Yo confundida.

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Se dan cuenta de que soy una llorona, indecisa, idiota. O sea, no sé si le gusto a Mattew pero aún así estoy confundida, Dios... ¿qué tipo de mier*a hay en mi cabeza?

Bueno, allí me encontraba con mi hija... mirando sus ojos, sus bellos ojos. Idénticos a los de su padre, su idiota padre. Y hablando de el rey de Roma, tocó a mi puerta... ¿y cómo sé que es él? fácil, es el único energumeno que viene a las 10:00 pm.

Me decidí y fui hacia la puerta, la abrí.

-Hola- dijo él.

-Pasa...- dije.

En sus manos traía una bolsa, se sentó en el sofá al lado de el corral de la bebé y la observó.

-Que raro que está despierta a esta hora...- dijo.

-Lo sé...- respondí.

Me miró a mí y en su mirada se notaba tristeza.

-Toma- me dió la bolsa -eso es para Lily y chocolates para tí.

-Gracias- dije.

No podía creerlo, la maldita tensión se podía cortar con un cuchillo. Lo juro.

Mientras el bloque de hielo se hacía cada vez más grande me di cuenta de que sonaba mi teléfono. Ian tomó a Lily y creo que intentaba dormirla. Tomé el teléfono y cuando vi quien era, me puse a sudar frío, por qué, por qué ahora. Demonios.

-Aló- dije esperando la respuesta.

-Aló, soy Matt- dijo él y yo solo quería alejarme lo más posible para que Ian no escuchara nada.

-Sí, lo sé...- dije.

-¿Qué haces?- preguntó.

¿Por qué demonios este chico grita por teléfono? Si Ian escucha, moriré.

-Nada, ¿y tú?- dije mientras me dirigía a la cocina.

-Bueno, trabajo.... ya sabes. ¿Tienes planes para el viernes?- dijo y en ese momento entró Ian. 

Mis ojos se abrieron como platos, ¿por qué no sé disimular Jesús?. Él notó que algo extraño pasaba, me miraba raro mientras sostenía a Lily.

-Aló, ¿Marie?- dijo Mattew al notar que me tardaba en responder?

Yo solo quería que Matt dejara de gritar.

-¿Quién es?- preguntó Ian.

-Una amiga- dije.

-¿Qué?- dijo Mattew al teléfono.

Dios mío, alguien que calle al idiota por el teléfono.

-Sí, sí tengo...- le dije a Matt por el eléfono mientra me alejaba de Ian.

Ian se acercó.

-¿Sí tienes qué?- preguntó Ian.

-Ahhh... okey.- dijo Matt.

-Tengo que colgar, adiós- dije y actó seguido colgué.

Ian me miraba confundido, pero yo sabía que el sabía que algo estaba pasando, él lo notaba en mi mirada y yo en la suya, estabamos dando vueltas por la cocina, éls e acercaba y yo me alejaba.

-Vamos a la sal, mira... ya se durmió Lily- dije para evadir.

Él me siguió, pero aún tenía los ojos entrecerrados. Dejó a Lilian en el cuarto y volvió, yo estaba aterrorizada, ustedes saben de lo que es capaz este hombre. Al volver, me miró, se sentó y yo moría de miedo.

.¿Quién era?- preguntó serio?

-Una amiga, te dije ya-  respondí.

-La verdad- se levantó del sofá y mi valentía se sentó en él.

-¿Qué carajos te importa a ti?- dije.

Se acercó a mi, sin tomarme de alguna extremidad pero me incomodaba.

-Dime la maldita verdad, Marie Miller- dijo firme.

Me armé de valor y se lo escupí en la cara.

-Un amigo- respondí.

Sonrió, se dio la vuelta y volvió a sentarse en el sofá. Su risa malevola, la odio pero la amo.

-¿Y por qué no me dijiste la verdad desde el principio?- preguntó sonriendo.

-Porque...

-Espera- me calló -porque ocultas algo, ¿quién es él?.

-Un amigo...

-Marie...- dijo molesto.

-Un compañero de la secundaria, c*ño- respondí.

Se levantó de nuevo, caminó hacia mí con una sonrisa diabolica y me tomó por la mano.

-¿Qué tienes con él?- preguntó.

-Deja de hacer preguntas absurdas...

Apretó más mi mano.

-¿Por ese es que ya no me quieres?- dijo como la novia psicopata. 

-¿Qué te pasa?- gemí -duele c*ño.

-Lo siento...- dijo.

Que demonios le pasa... admito que lo extrañaba, pero en serio me lastimó. Creo que ahora me da un poco de miedo.

-Marie...- dijo.

-¿Qué?- respondí de mala manera.

-¿Me quieres?- preguntó.

Lo miré y volví a posar la mirada en la dirección anterior. No sé si lo amo, no lo sé, joder. Se está comportando como una novia psicopata en este momento y me asusta. ¿Qué c*ños le pasa?

-Responde- dijo.

-No lo sé, joder- respondí.

A veces me cansa pero admito que no podría vivir sin él.

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Luego de casi una hora incomoda, decidió irse. Gracias al señor.

Luego de que se fue me llamo Mattew de nuevo, y me pidió una cita y accedí. Y diganme loca, pero en la cita le iba a preguntar si gustaba de mí, sí. Como niña de secundaria.

Nota de la Autora: Hola, tiempo perdida.... lo sé u.u pero he vuelto, por ahora .-. entiendan, tengo mucha tarea, a duras penas hice este capítulo. Lee el próximo para enterarte de que mamarrachada hace Marie... creo que les gustará XD

PREGUNTA: No tengo pregunta esta semana, porque estoy vieja y ya no pienso mucho xD Así que haganme preguntas a mí, no lo sé, para cambiar de rutina. Y felicitenme el 14 de el mes próximo, que cumple años la Yo....

Gracias por leer. 

Autora: Lizzie M.

"My Boss and I"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora