"My Boss and I"

Todos váyanse al @#!&%¡

-Ahora si estoy muerta... ¿Cómo demonios voy a hacer?- éntré en pánico -¿Cómo rayos le digo a Ian?.

Caminaba de una esquina de la casa a otra, con la mano en la frente, sudando frío y cada vez sintiéndome peor.

-Ahhh... pero esto no es todo culpa mía, también se va a llevar un buen pedazo de postre Ian. Él no usó protección el bastardo ese...- dije yo como si alguien pudiera escucharme.

-Es tu novio pendeja...- dijo la vocesita.

Me enfurecí y golpeé la pared, al instante sentí el dolor y gemí.

-Puede ser el "REY DE ROMA", pero es su culpa...- dije.

-Es culpa de los dos- dijo orgullosa.

Bufé.

-Já, mirénme. Hablando con una voz que solo está en mi cabeza, ¡Qué estúpida!

Me apoyé en la pared, y luego fui dejando caer mi cuerpo hasta el suelo. Y allí venían las lagrimas.

Por mi mente solo pasaba; ¿Cómo se lo digo a Ian?. No me preocupaba el dinero, las cosas del bebé, ni yo. Solo estaba aterrada porque no tenía idea de como se lo iba a decir a Ian. ¿Qué pasaría? ¿Qué me respondería? sí... eso era lo que más me aterraba, LA RESPUESTA.

Una parte de mí estaba feliz, pero la otra tenía tanto miedo como la vez que me enamoré por primera vez.

La vida a veces es injusta, pero el destino siempre tiene un plan. Solo rogaba que el plan que tuviera para mí no arruinara lo mío con Ian. Eso si me destrozaría.

Lo único que me quedaba era esperar.

Aún no podía creer lo que la vida me estaba regalando, pero yo lo sentía como algo malo por alguna razón, aunque también sentía que se me venía algo muy hermoso en el futuro.

Vaya la verdad, no sé que sentir. En este momento mis emocieones estan al cien, TODAS.

Solo quería que llegara el lunes. Solo quería que Ian lo supiera. Pero lo que no quería era que me destrozara.

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Las horas cada vez pasaban más lento, y yo solo quería escapar de ese Tik, toc que me aturdía.

No podía dejar de pensar en la posibilidad de que Ian me rechazara a mí y al bebé.

A veces pasaba por mi cabeza la imagen de una familia feliz, pero luego la seguía otra no tan feliz.

Estaba pasando un momento de tristeza cuando ligeramnete volteé mi cabeza y noté que ya era de día, me levanté casi sin ganas y fui a ver la hora.

3:12 pm

-En 15 horas más, le estaré diciendo a Ian...- suspiré -¿debería llamarlo?- me pregunté -no creo que tenga nada de malo. Soy su novia ¿no?

Fui por mi teléfono y marque su número.

Me senté en el sofá y escuchaba el *bip* ese.

*1 bip*, *2 bip*, *3 bip*, *4 bip* y sonó su contestadora.

Repetí el acto unas 5 o 7 veces, bueno 8 u 11 veces y nadie contestó. Me desviaba las llamadas el muy.......

Me entró una rabia horrible y solo quería romperlo todo.

Mi cara triste cambió a una furiosa. Habían sacado la parte mala de Marie Miller.

-Ese....- tomé aire -¡cálmate!, no es nada. No dejes que eso te afecte. Ya verá, solo espera- me dije a mí misma.