Despierto de golpe al escuchar unos golpes en la puerta, tomo aire con fuerza y me siento sobre mi cama, vuelvo a escuchar los toques y me pongo de pie. Mientras bajo las escaleras voy acomodandome mi cabello. Cuando volví a escuchar los golpes abro la puerta.
- oh - dice el señor - buenos días
- hola señor Tomas - le sonreí
- pasaba a ver si ya te encontrabas en casa
- si, llegué anoche - crucé mis brazos - ¿gusta pasar? - me hice a un lado para que él pasara
Él entró dudoso y cuando estaba adentro cerré la puerta.
- tome asiento - le sonreí y me senté sobre el sofá
- gracias - se sienta en un sofá frente a mi
- ¿en qué puedo ayudarlo, señor Tomas? - sonreí alegre, me pone feliz verlo, tiene mucho que no lo veía
- es sobre mi hijo - agacha la mirada
- ¿Morgan? - arquee las cejas - ¿que pasa con él? - me enderecé
- se que... - tomó aire y sus manos comienzan a temblar
- señor - me levanté del sofá y caminé a él para incarme y tomar sus manos - ¿qué sucede?
Suspiró y sus ojos se llenaron de lagrimas
- ¿él sabe que está aqui? - lo vi a los ojos - puedo llamarlo, aún no sabe que estoy aquí - me puse de pie con todas las intenciones de tomar el teléfono sobre la mesita alado del sofá
- no podrá contestarte Emma - dijo susurrando
Giré a él, sus lágrimas ya caían sobre su cara
- ¿por qué? Puedo llevarlo a su casa, señor - regresé a él
Mi corazón está latiendo rápido, jamás vi al padre de Morgan así
- él - tapó su rostro y lloró con más fuerza
- señor - susurré y tomé sus manos, ahora mi voz se comienza a entrecortar
- él ya no podrá contestar el teléfono - se destapa la cara y toma mis manos con las suyas
- ¿de qué habla? - dije en un hilo de voz
- él... él murió Emma - suelta un suspiro y comenzó a llorar con fuerza
- ¿qué? - sonreí nerviosa - está bromeando
Me levanté rápido del suelo y le di la espalda, crucé mis brazos y cerré los ojos deseando que lo que me dijo está mal
- fué en Afganistán - dijo detrás de mi - cuando estaba haciendo su trabajo - sollozó - le rogué mil veces que no fuera que era mala idea - lloró nuevamente
- señor - voltee a verlo - está mal, usted está equivocado - le sonreí - Morgan no murió - sonreí nerviosa - voy a llamarlo para que venga con usted
- por favor - pidió - no me hagas ésto, también desearía que estuviera aquí - lloró
- no es verdad - dije firme
Mi corazón latía con fuerza, me dolía. Ésto es una locura, obviamente no murió, lo veré en la oficina de Wells, estoy segura, estará recargado sobre aquél mueble viejo bebiendo su taza de café como todos los días, sonriendome al salir del ascensor. Estará feliz y me contará como le fué en Afganistán, me contará todas sus aventuras mientras bebemos cerveza en el bar y después volveremos a casa para pasar la noche juntos, me dirá que me ama y yo le diré lo mismo mientras sonríe a centímetros de mi.
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ENFERMO | Shawn Mendes TERMINADA
Fanficuna investigadora de la revista más conocida de Canadá entra a un manicomio con tal de hacer una nota sobre los cuidados de los pacientes y tener el ascenso que siempre quiso. Pero ella conoce a un chico que le puede ayudar en eso, alguien que le de...