Hermano sobreprotector

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El molesto ruido de la alarma termina con mi sueño. Suspiro y me quedo unos segundos mirando al techo, no me muevo. De pronto mis pensamientos viajan hacia el e-mail misterioso, ¿Habrá enviado algún otro? ¿Quién demonios puede ser? Decido terminar con mis dudas antes de que me atormenten, rápidamente me incorporo y enciendo mi computadora, esta algo vieja así que esto demora. Apenas esta lista abro mi e-mail. Ha escrito de nuevo.

De: fanatico451@mail.com

Para: Emily.Hudson96@mail.com

Sé que has leído mi mensaje. ¿Me tienes miedo?

¿Qué se puede responder a eso? Por supuesto que si le tengo miedo. Es decir, tiene mi correo, por lo tanto sabe mi nombre, puede ser un psicópata que solo quiere verme desnuda por webcam. Pero no puedo dejarle saber que me intimida.

De: Emily.Hudson96@mail.com

Para: fanatico451@mail.com

¿Debería tenerte miedo?

Espero por su respuesta, pero no llega. Debe estar ocupado o probablemente aun no se despierta. Suspiro y me dejo caer en la cama, ojala pudiera faltar a clases, pero mi informe de asistencia no es el mejor y no puedo darme ese lujo. La puerta de mi dormitorio se abre, dejando ver la figura de mi hermano Alexander.

—Deberías levantarte o no te llevare.

—Puedo caminar por si no sabias.

—Sabes que no serias capaz de caminar hasta la escuela—sé que tiene razón, puede que siempre la tenga, pero eso es algo que no estoy dispuesta a admitir en voz alta.

—Entonces sal para que pueda vestirme—Alex me regala una sonrisa triunfal antes de salir.

Odio sus actitudes altaneras, se parece a Jackson. Tal vez por eso son amigos. Alex va un año delante de mí, aunque lo está cursando por segunda vez, pero su nivel de madurez es exactamente igual al de Jackson. Ellos son una extraña especie de mejores amigos. Al principio esperaba que Alex le reclamara a Jackson por sus molestas actitudes hacia mi persona, bien, ahí me di cuenta de lo poco que conozco a mi hermano mayor. En lugar de defenderme se dedica a molestarme con Jackson, aunque siempre me da un beso en la mejilla para que no me enoje, idiota, aun no sabe que no funciona.

Me levanto rápidamente y después de lavar mis dientes me visto. Tomo mi mochila y reviso por última vez si hay respuesta a mi e-mail. La hay. Estoy a punto de abrirla cuando mamá grita desde el primer piso.

— ¡Emily! Alex dice que te apures si no quieres que te deje.

— ¡Voy!

Cierro el computador y corro escaleras abajo. Alex aun está tomando desayuno. Dejo mi mochila junto a la puerta y voy a la cocina, desde donde tomo una manzana. Saco el celular de mi bolsillo y reviso mi correo desde el.

De: fanatico451@mail.com

Para: Emily.Hudson96@mail.com

No. No soy un psicópata.

Rápidamente escribo una respuesta inteligente a su comentario.

De: Emily.Hudson96@mail.com

Para: fanatico451@mail.com

¿Quién me dice a mí que no eres un psicópata? Tengo razones para desconfiar de ti, ni siquiera se tu nombre.

—Emily, ya nos vamos—es Alex, bloqueo mi celular rápidamente, no quiero que vea mis correos con un desconocido.

Echo mi manzana a la mochila y lo sigo hasta la puerta, cuando la voz de mamá nos detiene a ambos.

—Su padre quiere verlos, irá a buscarlos a la salida del instituto—su voz es suave y sé que lo hace para que no nos enojemos. Nunca hemos tenido buena relación con mi “papá”, el simplemente es un desconocido para ambos. Mis padres se separaron cuando yo tenía dos años. El siempre me prometía venir a jugar conmigo o ir a comer a McDonald, por lo que se a Alex le prometía cosas similares. Deje de creerle cuando cumplí siete, cuando llore porque no se presento en mi cumpleaños, ese día trate de llamarlo pero nunca me contesto.

—Bien—es todo lo que Alex dice con voz cansada. De nosotros dos, él es el que mejor lleva todo este asunto de papá, cuando estamos los tres juntos yo prácticamente lo insulto cada cinco minutos, es inevitable. Alex, en cambio, trata de controlarme por lo que guarda su enojo con él mismo.

No me había dado cuenta de que tenía mis puños apretados hasta que entre al auto de Alex. Solté un suspiro. Mire por la ventana y note como dejamos la casa atrás

—Ya se había tardado en aparecer—dice Alex.

—Sabes que lo hace por molestar nada más.

— ¿Con que cara aparece si ni siquiera vino para tu cumpleaños?—La rabia se filtra en su voz.

—Lo conoces, deberías estar acostumbrado.

Mi teléfono suena. Ha respondido. Sonrío sin saber por qué.

De: fanatico451@mail.com

Para: Emily.Hudson96@mail.com

Las cosas anónimas son más románticas ¿No crees? Mantienen la magia.

Una risa sale de mis labios sin que tenga oportunidad de retenerla.

— ¿Hablando con algún chico?—cuestiona Alex— Sabes que soy celoso, así que deberías decirme antes de que te vea manoseándote con algún chico y le saque la mierda.

—Eres asqueroso Alex, nunca dejaría que alguien me manoseara en público, no soy una de tus conquistas—digo mientras ruedo mis ojos.

— ¿Entonces si hay un chico? ¿Dejarías que te manoseara en privado?—Inquiere mientras me mira.

— ¡Dios! ¿Quieres mirar el camino? Me gustaría vivir. Deja el drama, solo es Amanda con sus estupideces—miento, porque conozco su alarma de hermano sobre protector, nunca he sabido cual es su límite y espero no averiguarlo.

—No es drama, eres mi hermanita y es mi deber protegerte.

—Sí, conozco el discurso. Algún día tendré un novio y no podrás hacer nada contra eso—Lo provoco, la verdad me da risa su “protección”.

—Ya verás que cuando eso suceda nos tendrás a mí y a Jackson para amenazarlo, y ya sabes que si alguien te hace daño debes decírmelo, le sacare la mierda, no importa quién sea—no esperaba seriedad de su parte, el tema de papá lo ha dejado tocado.

—Jackson me molesta y tu no le haces nada—murmuro fingiendo estar enojada.

Él ríe. Lo he conseguido, lo he hecho reír.

—Sabes que Jack es un estúpido.

—Como tú.

Alex me saca la lengua cuando paramos en el estacionamiento del instituto.

—Nos juntamos aquí a la salida, y veremos si “papá” llega—Me explica.

—Sip, hermanito hermoso—beso su mejilla antes de salir del coche.

— ¡Te amo!—grita desde adentro.

Riendo entro al salón y tomo asiento junto a la ventana. Saco mi cuaderno y recuerdo el mensaje. Abro para escribir uno nuevo y enviárselo. Ethan llega y sonríe antes de sentarse delante de mí.

De: Emily.Hudson96@mail.com

Para: fanatico451@mail.com

Evidentemente mantienen la magia ¿Pero existe una manera de llamarte que no sea “chico de los e-mails molestos”?

Envió la respuesta y el celular de Ethan suena. Mi entrecejo se frunce. ¿Cuántas posibilidades hay que Ethan sea el de los e-mails?

Ethan observa su celular pero con un veloz movimiento lo bloquea, se da vuelta para hablar conmigo.

—Hola—sonríe y me parece tierno, por lo que termino sonriendo con él.

—Hola.

Conversamos de temas sin importancia hasta que la profesora de biología entra en el salón. Me recuesto en mi silla preparándome para una aburrida clase.

— ¿Ethan? ¿Enserio? ¿Ethan?—susurra Jackson en mi oído causándome escalofríos—Pensé que eras mejor que eso enana.

—¿Cuándo demonios llegaste?—susurro igual que él— ¿Y que diablos te importa a ti?

—Puede que a mí no, pero a tu hermano podría importarle ¿No crees?

¡Dios! ¿Puede mi día empeorar?

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