Capítulo 2

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"Renaciendo de las cenizas"

Desde el momento que entro al departamento supo que algo no iba nada bien. El ambiente era tenso y parecia como si un manto de tristeza hubiera cubierto por completo el lugar. May Parker, una mujer que él siempre había visto fuerte, tenía los ojos enrojecidos de tanto llorar.

-- ¿Qué a pasado?-- pregunto con voz preocupada, May sin en cambio le indicó que pasara y tomará asiento.

-- El viernes pasado llegó más temprano de lo normal a la casa. Intente hablar con él pero no me dio el tiempo, se encerró en su habitación y no a vuelto abrir la puerta. -- explicó la mujer mirando hacia el pasillo donde estaba la habitación de Peter.-- No a comido, no a ido a la escuela, ni siquiera se ve que haya encendido la luz.--

-- ¿Y no han hablado con la escuela? o con sus amigos... ellos deberían saber algo...--

-- Peter salía con un chico. Yo lo sabía desde hace un tiempo pero no sabia quien era, ahora ya se quien es.--

Bueno, la sorpresa fue grande, ya que el no había considerado que Peter fuera de aquellos a los que les gustaban los hombres, sin embargo más o menos ya tenía idea de lo que había sucedido, un mal de amores siempre era doloroso.

-- Entonces ¿Terminaron? ¿Eso es todo?--

Pero apenas hechas esas preguntas, May se soltó a llorar. Tony no sabía muy bien que era se supone que debería hacer, nunca fue muy bueno con eso de los sentimientos. Había colocado suavemente una mano en el hombro de la mujer cuando ella por fin continuo con la historia.

-- Si, terminaron, pero no era ese el motivo por el que mi sobrino esta así. Los primer días si que estuvo triste pero todo parecía volver a la normalidad, y entonces... Y entonces ese maldito hijo de perra hizo lo más bajo y humillante que se le puede hacer a alguien.--

El hombre se quedó desconcertado, no sólo porque May estuviera hablando con tanto desprecio sino también por la mirada llena de dolor e irá que esta tenía; iba a decir algo pero no pudo por Mey por fin soltó la verdadera razón por la que Peter estaba así.

-- El imbécil con el que andaba subió a Internet... fotos de mi Peter... donde él estaba... donde él...--

La verdad había sido terrible, no podía creer que alguien hubiera hecho eso a Peter, a un chico que se sonrojaba cuando era atrapado robandose los dulces de la cocina y quien aún llevaba los pijamas de figuritas más infantiles que había visto. Un chico que arriesgaba su vida por otras personas sin esperar que siquiera le dieran las gracias. Tony sintió una punzada de dolor y tristeza en su pecho, no era justo, no era justo que le robaran la inocencia a una persona como Peter y peor aún que se le exhibiera como a una...

-- Necesito verlo. --dijo sin más, se puso en pie y May le guió hacia la habitación que él de sobra ya conocía. -- Tiene que ser en privado, yo...--

-- Comprendo...-- dijo la mujer apartándose de la puerta y volviendo a la sala.

Tony tomó una profunda bocanada de aire antes de tocar la puerta. No hubo respuesta, volvió a intentarlo, nada.

-- Peter, Peter abre la puerta.--

--¿Señor Stark? -- por fin se escuchó decir una voz débil y rota al otro lado de la puerta.

-- Si, soy yo, Peter abre la puerta.--

--Usted no... No ¡No! -- se escuchó realidad un grito ahogado y nuevamente había sollozos.

--Peter ¡Peter! Si no abres la puerta voy a tirarla abajo. Uno, dos...--

Y la puerta se abrió, Tony se adentro a la profunda oscuridad, buscó el interruptor en la pared y encendió la luz. La habitación era un completo caos, había montones de papeles rotos esparcidos por el suelo, parecían haber sido fotos y cartas pero ahora no eran más que basura.  La cama estaba desordenada, la ropa regada por todos lados. Frente a él un chico quien tenía puesto únicamente un pantalón de pijama y una playera vieja, Peter tenía el cabello completamente desordenado, los ojos hinchados de tanto llorar, se miraba más delgado de lo que Tony recordaba además de terriblemente pálido.

Se acercó al chico el cual retrocedió un par de pasos pero al ver que Tony extendía las manos, apenas le bastó unos segundos para correr hacia ellos y abrazarse a él con fuerza. Comenzó a llorar nuevamente, Tony solo lo aferraba más contra él, acariciaba suavemente su espalda, sus cabellos, todo con la intención de darle un poco de consuelo. Peter parecía apunto de desvanecerse en sus brazos pero él no le dejo caer, lo tomo en sus brazos como a un niño pequeño, se sentó en la cama y dejo a Peter acomodado en su regazo con el rostro escondido en su pecho.

-- Me quiero morir...-- dijo la rota voz, Tony negó con un gesto de la cabeza y con una mano retiro las lágrimas de las mejillas de Peter.

-- No digas eso, no es el fin del mundo.--

-- Me estoy muriendo... Él... yo confie en él y él me mato...--

-- Shhh... estoy aquí Peter, tus amigos, tu tía, nosotros no vamos a dejarte sólo.--

-- ¿Usted también vio las fotos?-- preguntó con timidez y vergüenza, pero Tony negó levemente.

--No vi nada. Pero te juro que voy a desaparecer esas malditas fotografías.--

No supo cuanto tiempo estuvo así, arrullando a Peter entre sus brazos, dándole consuelo. Jamás imagino verlo algún día así, que esa sonrisa que lo iluminaba todo fuera reemplazada por sollozos y lágrimas. Odiaba a ese hombre, aquel que se atrevió a romperle el corazón a Peter Benjamin Parker. Esto no se quedaría así, no, Tony lo iba hacer pagar cada maldita lágrima que su niño había derramado.

--Vamos Peter, no has comido nada.--

--No tengo hambre...-- murmuró con la mirada gacha.

--May esta muy preocupada por ti, alivia un poco su angustia y ve a comer algo.-- Tony aflojó su agarre sobre el cuerpo de Peter pero el chico se aferro más a él.

-- No, no me suelte.--

--Peter...--

--Por favor no se vaya... No me deje sólo... Por favor... Por favor...--

Decía Peter con voz suplicante. ¿Cómo negarse?, tomó Tony el teléfono del bolsillo de su abrigo y marcó un numero.

-- Pepper, no llegare a casa hoy y no iré a la oficina mañana así que cancela mis citas. Si, ya lo sé, pero surgió algo más, no podre estar así que por favor cancela mi agenda.--

Y dicho eso colgó el teléfono, Peter dibujo en sus labios una sonrisa triste, parecía un gesto que no había hecho hace mucho mucho tiempo, pero ya era un gran paso.

-- Anda ya, yo pago la pizza.-- dijo Tony con una sonrisa amable apartando el cabello del rostro del chico.

-- ¿Habrá helado?--

-- Del sabor que tu quieras y tanto como puedas comer.--

-- Entonces si.--

Peter se levantó por fin del regazo de Tony y lo acompañó afuera de la habitación. En la sala estaba May quien al mirar a su sobrino fue corriendo hacia el para envolverlo en un abrazo.

Maldito San Valentín 🍒Donde viven las historias. Descúbrelo ahora