Capítulo 6 - Colador De Piedras

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Entonces, Taqueda rebanó un sin fin de cuellos, pero un guardia los vió, y pudo dar por pelos la voz de alarma, pero para entonces casi todos estarían sin defensas, y salieron bastantes samurais casi sin atuendos para protegerse, solo con sus catanas, y derrepente, salió su mujer llorando, y sus dos hijos, y tras ellos el emperador, dijo:"¡basta!" y desafió a Takeda, de que si seguía con esa locura, le quitaría el cabello a su mujer y esclavizaría a sus hijos, Takeda pensó, mientras Lodbrok le insistía que se diese prisa mientras mataba a otros samurais, pero sin respuesta de Takeda, mató a ese samurai y acto seguido de darse la vuelta, Takeda corrió y lo decapitó rápidamente, su cuerpo arrodillado ante Takeda, hechando sangre y manchando su armadura, se arrodilló ante el emperador y suplicó que no lo hiciese, entonces Hannibal se lanzó desde uno de los barracones y le clavó su tridente en el estómago, y mientras el emperador dijo:"¡no tienes ni idea de contra quienes te estás enfrentando!" y Hannibal, mientras retorcía su tridente en su estómago dijo:"no importa quien seas, no importa cuantos seais, no importa si muerlo, ¡me importa que termine el sufrimiento y caos de este mundo aunque tenga que sacrificar a todos los mal nacidos como tú!" y sacó rápidamente su tridente, en el cual estaba pinchado su corszón y sus tripas, y vió como Takeda había asesinado a Lodbrok, entonces, en un desafío entre ellos, se preguntaba poqué hizo eso, entonces Takeda se lo explicó, y aunque no terminaba de entrar en razón tampoco atacaba, entonces, Hannibal tiró su tridente y dijo:"si a de ser por eso, puedes volver con tu familia, pero huye, huye rápido y lejos de aquí" y con mirada de desaprobación levsntó la cabeza y miró a Takeda, se hizo un silencio, pero entonces, vino Lucius, vió rápidamente que asesinó a Lodbrok, y cargó contra el, Takeda se dió media vuelta, y como una flor, se abrió su cabeza en dos partes y cayó desplomado al suelo, entonces, su mujer corrió a llorar por su pérdida, y con mirada de terror y pena, dejó atrás ese suceso, el lo intentó, pero si solo ubiese aguantado un poco mas, nadie ubiese muerto en vano, después de la toma del castillo, hicieron una tregua algunos nórdicos y caballeros, de quedárselo entre ellos, con ambas facciones custodiandola, y, aunque fuese un castillo mas, hubo no solo un mal sabor de boca, si no, una familia infeliz, pero, realmente, por culpa de todo el desorden, guerras e injusticias que impedían formar parte de un mundo algo más honesto

Por el honor de Júpiter Donde viven las historias. Descúbrelo ahora