se abría y un castaño dando paso a su casa, percatándose de la desagradable -para él- de Kim y Park muy cerca y melosos.

-¿Interrumpo?- pregunto serio, con una ceja alzada y las manos en la cintura-¿qué haces encima de mi esposo, Park?- dijo con descarados celos.

Taehyung frunció el ceño, él no permitiría que Hoseok le hablase a si a su mejor amigo y Jimin se dio cuenta de que si no se iba en ese instante podía empeorar las cosas. Así que decidió ignorar a su mayor y dirigirse al moreno.

-Bueno... creo que mejor me voy- murmuró suspirando, se separó del su amigo y camino a la puerta pasando de la fulminante mirada de Hoseok.

-¿Te voy a dejar? ya es tarde y no quiero que te pase algo malo- interrogó el peli-azul. El castaño enfureció más al escuchar a Kim.

-No es necesario TaeTae. Vivo a solo dos casas de ti- dijo algo burlón el bajito- nos vemos mañana, quiero planear todo desde lo más antes posible- sonrió y se fue

Kim cerró la puerta y se iba a dirigir a la cocina para preparase un té de menta. Lo necesitaba con urgencia.

-¿Podrías al menos respetar esta casa y a tu hijo que está arriba?- gruñó Hoseok de brazos cruzados y la ira hirviendo en sus ojos.

Y Taehyung no pudo más.
Explotó. Su mirada se tornó "roja" de la furia y finalmente lo dijo.

|C|o|ntinuara.

🔹V H O P E🔹Donde viven las historias. Descúbrelo ahora